Doce m¨¢s uno

Ni a 95 euros ni a 300. No hab¨ªa entradas ni manera de conseguirlas. Pero no s¨®lo para la final. Pr¨¢cticamente a lo largo de todo el Eurobasket result¨® una misi¨®n imposible lograr un billete. El p¨²blico se volc¨® con una selecci¨®n espa?ola que engancha, dentro y fuera de la pista, sin distinciones de procedencia. La gente se vuelca y vibra con un equipo muy concienciado de que su afici¨®n es tambi¨¦n un ingrediente indispensable en sus triunfos. "El a?o pasado, en Jap¨®n, cuando ganamos el Mundial, ya nos dimos cuenta, pero l¨®gicamente no fue lo mismo. No lo vives de la misma forma, no lo palpas. La repercusi¨®n medi¨¢tica ha sido inmensa. Complacerles es una sensaci¨®n muy gratificante", dice Garbajosa. "Vamos en el mismo carro y hemos enganchado muy bien a la afici¨®n porque vamos de cara y es lo que hay. Estamos ense?ando lo que somos realmente. Eso es lo que a la gente le gusta", remacha Calder¨®n.

"Ense?amos lo que somos realmente. Eso es lo que a la gente le gusta", apunta Calder¨®n

"Los seguidores no han supuesto un peso extra, sino una mayor motivaci¨®n", dice Pepu

El Palacio de la Comunidad se ha llenado hasta los topes cada d¨ªa para ver a la roja, de la misma forma que se llen¨® el Madrid Arena, el San Pablo de Sevilla y todos los pabellones que la selecci¨®n visit¨® durante la fase de preparaci¨®n. La federaci¨®n espa?ola lanz¨® una exitosa campa?a de promoci¨®n dirigida por Julio Le¨®n para apoyar a la selecci¨®n denominada E?eman¨ªa, que ha pintado de color rojo la grada porque se regalaron a quienes acud¨ªan a los partidos miles de camisetas.

Cuando las entradas se pusieron a la venta el pasado julio, los abonos para la fase final se vendieron en apenas tres horas, las entradas en 55 minutos y la p¨¢gina web al efecto recibi¨® m¨¢s de 700.000 visitas en ese intervalo. Las audiencias televisivas de los partidos se han situado alrededor de los tres millones.

El pr¨ªncipe Felipe se ha distinguido como uno de los m¨¢s firmes seguidores del equipo espa?ol, al igual que un sinf¨ªn de pol¨ªticos -Rodr¨ªguez Zapatero, Rajoy...- de todas las adscripciones que han visitado a la selecci¨®n y han acudido a sus partidos. Tambi¨¦n otros deportistas como Rafa Nadal, amigo de Pau Gasol y otros jugadores de la selecci¨®n, o el popular presentador y showman de televisi¨®n Andreu Buenafuente.

Los jugadores han atendido con paciencia todo tipo de peticiones para hacerse fotograf¨ªas con los seguidores, firmar aut¨®grafos o simplemente saludar a los seguidores. Eso ha supuesto alg¨²n que otro desfase en cuanto a horarios se refiere. Pepu Hern¨¢ndez lo da todo por bien empleado. "Ha podido comportar alguna posibilidad de distracci¨®n porque la gente sabe que este equipo es cercano, que puede estar con ellos. Puede que, en un momento determinado, a lo mejor eso nos haya quitado lo que yo considero imprescindible: equilibrar el descanso, el trabajo y el ocio. Pero, aun as¨ª, es una maravilla. No ha supuesto un peso extra, sino una mayor motivaci¨®n", concluye el seleccionador.

El m¨¢s solicitado por la afici¨®n, de manera indefectible, es Pau Gasol. Aguanta lo que haga falta. La semana pasada, sus compa?eros, hartos de esperar cada d¨ªa en el autocar, le montaron en broma una sentada de protesta por su tardanza. No hac¨ªa sino firmar aut¨®grafos, el mejor s¨ªntoma del enganche de esta selecci¨®n cuyos jugadores se comportan como juegan. De maravilla.