Sarkozy pide a los franceses fe en la "cultura del esfuerzo"

Un Nicolas Sarkozy vehemente y cercano se asom¨® ayer a los hogares de los franceses para explicarles la bater¨ªa de reformas que ha puesto en marcha, para pedirles que se conviertan a la "cultura del esfuerzo" y para se?alarles los males at¨¢vicos que aquejan al pa¨ªs, que hasta ahora nadie se ha atrevido a combatir. El presidente mand¨® una se?al clara a los sindicatos y a los funcionarios: los reg¨ªmenes especiales de pensiones han acabado y la Administraci¨®n funcionar¨¢ con criterios de efectividad.

Entrevistado en su nuevo despacho de la planta baja del palacio del El¨ªseo por los presentadores de los dos principales noticieros televisados, Sarkozy explic¨®, recurriendo a la pedagog¨ªa y los ejemplos, las razones por las que considera inevitable la reforma en profundidad del Estado, as¨ª como la absoluta necesidad de que los franceses cambien sus viejas certezas y establezcan un nuevo contrato social. Se mostr¨® partidario de establecer cuotas para la inmigraci¨®n, tanto por profesiones como por pa¨ªses de origen. "Fui elegido para encontrar soluciones a los problemas de Francia, no para comentarlos", dijo.

Sarkozy utiliz¨® la t¨¢ctica del halago y la comprensi¨®n, mezclada con la promesa de que no dar¨¢ su brazo a torcer. La reforma de los reg¨ªmenes especiales de pensiones -que otorgan ventajas a medio mill¨®n de franceses, sobre todo trabajadores de los grandes monopolios p¨²blicos y del sector del transporte- se llevar¨¢ a cabo antes de fin de a?o, asegur¨®. Quienes tienen esos privilegios "no son culpables", dijo, "no hay que estigmatizarlos, pero si todos los asalariados tienen que cotizar 40 a?os y los ¨²nicos que no lo hacen son ellos propongo alinearlos con los dem¨¢s".

?Y si hay huelgas? "Es un derecho constitucional, no se puede impedir". E insisti¨®: "No quiero levantar a una parte de la opini¨®n publica contra ellos (...) pero no hay dos categor¨ªas de franceses (...) y si arreglamos esto podremos poner sobre la mesa la cuesti¨®n de las peque?as pensiones, que s¨ª que es un problema".

La reforma del Estado empieza por acabar con la esclerosis de la funci¨®n p¨²blica. "No existe la movilidad", indic¨®, "existe la enfermedad de los concursos y los ex¨¢menes, hay que valorar el m¨¦rito, la experiencia, la capacidad de trabajo; reconocer el buen trabajo como se hace en la empresa privada", se?al¨®. Y puso como ejemplo al profesor dedicado que "todo el mundo reconoce, que se molesta en sacar a sus alumnos a ver un museo o ir al teatro". "?Saben ustedes que en la funci¨®n p¨²blica las horas extra son pagadas peor que las horas normales, y que en los hospitales ni siquiera se pagan?", pregunt¨® a los entrevistadores.

Bajo crecimiento

No tuvo respuestas para explicar que el crecimiento econ¨®mico de Francia seguir¨¢ por debajo del 2%, por lo que no llegar¨¢ m¨¢s dinero a las arcas del Estado. "Este a?o ya no se puede hacer nada; en 2008 lo haremos crecer y 2009 ya ser¨¢ el m¨ªo, estaremos cerca del 3%". Pero rechaz¨® aplicar una pol¨ªtica de austeridad. "Creo en una pol¨ªtica del esfuerzo, la austeridad tira a la baja, hay menos ingresos".

Entr¨® en detalles y nombres. Neg¨® que preparara una remodelaci¨®n del Gobierno y defendi¨® a su ministro de Exteriores, el socialista Bernard Kouchner, pero admiti¨® que ¨¦l "no habr¨ªa utilizado la palabra guerra para referirse al problema de Ir¨¢n". Francia "no quiere la guerra", asegur¨®. Pero Ir¨¢n "intenta dotarse de la bomba nuclear", lo que es "inaceptable". Tambi¨¦n dijo que es ¨¦l quien se opone a que su esposa, C¨¦cilia, testifique ante la futura comisi¨®n de investigaci¨®n parlamentaria sobre la liberaci¨®n de las enfermeras b¨²lgaras en Libia, el pasado julio.

Respecto a sus enfrentamientos con el presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, y sus cr¨ªticas a la pol¨ªtica monetaria del euro, no dio un paso atr¨¢s. "Acepto su independencia pero eso no quiere decir que no pueda criticarlo". Y respecto a la crisis financiera por las hipotecas de alto riesgo fue taxativo: "La econom¨ªa del mundo no debe ser penalizada por el comportamiento insensato de un centenar de especuladores".

La fecha del primer asalto ya est¨¢ fijada: la huelga de los empleados de los ferrocarriles p¨²blicos franceses (SNCF) ser¨¢ el pr¨®ximo 18 de octubre. Ayer, los sindicatos la aplazaron 24 horas para no coincidir con la Jornada Mundial de rechazo a la Miseria. Las federaciones de la CGT, Fuerza Obrera, la CFTC, Sud rail y la CGC la han convocado "para reaccionar y pensar sobre el futuro del r¨¦gimen especial de pensiones, la situaci¨®n del transporte de mercanc¨ªas y el empleo". Los empleados de los transportes p¨²blicos de Par¨ªs, la RATP, no se han sumado a la convocatoria, aunque no descartan movilizarse.