El pacto de Rusia y Ucrania despeja el suministro de gas a Europa

Los europeos pueden estar tranquilos. El suministro de gas para el pr¨®ximo invierno est¨¢ garantizado gracias al acuerdo entre Mosc¨² y Kiev. Aunque Rusia ha aprovisionado a Europa durante 30 a?os sin interrupci¨®n, a pesar de los m¨²ltiples acontecimientos pol¨ªticos, cualquier conflicto entre Mosc¨² y los pa¨ªses de tr¨¢nsito hace temblar a las empresas y a los consumidores europeos. Rusia suministra el 25% del gas y el petr¨®leo que consume la Uni¨®n Europea. Adem¨¢s, el 80% del gas atraviesa Ucrania.

Ante esta fuerte dependencia energ¨¦tica exterior, el acuerdo firmado el pasado d¨ªa 8 entre el consejero delegado del conglomerado industrial ruso Gazprom, Alexei Miller, y el ministro de combustible y Energ¨ªa de Ucrania, Yuri Boiko, tiene una especial relevancia para Europa. El acuerdo salda la deuda de 1.300 millones de d¨®lares (930 millones de euros) que ten¨ªa pendiente Ucrania desde hac¨ªa tiempo.

Al estallar el conflicto, la Comisi¨®n Europea (CE) se dirigi¨® a Gazprom y al Gobierno de Ucrania para que resolvieran el contencioso lo antes posible. Por esta raz¨®n, Bruselas fue ayer la primera en saludar de forma entusiasta el acuerdo porque, seg¨²n subray¨®, supone "un reforzamiento de la fiabilidad" de Mosc¨² y de Kiev.

El comisario de Energ¨ªa, Andris Piebalgs, manifest¨® ayer que "la soluci¨®n r¨¢pida encontrada a este problema de comercio bilateral y el nivel de transparencia que han mostrado las dos partes durante esta historia refuerzan la reputaci¨®n de fiabilidad de Rusia y de Ucrania como suministrador y pa¨ªs de tr¨¢nsito para los mercados europeos".

A pesar del acuerdo, la Comisi¨®n mantiene la convocatoria de la reuni¨®n extraordinaria del grupo de coordinaci¨®n de gas que se celebrar¨¢ los pr¨®ximos d¨ªas.

Durante los ¨²ltimos a?os, los suministros de gas procedentes de Rusia se han reforzado con contratos a largo plazo. En este sentido cabe se?alar la prolongaci¨®n de los contratos entre Gazprom y E.ON hasta 2036; ENI hasta 2035 y Wintershall, hasta 2030.

Las importaciones de gas procedentes de Rusia crecer¨¢n a un ritmo incesante en los pr¨®ximos a?os. En 2005 la Uni¨®n Europea import¨® 330 bcm (miles de millones de metros c¨²bicos) y seg¨²n los ¨²ltimos estudios las proyecciones para 2015 sit¨²an las necesidades en 550 bcm.

Para hacer frente a estas necesidades crecientes, en 2005 se firm¨® un acuerdo entre Gazprom (51%), BASF ( 24,5% ) y E.ON (24,5%) para construir el nuevo gasoducto Nord Stream que tiene una longitud de 1.200 kil¨®metros, buena parte bajo las aguas del mar B¨¢ltico. La capacidad inicial ser¨¢ de 20 bcm anuales, ampliables hasta 55 bcm para 2011. La inversi¨®n asciende a 5.700 millones de d¨®lares (4.027 millones de euros).

Nuevo proyecto

Gazprom planea la construcci¨®n de otro gasoducto denominado South Stream, con una longitud de cerca de 900 kil¨®metros, un proyecto que contar¨ªa con la participaci¨®n de su socio ENI. Tras su enfrentamiento con varias compa?¨ªas extranjeras (la estadounidense Conoco Phillips y la noruega Norsk Hydro, que pugnaban por el control de los campos de Sajal¨ªn 2, Kovikta y Shtokman), el presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin, ha abierto la mano al grupo franc¨¦s Total, que podr¨ªa hacerse con el 25% de estas inversiones.

El cambio de criterio de Rusia hacia una posici¨®n m¨¢s abierta a ciertas empresas europeas se explica en parte por la necesidad de acometer las inversiones y acceder a la tecnolog¨ªa, de la que los mandatarios carecen para llevar adelante sus proyectos. Como consecuencia de ello, Rusia se ha visto obligada a disminuir sus inversiones en Shtokman a la mitad.