Batalla campal en San Sebasti¨¢n entre j¨®venes radicales y la Ertzaintza

Grupos organizados de la izquierda abertzale pusieron ayer patas arriba el centro de San Sebasti¨¢n tras librar una batalla campal con agentes de la Ertzaintza como no se hab¨ªa vivido en a?os en la capital guipuzcoana. Los violentos volcaron numerosos contenedores, a los que prendieron fuego, intentaron quemar dos autobuses cruzados en la calle y atacaron entidades bancarias. La polic¨ªa vasca, que en ocasiones tuvo que replegarse, detuvo a dos personas a un kil¨®metro del lugar de los hechos.

Las calles m¨¢s c¨¦ntricas de San Sebasti¨¢n presentaban un aspecto casi b¨¦lico tras los enfrentamientos. Los contenedores ard¨ªan en varios puntos, sendos autobuses fueron cruzados en la Avenida de la Libertad y la Plaza Guip¨²zcoa, varios bancos sufrieron da?os, lunas de coches destrozadas, sem¨¢foros arrancados... La refriega, en la que participaron varios cientos de personas, hab¨ªa sido cuidadosamente organizada y dirigida por grupos de la izquierda abertzale.

Los incidentes comenzaron a las 16.15, al acabar un concierto "antifascista" promovido por ANV, el sindicato LAB y las ilegalizadas Batasuna y Segi y al que se sumaron la CNT y grupos juveniles comunitas. Su intenci¨®n era impedir una manifestaci¨®n convocada por la Falange a las 17.00 en el mismo lugar y que hab¨ªa sido autorizada por el Tribunal Superior de Justicia vasco. Los asistentes al concierto (casi un millar de personas), al ver acercarse a las dotaciones policiales, empezaron a proferir vivas a ETA y gritos a favor de la independencia y en contra de la Ertzaintza y del encarcelamiento de la c¨²pula de Batasuna. Acto seguido lanzaron bengalas y petardos dentro de botellas contra los agentes, que hab¨ªan acordonado la zona para evitar incidentes.

Una carga policial logr¨® dispersar a los concentrados, pero los radicales lograron reorganizarse y emprendieron de inmediato la batalla desde otros puntos de la ciudad. Lanzaron sus acometidas desde varios flancos y de forma simult¨¢nea. Actuaban de forma coordinada: primero volcaban los contenedores en el centro de las calles y mientras un grupo los empujaba hacia los agentes como barricada, otros encapuchados lanzaban una lluvia de botellas con petardos y piedras. Pese a realizar cargas con pelotas de goma, los agentes tuvieron que replegarse en varias ocasiones ante la intensidad de los ataques. Los accesos al centro de la ciudad quedaron cerrados durante las casi tres horas que duraron los incidentes. Un testigo asegur¨® que entre los radicales hab¨ªa "menores de no m¨¢s de 12 o 13 a?os". Algunos saboteadores aprovecharon para sacarse fotos junto a las llamas.

Mientras se produc¨ªan los hechos, la Ertzaintza mantuvo retenidos fuera de San Sebasti¨¢n a los cerca de 500 ultraderechistas, entre ellos Ricardo S¨¢enz de Ynestrillas, que hab¨ªan acudido al acto. Finalmente, desistieron de realizar la marcha en la ciudad y se concentraron entre gritos y c¨¢nticos en un centro comercial en la periferia de la capital guipuzcoana.

[Cinco bancos y el juzgado de la localidad vizca¨ªna de Durango fueron atacados de madrugadsa con c¨®cteles molotov que causaron escasos da?os].