El coordinador del concurso de la Cidade da Cultura no se acuerda ni de su contrato
PSdeG y BNG sospechan que la desviaci¨®n presupuestaria estaba en el origen del proyecto
No se acuerda. El responsable de la coordinaci¨®n del concurso internacional que decidi¨® encargar a Peter Eisenman el proyecto de la Cidade da Cultura, Alfredo D¨ªaz Grande, asegur¨® ayer en el Parlamento que no tiene memoria suficiente para explicar su contrato ni sus retribuciones. Durante su comparecencia ante la comisi¨®n que investiga la gesti¨®n del proyecto, D¨ªaz Grande se limit¨® a subrayar los m¨¦ritos profesionales de los miembros del jurado y de los arquitectos que se presentaron al concurso y dej¨® sin respuesta todas las preguntas del PSdeG y del BNG.
El arquitecto Alfredo D¨ªaz Grande, que lleg¨® a la comisi¨®n de investigaci¨®n escoltado por los diputados del Partido Popular, dedic¨® su primera intervenci¨®n a explicar que su trabajo en relaci¨®n con la Cidade da Cultura ten¨ªa por objeto asesorar la celebraci¨®n del concurso internacional de arquitectura que en 1999 decidi¨® elegir el proyecto presentado por el norteamericano Peter Eisenman. D¨ªaz Grande atendi¨® a una pregunta del portavoz del PP, Ignacio L¨®pez-Chaves, y explic¨® con todo lujo de detalles el curr¨ªculum profesional de los profesionales de la arquitectura que formaron parte del jurado y de aquellos que se presentaron al concurso, pero dej¨® sin respuesta todas las preguntas que le formularon los portavoces del PSdeG, Xaqu¨ªn Fern¨¢ndez Leiceaga, y del BNG, Carlos Aymerich. "No tengo m¨¢s memoria para entrar en otras cosas", afirm¨®. "Han pasado ocho a?os y no me acuerdo de m¨¢s historias".
Presionado por los representantes de los grupos socialista y nacionalista, el coordinador del concurso que decidi¨® el proyecto arquitect¨®nico de la Cidade da Cultura se limit¨® en su ¨²ltima intervenci¨®n a afirmar que no ten¨ªa "incompatibilidad legal alguna" para ejercer esa funci¨®n y que entonces prestaba servicios como asesor del conselleiro de Cultura, Jes¨²s P¨¦rez Varela. "No me acuerdo de lo que cobr¨¦", insisti¨®. "Supongo que estar¨¢ en los documentos de la conseller¨ªa".
Sin respuesta
La falta de memoria de D¨ªaz Grande dej¨® sin respuesta todas las preguntas del PSdeG y el BNG que trataban de establecer su relaci¨®n con la g¨¦nesis del proyecto. El coordinador del concurso no aclar¨® cu¨¢ndo fue contratado, si lo fue a trav¨¦s de una asistencia t¨¦cnica o cu¨¢nto cobr¨® por sus servicios. Tampoco quiso precisar si fue seleccionado por sus m¨¦ritos profesionales o porque est¨¢ casado con la diputada del PP Pilar Rojo, en aquella ¨¦poca delegada provincial de Cultura en Pontevedra, o por su amistad personal con el presidente popular, Mariano Rajoy. Ni su mujer ni el l¨ªder del PP "estar¨¢n contentos" con "su desmemoria", ironiz¨® el portavoz del Bloque. "Que no conteste es suficientemente elocuente", a?adi¨®.
Tanto Leiceaga como Aymerich expresaron sus dudas sobre el alcance de la participaci¨®n de D¨ªaz Grande en el proyecto, porque en la documentaci¨®n sobre la Cidade da Cultura constan documentos elaborados por ¨¦l un a?o antes del concurso. En ellos el coordinador establece presupuestos, habla de contenidos e incluso llega a proponer la conveniencia de crear la fundaci¨®n que posteriormente se har¨ªa cargo de la gesti¨®n de la iniciativa, una sugerencia que, tanto para el PSdeG como para el Bloque, entra en el terreno de las "decisiones pol¨ªticas". "Da la impresi¨®n de que usted es el autor intelectual", lleg¨® a afirmar Leiceaga.
Tambi¨¦n fue objeto de atenci¨®n por parte de ambos portavoces el hecho de que, mucho antes de la convocatoria del concurso, D¨ªaz Grande diera por segura la participaci¨®n de buena parte de los arquitectos que finalmente fueron seleccionados.
D¨ªaz Grande tampoco respondi¨® a uno de los asuntos a los que Leiceaga y Aymerich dedicaron m¨¢s atenci¨®n: por qu¨¦ el concurso estableci¨® que la ¨²nica limitaci¨®n de los dise?os arquitect¨®nicos eran los usos del complejo y no se estableci¨® ninguna salvaguarda econ¨®mica que asegurase la eficacia y la eficiencia en el uso de fondos p¨²blicos. En esa decisi¨®n, se?alaron ambos, est¨¢ "la semilla" de la desviaci¨®n econ¨®mica de la Cidade da Cultura.
D¨ªaz Grande no quiso tampoco hablar sobre este asunto, pero s¨ª se mostr¨® esperanzado con que "dentro de 25 a?os, igual que se viene a Santiago a ver la catedral, se venga a ver la Cidade da Cultura".
Los populares dicen que socialistas y nacionalistas tienen fobia al proyecto
El portavoz del PP, Ignacio L¨®pez-Chaves, apenas dedic¨® tiempo ayer a hablar del papel del compareciente en relaci¨®n con el proyecto. Sus preguntas, sin embargo, en las que le ped¨ªa que diese cuenta de su experiencia profesional y calificase a los miembros del jurado, fueron las ¨²nicas que merecieron respuesta.
L¨®pez-Chaves se mostr¨® mucho m¨¢s interesado en denunciar la supuesta existencia de vetos a la hora de solicitar comparecencias y en acusar a la presidenta de la comisi¨®n, Ana Pont¨®n (BNG), de intentar censurarle por pedirle que se atuviera al orden del d¨ªa.
El portavoz de la oposici¨®n se desentendi¨® de la exposici¨®n del arquitecto coordinador y prefiri¨® acusar a socialistas y nacionalistas de padecer "gaiasfobia" y de retrasar deliberadamente las obras de la Cidade da Cultura, "llev¨¢ndolas al caos en que ahora se encuentran". L¨®pez-Chaves combin¨® su alegato con acusaciones al conselleiro de Industria, Fernando Blanco, al que reproch¨® haber firmado contratos con una empresa de su hermano (mostr¨® una factura desde su esca?o), y alusiones a las supuestas irregularidades cometidas por el gobierno en relaci¨®n con la Autov¨ªa del Barbanza.
El representante popular, que la mayor parte del tiempo dirigi¨® sus palabras a los asientos reservados a los periodistas acreditados en el Parlamento, acus¨® al Bloque de cuestionarlo todo, desde la Cidade da Cultura a la Constituci¨®n, la autonom¨ªa y la autopista del Atl¨¢ntico, frente a un PSdeG que da por bueno el resultado del concurso que encarg¨® el proyecto a Peter Eisenman.
L¨®pez-Chaves trat¨® de argumentar que los nacionalistas cuestionan la decisi¨®n del jurado internacional para acusarles de "dirigismo cultural" y acab¨® exigiendo la comparecencia urgente ("ma?ana mismo", pidi¨®) de dos altos cargos de Cultura para aclarar el paradero de la biblioteca del escritor y catedr¨¢tico Xes¨²s Alonso Montero, adquirida en su d¨ªa por la Xunta para incorporarla a la Cidade da Cultura, y sobre cuyo lugar de almacenaje el portavoz del Bloque hab¨ªa expresado sus dudas el pasado lunes.
Aymerich aclar¨® que el problema no es d¨®nde est¨¢n los libros, sino que el propio Alonso Montero era miembro de la ponencia que decidi¨® que la Xunta adquiriese la biblioteca de su propiedad.
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