Presi¨®n policial en la Ca?ada Real
M¨¢s de 50 agentes controlan el acceso a la zona de la casa derribada el jueves
"S¨®lo les falta pegarme un tiro. Ya no me queda nada, ni casa ni furgoneta". Abdul Ghailan, de 30 a?os, perdi¨® el pasado jueves su vivienda de la Ca?ada Real Galiana, que fue derribada por una gr¨²a municipal. Ayer, un control policial le arrebat¨® tambi¨¦n su medio de vida, una furgoneta que utiliza para llevar material de construcci¨®n. No ten¨ªa la documentaci¨®n, perdida, seg¨²n asegura, entre los escombros de su casa. Ense?¨® el seguro, a su nombre, pero no fue suficiente.
La polic¨ªa no deja de vigilar la zona de la Ca?ada en la que viv¨ªa Abdul, la parte norte del poblado. Por la ma?ana, la Polic¨ªa Nacional par¨® y cache¨® a los vecinos. Algunos aseguran que hubo cuatro detenidos, extremo que la polic¨ªa no confirma. Por la tarde, 20 veh¨ªculos de polic¨ªa nacional antidisturbios, municipal y guardia civil llegaron sobre las seis a uno de los accesos, parando a los conductores y registrando los coches de todos los que regresaban de trabajar a sus casas. "S¨®lo es un control rutinario", indic¨® un agente.
La noticia de la llegada de los furgones corri¨® como la p¨®lvora por la Ca?ada. Los vecinos decidieron meterse en sus casas ante el temor de una carga policial. "?Vienen a por nosotros!", gritaba una mujer, muy nerviosa. "Luego dicen que les provocamos, pero llevamos toda la tarde aqu¨ª tranquilos y mira..." Por la rendija de la puerta de una casa se ve¨ªan los ojos de una ni?a marroqu¨ª muy asustada.
En la Ca?ada Real viven, seg¨²n c¨¢lculos policiales, unas 40.000 personas en viviendas ilegales que se han ido asentando en la zona desde los a?os 70. Los vecinos saben que no tienen derecho a estar all¨ª y que en cualquier momento el Ayuntamiento pod¨ªa decidir tirar abajo sus casas. Pero no entienden por qu¨¦ ahora ni por qu¨¦ se ha derribado s¨®lo la casa de un marroqu¨ª, aunque haya una orden judicial. "Creo que es un error pol¨ªtico muy grande lo que ha ocurrido", razonaba ayer Kamal Rahmouni, presidente de Atime, la Asociaci¨®n de Trabajadores Inmigrantes Marroqu¨ªes en Espa?a. "Y en el contexto de islamofobia que vivimos esto no ayuda nada. Las administraciones tienen que ponerse de acuerdo y plantear ya una soluci¨®n para todos estos vecinos, espa?oles, marroqu¨ªes y de otras nacionalidades, que llevan muchos a?os viviendo aqu¨ª con sus hijos. No se les puede echar a la calle sin m¨¢s cuando ellos han permitido que esto crezca sin l¨ªmite durante m¨¢s de 30 a?os", a?ade.
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