Breve gu¨ªa de la noche

Si esto es un hombre, Primo Levi (El Aleph). Es el gran cl¨¢sico entre los testimonios sobre los campos de concentraci¨®n. Como tantos jud¨ªos secularizados, el turin¨¦s Primo Levi cobr¨® conciencia de serlo cuando lo deportaron a Auschwitz. En 1947, s¨®lo dos a?os despu¨¦s de su liberaci¨®n, Levi narr¨® en 200 p¨¢ginas su paso por un lugar en el que a la crueldad de los verdugos se sumaba el papel de algunas v¨ªctimas como transmisores de esa crueldad. El libro pas¨® inadvertido y su autor, desanimado, tard¨® casi veinte a?os en contar en La tregua (El Aleph) su interminable vuelta a casa. En 1996, Francesco Rosi adapt¨® al cine aquel rocambolesco viaje. John Turturro hac¨ªa el papel de Primo Levi, que se hab¨ªa suicidado en 1987.

La especie humana, Robert Antelme (Arena). Tambi¨¦n en 1947, Antelme, marido de Marguerite Duras, cont¨® su propia experiencia como deportado. "Quer¨ªamos hablar, ser escuchados al fin", escribe, "sin embargo, nos parec¨ªa imposible colmar la distancia que descubr¨ªamos entre el lenguaje del que dispon¨ªamos y esta experiencia que, para la mayor¨ªa de nosotros, continuaba en nuestro cuerpo". El resultado es una "reivindicaci¨®n enloquecida" del hecho de pertenecer, de ah¨ª el t¨ªtulo, a la especie humana. Hasta eso le hab¨ªan negado.

Sin destino, Imre Kert¨¦sz (Acantilado). Posiblemente, el ejemplo m¨¢s estremecedor de literatura sobre el Holocausto. Y no s¨®lo porque sea un muchacho de quince a?os el que cuenta lo que vivi¨® sino porque, ya se trate de la brutalidad de los carceleros o de la picaresca de los presos, lo cuenta todo con la frialdad de un chaval al que resulta dif¨ªcil arruinarle las ganas de vivir. "Es m¨¢s f¨¢cil destrozar a un adulto", ha dicho Kert¨¦sz, que public¨® esta novela autobiogr¨¢fica en 1975. En Espa?a est¨¢ pendiente de estreno la adaptaci¨®n que hace dos a?os rod¨® Lajos Koltai. En 2002, el escritor h¨²ngaro obtuvo el Premio Nobel de Literatura.

Nuestro hogar es Auschwitz, Tadeusz Borowski (Alba). En Dossier K., un libro-autoentrevista, Kert¨¦sz subraya como uno de los grandes textos sobre los lager 'Pasen al gas, se?oras y se?ores', un relato desoladoramente funcionarial recogido en este volumen de Tadeusz Borowski. Superviviente de Auschwitz y Dachau y convertido en uno de los autores oficiales del r¨¦gimen comunista polaco, se suicid¨® en 1951 abriendo el gas de su cocina.

La escritura o la vida, Jorge Sempr¨²n (Tusquets). Al contrario que Levi o Antelme, Sempr¨²n tuvo que dejar pasar el tiempo antes de poner por escrito sus d¨ªas en Buchenwald. Aunque casi toda su obra gira en torno a ellos, este libro de 1995 zanj¨® la disyuntiva por la que, en confesi¨®n del propio autor, la escritura antes de hora le hubiera llevado al suicidio.

La noche, Elie Wiesel (El Aleph). El libro de Sempr¨²n se abre con el momento en que el escritor se contempla, demacrado, en un espejo -en los campos de concentraci¨®n no hab¨ªa- despu¨¦s de a?os sin ver su propio rostro. Y as¨ª es justamente como termina La noche, el relato en el que Elie Wiesel, recluso A-7713, recogi¨® la experiencia en la que perdi¨® a su familia y, de paso, la fe.

Una vida conmocionada, Etty Hillesum (Anthropos). Un diario que se ha comparado con el de Ana Frank. Su autora, tambi¨¦n holandesa, pudo haberse librado de la muerte por sus conexiones con el Consejo Jud¨ªo de Amsterdam, pero prefiri¨® acompa?ar a su familia a Auschwitz. All¨ª murieron todos en 1943. La misma editorial ha publicado tambi¨¦n sus cartas, El coraz¨®n pensante de los barracones.

Auschwitz y despu¨¦s, Charlotte Delbo (Turpial). La escritora francesa lleg¨® al campo de concentraci¨®n en un convoy de m¨¢s de 200 mujeres. Sobrevivieron 49. Tras la liberaci¨®n public¨® una trilog¨ªa en la que casi tanto como el universo concentracionario impresiona la mezcla de pasmo, incomprensi¨®n y culpa a la que tienen que acostumbrarse los supervivientes. La vuelta a casa es, en efecto, un cruel cap¨ªtulo aparte de la literatura del Holocausto.

M¨¢s all¨¢ de la culpa y la expiaci¨®n, Jean Am¨¦ry (Pre-Textos). Este libro es al ensayo lo que Si esto es un hombre a la narrativa. Su autor, Hans Mayer, adopt¨® un seud¨®nimo al huir a B¨¦lgica tras la anexi¨®n de Austria. Se uni¨® a la Resistencia y fue capturado. M¨¢s que la muerte, Am¨¦ry analiza la destrucci¨®n del universo mental de los deportados mediante la tortura. Y la culpa de haber sobrevivido. Se suicid¨® en 1978.

Maus, Art Spiegelman (Mondadori). En 1992, se convirti¨® en el primer c¨®mic en ganar el Premio Pulitzer. Relata, en clave de ratones y gatos, la experiencia del padre de Spiegelman, dibujante que empez¨® en el underground y hoy oficia en The New Yorker.

Shoah, de Claude Lanzmann (1985). Diez horas de testimonios (supervivientes, historiadores y verdugos) dan cuerpo a la pel¨ªcula m¨¢s rotunda filmada nunca sobre el Holocausto. Pura memoria, sin reconstrucciones ni im¨¢genes de archivo. Para Lanzmann, que dedic¨® once a?os al filme, la imagen directa nunca podr¨¢ dar cuenta de un hecho incomprensible. Su actitud le llev¨® a polemizar con Jean-Luc Godard, que en su macrocollage f¨ªlmico Histoire(s) du cin¨¦ma (1998) incluye varios fotogramas de los campos. Georges Didi-Huberman recogi¨® todos los detalles de la pol¨¦mica en Im¨¢genes pese a todo. Memoria visual del Holocausto (Paid¨®s).

Noche y niebla (1955), Alain Resnais. El t¨ªtulo de este documental alude al eufemismo nazi para la eliminaci¨®n f¨ªsica de sus oponentes. Diez a?os despu¨¦s del final de la guerra, Resnais us¨® material incautado a los alemanes. Su tono de visita as¨¦ptica a los campos y sus alusiones a la culpa colectiva de los europeos son demoledoras.

La pasajera (1963), Andrej Munk y Witol Lesiewicz. Aunque inacabada por la muerte de Munk, es la gran pel¨ªcula polaca sobre el Holocausto y sus consecuencias. Narra el encuentro entre una guardiana de Auschwitz y una v¨ªctima tiempo despu¨¦s de abandonar el campo.

La lista de Schindler (1993), Steven Spielberg. A partir de una novela de Thomas Kenneally y con ecos de Korczak, el filme de Andrej Wajda, Spielberg devolvi¨® a los ojos del gran p¨²blico el tema del Holocausto a?os despu¨¦s de que lo hiciera la famosa serie de televisi¨®n. En esa misma l¨ªnea de ficci¨®n popular estar¨ªan dos obras de 2002: El pianista, de Roman Polanski, sobre el gueto de Varsovia, y Am¨¦n, de Costa Gavras, sobre la inhibici¨®n de la Iglesia cat¨®lica ante el exterminio de los jud¨ªos. La otra gran contribuci¨®n a la popularidad de un tema controvertido para el cine es La vida es bella (1997), la tr¨¢gica f¨¢bula en la que Roberto Benigni se acerca al Holocausto desde la mirada de un ni?o. La misma mirada que usa el irland¨¦s John Boyne en El ni?o con el pijama de rayas (Salamandra), una novela juvenil algo plana y efectista protagonizada por el hijo del comandante de un campo de concentraci¨®n. Con todo, es uno de los fen¨®menos del a?o. S¨®lo en castellano lleva diez ediciones. Y Mark Herman acaba de rodar su adaptaci¨®n cinematogr¨¢fica. -