'Veni, vidi, vici'

Mariano Rajoy puede estar tranquilo. De entre todos los pol¨ªticos que hay en el mundo, de todos los colores y tama?os, de toda condici¨®n o ideolog¨ªa, no habr¨¢ ninguno que le supere. ?l ya ha ganado. Ning¨²n pol¨ªtico propiciar¨¢ nunca un titular tan maravilloso: "Rajoy cuestiona el cambio clim¨¢tico apelando a su primo". Qu¨¦ quieren que les diga. Est¨¢ Julio C¨¦sar con su "veni, vidi, vici"; Felipe Gonz¨¢lez, con "gato blanco, gato negro, lo importante es que cace ratones"; Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, con "s¨ª, uso mucho la zeta", y Napole¨®n, con "qu¨¦ tarde se me ha hecho" (un d¨ªa que se le distrajo el caballo). Ha habido muchos pol¨ªticos de frase c¨¦lebre, pero nadie superar¨¢ nunca la historia de Mariano, su primo y el cambio clim¨¢tico. Nunca.

"Yo de esto no s¨¦ mucho, pero mi primo s¨ª, y me dice mi primo que qui¨¦n va a saber el tiempo que har¨¢ dentro de trescientos a?os si no se puede asegurar qu¨¦ tiempo har¨¢ ma?ana en Sevilla". Lo primero que piensas: qu¨¦ clase de primo tiene Rajoy que no sabe que ma?ana en Sevilla el tiempo ser¨¢ una maravilla. Pero despu¨¦s se constata que el primo se desmarc¨®. Que no quer¨ªa saber nada. ?Oiga! ?Es que Mariano ni siquiera se documenta con su primo? Se deduce que Mariano hab¨ªa le¨ªdo una entrevista de su primo en un peri¨®dico, en el que el susodicho primo usaba palabras parecidas, y lleg¨® a sus propias conclusiones. Y las solt¨®: "Esto del cambio clim¨¢tico es un poco tarar¨ª. A mi abuelo siempre le dol¨ªa el re¨²ma cuando iba a llover, y nunca nos fiamos del hombre del tiempo. Si no nos fiamos de Mariano Medina, nos vamos a fiar de Al Gore". Verdades como pu?os. Hay mucha gente a la que le pasa lo mismo que a Mariano: que s¨®lo lee la prensa para confirmar sus prejuicios. Ya pueden decir las noticias lo que digan: ellos leen lo que quieren leer.

En Espa?a tenemos esta habitual falta de sentido del matiz: el presidente del Gobierno se propone acabar con los males del cambio clim¨¢tico ¨¦l solo; en todo caso, que la ONU le eche una mano. (Es como Lisa Simpson). El l¨ªder de la oposici¨®n cree que menuda chorrada. (Es como Homer). Para el papel de Bart s¨®lo tenemos a Carod Rovira. No da. Peor a¨²n pensar que como Marggie s¨®lo tenemos a Esperanza Aguirre. En resumen: Espa?a no da ni para un cap¨ªtulo de Los Simpson.

Por cierto, a quienes sostienen que con Mariano Rajoy en el Gobierno Espa?a estar¨ªa a salvo, habr¨ªa que plantearles: s¨ª, vale, puede ser. ?Pero qui¨¦n nos pone a salvo de Rajoy? -