"Por si no llegaste a la Web 2.0, aqu¨ª est¨¢ la 3.0
LOS GUR?S DISCREPAN en cuanto a las definiciones de la Web 3.0. Jason Calacanis, bloguero y emprendedor la define como "la creaci¨®n de contenidos de gran calidad y de servicios producidos por individuos que usan la tecnolog¨ªa de la Web 2.0 como plataforma. Su ejemplo es una versi¨®n de Digg.com en la cual los expertos averiguan la validez de las informaciones y rectifican los t¨ªtulos para que sean m¨¢s precisos". Nada nuevo.
Nova Spivack, fundador de Radar Network y uno de los coautores de la definici¨®n de Web 3.0 en Wikipedia, contrapone otra definici¨®n sorprendente: "Es la tercera d¨¦cada de la web (2010-2020)". Agrega que "aunque Web 3.0 no ser¨¢ sin¨®nimo de web sem¨¢ntica, s¨ª ser¨¢ ampliamente caracterizado por la sem¨¢ntica en general".
"Vamos a entrar en el mundo de la fabricaci¨®n personal en un plazo de 5 a 10 a?os. Tambi¨¦n veremos la versi¨®n 3D de MySpace"
Lo importante de la nueva Web 3.0 es que es mucho m¨¢s que meramente 'sem¨¢ntica'. "Es la ruptura del paradigma del teclado y la pantalla
Padrino, protector y due?o del t¨¦rmino Web 2.0, Tim O'Reilly discrepa de ambas formulaciones. La primera, apenas reproduce modelos tradicionales de publicaci¨®n. Lo importante de la Web 3.0 es que es mucho m¨¢s que meramente "sem¨¢ntica". "Es la ruptura del paradigma teclado/pantalla y el mundo en el que la inteligencia colectiva emerge no de la gente escribiendo, sino de la implantaci¨®n de nuestras actividades mediante instrumentos". Lo m¨¢s importante es la noci¨®n de discontinuidad.
O'Reilly me dio tres elementos para hablar de Web 3.0. "El primero proviene de un nuevo tipo de inteligencia artificial (IA). Emerge de la capacidad de sacar provecho de la inteligencia colectiva, caracter¨ªstica de Web 2.0. Google es inteligente gracias a nuestra participaci¨®n. El sitio de Digg.com, donde los art¨ªculos son promovidos por la votaci¨®n de la gente, nos pone a trabajar como componentes de un programa".
O'Reilly nota puntos de inflexi¨®n que le llaman la atenci¨®n. Google gan¨® hace poco un concurso de traducci¨®n autom¨¢tica del chino y del ¨¢rabe al ingl¨¦s sin usar ni traductor ni algoritmo especial. "S¨®lo tienen m¨¢s datos, y lo que no funciona con millones de datos puede resultar muy bueno con miles de millones de datos".
Systems Research & Development, una empresa de Las Vegas comprada por IBM, invent¨® un programa que permit¨ªa detectar cuando, por ejemplo, un jugador en una mesa del casino hab¨ªa tenido contactos a?os antes con el empleado encargado de distribuir las cartas. Ahora tiene un contrato con el Departamento de Seguridad. "La dimensi¨®n pol¨ªtica puede espantar, pero la tecnolog¨ªa resulta verdaderamente cool", dice O'Reilly.
Hicieron una prueba con tres millones de estadounidenses de los que reunieron 670 millones de elementos informativos. "Se dieron cuenta de que, pasada esa cifra, el sistema no pod¨ªa seguir avanzando. A partir de cierta escala en la cantidad de datos se experimentan cambios de comportamiento del sistema. Si agregamos la inteligencia artificial, podr¨ªamos muy bien tener un escenario posible para la Web 3.0".
Otra dimensi¨®n proviene de la forma en que introducimos los datos. No ser¨¢ b¨¢sicamente mediante un teclado. Provendr¨¢ de toda una serie de sensores. Como ejemplo, O'Reilly cita el caso de una empresa de seguros de coches de Reino Unido. "Las p¨®lizas se suelen calcular en funci¨®n del lugar donde vive el cliente. Ahora, gracias a c¨¢maras y sensores, saben que dicha persona conduce r¨¢pido en el centro de Londres. No le importa d¨®nde est¨¢ su casa, le va a cobrar m¨¢s".
La tercera dimensi¨®n es la confluencia de los juegos en Red, de los mundos virtuales y de la fabricaci¨®n personal. "Agregando estos tres elementos dan algo muy diferente a la Web 2.0", precisa O'Reilly. "Creo que vamos a entrar en el mundo de la fabricaci¨®n personal en un plazo de 5 a 10 a?os. Tambi¨¦n veremos la versi¨®n 3D de MySpace. No se tratar¨¢ s¨®lo de juegos, sino de espacios. Second Life sigue siendo muy peque?o, pero es un concepto extremadamente poderoso, el de la idea de lugar".
Todo el mundo sabe que algo est¨¢ pasando, pero nadie tiene claro de d¨®nde vendr¨¢ la ruptura. "Ser¨¢ algo m¨¢s amplio y omnipresente que la Web a medida que la tecnolog¨ªa m¨®vil, los sensores, el reconocimiento de voz y otras tecnolog¨ªas nos den una inform¨¢tica mucho m¨¢s ambiente que la de hoy", escribe O'Reilly en su blog.
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