?De izquierdas o de derechas?

En Espa?a hay un Gobierno de izquierdas. Nadie tiene dudas. Ni complejos en decirlo. ?Y en Galicia? ?De qu¨¦ es la Xunta bipartita? ?De izquierdas o de derechas? Intuitivamente, viendo la composici¨®n de los dos partidos aliados, PSOE y BNG, podr¨ªamos pensar que el Gobierno gallego es de izquierdas, pero si bajamos a ver sus discursos y su gesti¨®n podr¨ªan entrarnos ya ciertas dudas. Y no digamos si queremos extraer alguna conclusi¨®n al hilo de las cr¨ªticas del partido de la oposici¨®n, que acusa a la Xunta de hacerlo fatal pero no precisamente por su sesgo izquierdista.

Si le hici¨¦semos caso al analista pol¨ªtico Santiago Lago Pe?as, podr¨ªamos concluir que el insuficiente ¨¢mbito competencial de Galicia limita las capacidades reales de dise?ar pol¨ªticas p¨²blicas, de modo que no ser¨ªa siquiera posible hacer una verdadera pol¨ªtica con may¨²sculas. Puede ser, pero aun as¨ª, ?no cabe ser m¨¢s claros? ?O alguien tiene miedo en Galicia a decir si es de izquierdas o de derechas, nacionalista o no nacionalista? ?Se trata acaso de hacer cosas pero sin que se note?

Es menester reclamarle a Quintana una nueva frontera. Y lo mismo cabe esperar de Touri?o

Si alg¨²n pa¨ªs necesita claridad es Galicia. Y no s¨®lo porque habitualmente el cielo sea gris. Si tras tantos a?os de fraguismo, Galicia se instala ahora en la indefinici¨®n para que nunca pase nada y nadie se moleste, PSOE y BNG habr¨¢n aportado realmente muy poco a las ansias de cambio de esta sociedad.

Si algo hay que agradecerle al Partido Popular es que no es ambiguo. Defiende la unidad de Espa?a, ve Galicia como una regi¨®n, sus dirigentes son liberales o conservadores, no quieren matrimonios de homosexuales y no les gusta que los ni?os estudien demasiado el gallego, porque primero ha de estar el ingl¨¦s...

En cambio, ?qu¨¦ piensa el PSOE? ?Por qu¨¦ la izquierda se vuelve acomplejada? ?A qui¨¦n le tiene miedo? ?O resulta que en el fondo no son de izquierdas y lo ¨²nico que quieren es mantenerse en el poder sin que nada cambie para que todo siga igual? Claro que tambi¨¦n podr¨ªamos responder que no se trata de eso, sino de ser pragm¨¢ticos y de gobernar con sentidi?o, ya que despu¨¦s de tantos a?os de Gobierno de Manuel Fraga la gente no quiere sobresaltos, sino orden. O, dicho de otro modo, que no se note que no est¨¢ don Manuel.

Realmente es muy curiosa esta manera de entender la pol¨ªtica en Galicia, a menudo bajo el pretexto de que, en realidad, Galicia tambi¨¦n es as¨ª. Quienes as¨ª piensan se olvidan de que, en el peor de los casos, ser¨ªa a ellos a quien corresponde desempe?ar el papel de las vanguardias y no a la gente que vive acomodada, mejor o peor, en su particular d¨ªa a d¨ªa.

Dig¨¢moslo claro: falta discurso pol¨ªtico en Galicia y falta ilusi¨®n. Al presidente Zapatero puede reproch¨¢rsele que sea un practicante del buenismo, pero no que no sea de izquierdas y no quiera que la sociedad espa?ola cambie mediante leyes progresistas y pol¨ªticas p¨²blicas dotadas presupuestariamente en una determinada direcci¨®n. Al presidente de Galicia, Emilio P¨¦rez Touri?o, como siga por donde va, s¨ª ser¨¢ posible preguntarle por qu¨¦ es tan timorato y no habla m¨¢s claro, con un mensaje consensuado e ilusionante.

Es verdad que, en cierto sentido, su socio Quintana lo tiene m¨¢s f¨¢cil, ya que al menos desarrolla un discurso nacionalista, pero no por ello resuelve todas sus contradicciones ideol¨®gicas. Digamos que el nacionalismo gallego tard¨® mucho en ser rojo y que cuando lo fue, ya integrado en el BNG, no siempre pudo hacer del rojer¨ªo su principal bandera. Y digamos que el socialismo gallego es una sucursal del madrile?o, lejos de ser un partido de socialistas con ideas propias, como puede ser el PSC. Pero si es as¨ª, como parece que es, que lo digan y lo reconozcan. Que tampoco pasa nada. O que cambien y abran las ventanas para ventilar.

Han tenido tiempo de sobra para saber donde est¨¢n y ahora se trata de gobernar este pa¨ªs con ideas y estrategias. Por no haber ya no hay ni debate sobre vazquistas y galleguistas en el PSOE o luchas ideol¨®gicas entre los comunistas de Paco Rodr¨ªguez y los renovadores de Beiras en el BNG. Por eso es menester reclamarle a Quintana una nueva frontera. Y lo mismo cabe esperar de Touri?o. Ahora el PC ya no es clandestino, y se puede hablar claro. Tambi¨¦n en Galicia. No pasar¨¢ nada, de verdad.