Disparatada musicalidad

Hace ya 30 a?os que la Vienna Art Orchestra (VAO para los amigos) se pasea por el mundo con la coletilla (ganada a pulso) de ser la mejor big band europea, la m¨¢s creativa y original. Han cambiado las caras, pero todo sigue igual: la VAO que visit¨® el Auditori de Barcelona sigue siendo esa orquesta sorprendente y swingante a partes iguales que ya nos dej¨® con la boca abierta hace tres d¨¦cadas. S¨®lo su carism¨¢tico l¨ªder, Mathias R¨¹egg, y el siempre expansivo saxofonista Harry Sokal permanecen de la formaci¨®n original, pero el grupo sigue manteniendo la misma cohesi¨®n, fuerza esc¨¦nica y, sobre todo, las mismas dosis de disparatada musicalidad que ha sido su marca de f¨¢brica durante toda su trayectoria.

En el Auditori, la VAO present¨® la tercera parte de su programa de celebraci¨®n del 30? aniversario: Visionaries & Dreams. Un juego musical (a R¨¹egg le encantan ese tipo de juegos) en el que se juntan, y no por azar, un pu?ado de pensadores europeos con actrices de Hollywood. El encontronazo entre pensamiento profundo y glamour es volc¨¢nico. R¨¹egg ha escrito 13 nuevas composiciones para explicar esos encuentros y en cada una de ellas saltan chispas. Los momentos m¨¢s intensos se vivieron cuando Josephine Baker tuvo su cita con Albert Einstein, Lauren Bacall con Erasmo, Jayne Mansfield con Freud y Mae West con Cop¨¦rnico. M¨²sica vibrante, llena de colores cambiantes e interpretada con una precisi¨®n absoluta.

Uno de los secretos de la VAO han sido siempre sus solistas, y en esta edici¨®n del 30? aniversario vuelven a brillar pr¨¢cticamente todos. R¨¹egg escribe para cada uno de ellos y les deja espacio para explayarse sin romper nunca el equilibrio de cada tema. Sobresali¨® el calor del fiel Harry Sokal, pero tambi¨¦n la suavidad de la cantante italiana Anna Lauvergnac, la fuerza del clarinetista tambi¨¦n italiano Nico Gori y el sonido lacerante del guitarrista austriaco Martin Koller.

Para este programa, Mathias R¨¹egg ha preparado una serie de fotograf¨ªas y frases de cada homenajeado que se proyectan mientras suena la m¨²sica a?adiendo un toque visual y literario que completa la fuerza del programa.

Tras lo visto en el Auditori de Barcelona, la VAO sigue estando varios cuerpos por delante de cualquier otra orquesta europea y de la mayor¨ªa de las norteamericanas (?todas?, tal vez, como m¨ªnimo en fantas¨ªa y creatividad) y todav¨ªa le queda cuerda para rato. Como bis ofrecieron un adelanto de su pr¨®ximo trabajo sobre temas norteamericanos y son¨® fresco e infeccioso.