La recompensa m¨¢s deseada
La donostiarra Maialen Chourraut recibe el premio a la mejor pirag¨¹ista del a?o despu¨¦s de asegurarse la ¨²nica plaza espa?ola para los Juegos de Pek¨ªn
Acaba de regresar de Pek¨ªn, y espera volver all¨ª en verano. Se lo ha ganado. La pirag¨¹ista Maialen Chourraut (San Sebasti¨¢n, 1983) ha conseguido la plaza para participar en los pr¨®ximos Juegos Ol¨ªmpicos, raz¨®n por la que la Federaci¨®n Espa?ola la reconoci¨® el pasado 3 de noviembre como la mejor pirag¨¹ista espa?ola del a?o en una gala celebrada en Talavera de la Reina. La joven deportista espera sacarse la espina que lleva clavada desde 2004, cuando no pudo acceder a la cita de Atenas.
El tren de los Juegos s¨®lo pasa una vez. En el caso de Maialen, fue en Iguaz¨² (Brasil), a finales de septiembre, en las mismas aguas que se vierten con violencia en las cataratas. Era el Campeonato del Mundo en la modalidad de aguas bravas y la especialidad de eslalom. Hasta las semifinales todo march¨® bien. Ese d¨ªa, a un paso de la final, se iban a resolver los puestos que abren el cielo de China. La piragua de Maialen se atasc¨® en el port¨®n de salida, mientras las dem¨¢s participantes se alejaban. "Fue un momento de histeria", recuerda ahora la protagonista. Con todo, eso no fue lo peor. La fuerza del agua amenaz¨® con fracturar su diminuta embarcaci¨®n. "No me lo cre¨ªa. Tuve que saltar al agua y pedir ayuda a mis compa?eros de selecci¨®n, que estaban all¨ª anim¨¢ndome. No sab¨ªa si llorar o re¨ªr. Y decid¨ª re¨ªrme. Consiguieron reparar parte de la piragua con cinta adhesiva, y me mont¨¦ en ella". A pesar de todo, Chourraut realiz¨® el mejor registro a mitad de prueba. Una penalizaci¨®n posterior la dej¨® fuera de la final. Pero no de los Juegos. Su puesto, decimocuarto en la clasificaci¨®n individual y noveno por pa¨ªses, le asegura el pase. La Federaci¨®n debe establecer el pr¨®ximo a?o a qui¨¦n pertenece esa ¨²nica plaza, puesto que no es nominal, pero ese proceso deber¨ªa ser un tr¨¢mite, ya que Maialen ha sido campeona de Espa?a en los ¨²ltimos siete a?os, salvo en 2005. Por si acaso, ella se ilusiona, pero sin excesos.
Ha sido campeona de Espa?a en los ¨²ltimos siete a?os salvo en 2005
A falta de un canal de aguas bravas, se entrena con las olas de La Concha
"Estoy un escal¨®n por encima, pero el futuro siempre es incierto. Puede pasarme cualquier cosa, as¨ª que no quiero obsesionarme". Sabe de lo que habla. Las lesiones, en forma de subluxaci¨®n de ambos hombros, han enturbiado sus dos ¨²ltimas temporadas. "Este premio es una alegr¨ªa. Ha sido una temporada muy dura, en la que me ha costado mucho competir". Antes del verano las cosas no le fueron muy bien. Pero el gran objetivo segu¨ªa en Brasil, y ah¨ª no fall¨®.
Formada en la secci¨®n de pirag¨¹ismo del Atl¨¦tico San Sebasti¨¢n, Chourraut lleva en este deporte desde los 12 a?os, cuando se anim¨® a probar unos cursillos por "casualidades de la vida", como dice ella. "Poco a poco, me gust¨® cada vez m¨¢s, y ah¨ª espero estar durante muchos a?os. Las sensaciones que se viven a bordo de un kayak son fant¨¢sticas". Pero disfrutar de ellas tambi¨¦n implica sacrificios, como los entrenamientos continuos de ma?ana y tarde. "A m¨ª no me importa. Eso es lo que m¨¢s me gusta hacer". Y lo dice quien debe pasar gran parte del a?o fuera de casa, entrenando en Barcelona. Estos d¨ªas ha permanecido en San Sebasti¨¢n, antes de viajar de nuevo a Holanda e Italia. Como en Guip¨²zcoa no existe un canal artificial de aguas bravas donde prepararse, y el Atl¨¦tico tiene que entrenar en la playa de La Concha. Sin embargo, la pirag¨¹ista tambi¨¦n saca tiempo para los estudios. Es diplomada en Administraci¨®n y Direcci¨®n de Empresas por la UPV. Ahora, sin mucho tiempo para alejarse del deporte, intenta completar la licenciatura a trav¨¦s de la UNED.
Si no ocurre ninguna sorpresa, Maialen estar¨¢ en Pek¨ªn. De su reciente visita, ha podido comprobar que el trayecto que ha preparado la organizaci¨®n ser¨¢ "dif¨ªcil y duro". Eso no le resta ilusi¨®n. "Tengo muchas ganas de comprobar qu¨¦ significan los Juegos. Hace cuatro a?os no pude clasificarme para los de Atenas, y desde entonces tengo clavada una espina", reconoce. De su peripecia en el Iguaz¨² conserva a¨²n la piragua con la que se gan¨® el derecho ol¨ªmpico. "Cuando llegu¨¦ a meta, me di cuenta de que estaba inundada. Pero han conseguido arreglarla, y todav¨ªa me entreno con ella".
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