"Si viajas, vas en tres dimensiones; si lees, en muchas m¨¢s"

Laura rebusca en su bolso marr¨®n y saca la pluma de Jane Austen. La que m¨¢s usa, la m¨¢s suave y delicada, la que tiene la firma de la escritora brit¨¢nica estampada en el lomo. Once plumas. Lleva meses revolviendo las librer¨ªas de Valencia en busca de las 11 plumas que le faltan para completar la colecci¨®n. "Soy muy seria y muy responsable, pero lo he equilibrado con mi punto friqui, tengo mis peque?as excentricidades", dice esta valenciana a la que quieren convertir en la escritora de harry potters espa?ola. Vale que su madre le diga siempre que no pida nunca arroz fuera de Valencia, pero estamos en el barrio de Lavapi¨¦s de Madrid, en el Ventorrillo Murciano, y hoy hace d¨ªa de arroz a banda. Marchando.

La autora que hace furor entre j¨®venes es 'fan' del 'manga' y de su casa

Antes se cortaba m¨¢s. Reprim¨ªa su pasi¨®n coleccionista, su friquismo. Ahora se compra sus c¨®mics de manga 20th century boys, sus figuritas de la serie Death Note, sus peluches, sus p¨®sters de Jack Sparrow, el Johnny Depp de Piratas del Caribe, y todo, con una coartada perfecta: "Tengo que estar al d¨ªa". De algo tiene que servir haber despachado m¨¢s de 300.000 ejemplares de la exitosa trilog¨ªa de Memorias de Idh¨²n, recreando universos m¨¢s cercanos a Tolkien que a Rowling -"Soy una friqui fan de Harry Potter", confiesa-.

La b¨²squeda de las 11 plumas es su ¨²ltima obsesi¨®n. Necesita completar la colecci¨®n que sac¨® al mercado Altaya: 40 plumas de 40 grandes escritores. Tiene 29. Le faltan 11. Una de ellas, la de Kafka. "A veces tengo caprichos, pero no son caprichos caros". Laura sonr¨ªe, sus ojos se agrandan y, por un momento, su cara remite a los personajes de manga, g¨¦nero de c¨®mic japon¨¦s.

El camarero se acerca con el arroz e invita a que se coma como se hace en su tierra, directamente de la paella. Ella declina, prefiere servirse en el plato. "Todo el mundo necesita escapar de la realidad. Lees fantas¨ªa, escuchas m¨²sica, te sientas frente a la tele... Son espacios para no estar pensando en tu vida constantemente", dice. A sus 30 a?os, vive con su novio en Alboraya, el pueblo de la horchata, Valencia. "Viajar es como leer y leer es viajar con la imaginaci¨®n. Cuando viajas te desplazas en tres dimensiones; cuando lees, en muchas m¨¢s". Antes le encantaba coger la maleta pero ahora, con tanto viaje para promocionar sus libros, se ha vuelto casera. "Como tu cama y tu sill¨®n no hay nada".

Su esperada nueva novela, -escribi¨® la primera a los 11 a?os y public¨® por primera vez a los 21-, La Emperatriz de los Et¨¦reos, narra la peripecia de Aer y Bipa, un chico y una chica que viven en un mundo de hielo. En el viaje en busca del Palacio de la Emperatriz, los personajes van dejando de comer, de beber, quedando cada vez m¨¢s delgados, m¨¢s p¨¢lidos. "Si quieren relacionarlo con la anorexia, podr¨¢n hacerlo, pero ten¨ªa que ser as¨ª. Yo no soy una profesora. La gente supone que los autores de literatura juvenil tenemos la obligaci¨®n de educar, pero no, estamos para escribir nuestras historias, yo s¨®lo planteo preguntas".

Laura saborea un pastel de manzana y dice que no puede hacer novela social, que hay que hacer lo que a uno le sale de dentro, que lo suyo es el mundo fant¨¢stico: "Intento reflejar todo lo que he vivido leyendo libros".