Las aerol¨ªneas prev¨¦n ganar un 36% menos en 2008 por la crisis crediticia

Estaban levantando cabeza, pero los precios del petr¨®leo disparados y, sobre todo, la crisis de liquidez en los mercados financieros vuelven a lastrar a las aerol¨ªneas. Tanto, que han recortado las previsiones de beneficio para 2008 en un 35,9%. En vez de los 7.800 millones de d¨®lares (10.900 millones de euros) que preve¨ªa la Asociaci¨®n Internacional del Transporte A¨¦reo (IATA, con 240 aerol¨ªneas como miembros) en junio pasado, la industria ganar¨¢ globalmente s¨®lo 5.000 millones de d¨®lares, 600 menos que este a?o, que ha sido el primero con ganancias desde el batacazo de 2001. Las p¨¦rdidas de estos ¨²ltimos a?os (40.000 millones de d¨®lares) mantienen al sector en una situaci¨®n de debilidad, con una deuda de unos 190.000 millones.

Los peores resultados econ¨®micos ser¨¢n para las compa?¨ªas norteamericanas

"No hemos alcanzado la crisis de cr¨¦dito tras el colapso de las puntocom en 2000, pero vamos en esa direcci¨®n", vaticin¨® ayer en Ginebra el economista jefe de IATA, Brian Pearce. Sin embargo, "esperamos una ralentizaci¨®n del crecimiento m¨¢s que una recesi¨®n". La crisis de confianza, sobre todo en EE UU (el 30% del tr¨¢fico mundial), arrastrar¨¢ a la baja la demanda de vuelos, de modo que aumentar¨¢n s¨®lo un 4%, frente al 5,9% de 2007.

M¨¢s que el precio del queroseno, ser¨¢ el par¨®n de la econom¨ªa la causa principal de los problemas del sector, seg¨²n el consejero delegado de IATA, Giovanni Bisignani. "Si no hay crecimiento econ¨®mico, la gente no viaja; mientras haya crecimiento, el coste del fuel se puede manejar". Bisignani repite que la industria necesitaba un precio de 32 d¨®lares el barril para no perder dinero hace cinco a?os. En 2008 conseguir¨ªa el equilibrio con un precio del brent a 81 d¨®lares, si bien Pearce calcula un media de 78 d¨®lares para el pr¨®ximo a?o (bajar¨¢ algo, seg¨²n la IATA, por la ralentizaci¨®n en EE UU).

Para complicar las cosas, el pico del ciclo del sector se ha alcanzado este a?o y, adem¨¢s, la oferta no para de crecer por el aumento de aviones entregados, de 1.041 este a?o a 1.281 el pr¨®ximo. Los peores resultados econ¨®micos ser¨¢n para las aerol¨ªneas norteamericanas, una regi¨®n en el centro neur¨¢lgico de la crisis, que adem¨¢s sufre m¨¢s duramente el alza del crudo, ya que sus aviones son menos eficientes en el consumo (el 35% de su flota tiene m¨¢s de 25 a?os). Europa y Asia mantienen el tipo con recortes menores en su rentabilidad, mientras que Latinoam¨¦rica es la ¨²nica zona donde la previsi¨®n mejora ligeramente. Y la escasez de ingenieros y pilotos hace aumentar los salarios, como tambi¨¦n suben los costes de alquiler de aviones.

Para tratar de amortiguar este nuevo rev¨¦s, la IATA propone nuevos programas de recorte de gastos que ahorrar¨ªan unos 6.500 millones de d¨®lares anuales: tarjetas de embarque con c¨®digos de barras en vez de banda magn¨¦tica, incremento del uso de maquinas de autocheck-in, con nuevas funciones, como reclamaci¨®n de equipaje perdido... En definitiva, m¨¢s maquinitas y menos personal en los aeropuertos. Por ejemplo, la japonesa JAL y la alemana Lufthansa ya tienen puertas de embarque sin personal, y es el pasajero el que introduce su pase antes de acceder al avi¨®n, lo que agiliza el proceso.

Por supuesto, habr¨¢ que seguir ahorrando queroseno, uno de los pilares del programa medioambiental de la IATA. Bisignani ha fichado a Paul Steele, antiguo ejecutivo del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), como director para Aviaci¨®n y Medio Ambiente, para avanzar hacia el objetivo de una industria que no produzca nada de di¨®xido de carbono en 2050. Para ello se ha marcado el objetivo de mejorar la eficiencia energ¨¦tica un 25% para 2020, con motores de nueva generaci¨®n y mejoras en el dise?o de los aviones.

Otros pilares de ese programa son las mejoras de infraestructuras y operaciones (rutas m¨¢s cortas, reducci¨®n de la distancia entre aviones), adem¨¢s de instrumentos econ¨®micos, como la entrada de la aviaci¨®n en el comercio de emisiones, propuesta por el Parlamento Europeo pero denostada por la IATA sino es global y voluntaria.