Gedisa cumple 30 a?os de destape intelectual

La matanza de Atocha, el estreno de La guerra de las galaxias, la entrevista Carrillo-Su¨¢rez, las primeras elecciones democr¨¢ticas, el atentado a El Papus, Raffaella Carr¨¢ triunfando con Fiesta... Una Espa?a inquietante donde todo parec¨ªa posible era, por qu¨¦ no, un buen escenario para que el argentino V¨ªctor Landman, ingeniero qu¨ªmico y fabricante de telas plastificadas, realizara en Barcelona su sue?o intelectual de montar una editorial de libros sobre ciencia y reflexi¨®n. Despu¨¦s de 30 a?os, 1.300 t¨ªtulos en cat¨¢logo y m¨¢s de 40 colecciones, Gedisa es quiz¨¢ el sello independiente de ensayo m¨¢s potente del pa¨ªs, con presencia en siete pa¨ªses de Am¨¦rica Latina. Un salto que su hijo Alfredo, actual director general de Gedisa Espa?a, ha querido celebrar con una colecci¨®n conmemorativa, Visi¨®n 3x, en la que est¨¢n algunos de los autores fetiche de la casa.

"La crisis del 11-S trajo un ensayo m¨¢s liviano", dice Alfredo Landman

Los tiempos ped¨ªan a gritos que la primera colecci¨®n se llamara Libertad y cambio y formaran parte de una etapa de "ensayo suave, en parte porque mi padre se asoci¨® los primeros meses con la editorial Granica", recuerda Alfredo Landman, culpable junto a su hermana de que su progenitor visitara Barcelona, siguiendo a sus hijos, que hu¨ªan de la dictadura argentina. ?l no estaba a¨²n al frente de la editorial, pero sabe que "era la ¨¦poca del destape intelectual y la sociedad ped¨ªa una serie de temas que no ten¨ªan hasta entonces". Y en ese entonces faltaba de todo. O sea, que el primer t¨ªtulo fue El libro de la vida, de Martin Gray, y el segundo, ya un Long Seller, El ni?o feliz. Su clave psicol¨®gica, de Dorothy Corkille Briggs, que ahora como homenaje se traduce al catal¨¢n.

No pod¨ªa faltar inmediatamente la figura de Freud, a partir de una Serie Freudiana y la Psicoteca Mayor; y luego otra serie de psicolog¨ªa m¨¢s divulgativa (Hipocondr¨ªa, Mis padres y el sexo...), una cuarta sobre renovaci¨®n pedag¨®gica (en 1979), as¨ª como una de conversaciones con los nombres del momento: Chomsky, Piaget, Mir¨®, Marcuse, Grass... A un ritmo de unos 20 t¨ªtulos anuales, en pocos a?os y pescando tanto de Suram¨¦rica como de Europa y Espa?a, Gedisa descubrir¨¢ o consolidar¨¢ en las librer¨ªas espa?olas pensadores, recita Landman, como Baudrillard, Bobbio, Cruz, Duby, Foucault, Garc¨ªa Clanclini, Steiner, Vattimo...

En plenos ochenta, Gedisa se hab¨ªa hecho un nombre en el ensayo, una vida que parec¨ªa correr en paralelo a la de Paid¨®s. "Somos hijos del mismo tiempo, lo que provoca que compartamos conceptualmente el 80% de nuestros fondos tem¨¢ticos", explica Landman, que recuerda la amistad entre su padre y Enric Folch, responsable de Paid¨®s, lo que explica que emprendieran juntos la aventura de la conquista de M¨¦xico cuando la crisis de los ochenta o que el hoy director general de Gedisa trabajara un a?o, en 1990, con Folch. "La editorial es el esp¨ªritu del editor, no puedes robar mucha cosa", recuerda que le dijo el veterano editor cuando Landman se march¨® para ir asumiendo la responsabilidad de la editorial de su padre. Los a?os han puesto series promovidas por Gedisa que la han alejado de su hermana mayor: la serie de cibercultura, la de criminolog¨ªa...

?Quiz¨¢ Gedisa se distingue porque tiene un ensayo m¨¢s duro que el resto de editoriales? "?sa es una falsa imagen que viene proporcionada por nuestra colecci¨®n troncal, Cladema, Cl¨¢sicos del ma?ana, creada a mediados de los ochenta y que es la que ha dado pie a la famosa frase La colecci¨®n verde de Gedisa, serie que en cambio es transversal y tiene un color para cada materia", arguye el editor. Una imagen de sesudos en momentos de pensamiento light. "La crisis del 11-S ha tra¨ªdo un ensayo m¨¢s liviano, pero tambi¨¦n el conocimiento se ha fragmentado, aunque esa fragmentaci¨®n tendr¨¢ su l¨ªmite en la obras de pensamiento", teoriza Landman, que cree que "el editor de ensayo del futuro deber¨¢ ofrecer, por un lado, textos m¨¢s cortos y estudios de casos de asignatura quiz¨¢ con nuevos formatos y, por otro, la edici¨®n y recuperaci¨®n de cl¨¢sicos". En cualquier caso, admite una ca¨ªda de las ventas en el subsector, "m¨¢s en Espa?a que en Latinoam¨¦rica, donde persiste el valor fetichista de libro y del autor".

No obstante, Gedisa mantiene la media de unos 70 t¨ªtulos editados al a?o, y eso a pesar de los intentos de vampirizaci¨®n de autores de cierto ¨¦xito por parte de editoriales de grandes grupos. "Suele ocurrir m¨¢s con historia o sociolog¨ªa que con antropolog¨ªa o filosof¨ªa; nos pas¨® con autores como Edgar Morin, Steiner y Zygmunt Bauman, que ha entrado ya en subastas de 15.000 o 20.000 euros... Y ahora se repite con Al Gore tras Una verdad inc¨®moda". Del libro del flamante premio Pr¨ªncipe de Asturias Gedisa ha vendido ya unos 30.000 ejemplares, lo que le coloca en la clasificaci¨®n de los Best Sellers de la historia de la editorial, junto a Boris Cyrulnik y sus t¨ªtulos de la resistencia, y con El ni?o feliz y el Umberto Eco de C¨®mo se hace una tesis (ambos con unos 100.000 ejemplares s¨®lo en Espa?a). "De Gore perdimos su segundo libro, pero hemos podido mantener el tercero -una versi¨®n de su Best Seller para j¨®venes- y el cuarto, que saldr¨¢ en marzo en EE UU, El camino de la supervivencia", dice Landman. Pero no habla de cifras. Incluso en el ¨¦xito, duros nuevos tiempos para el ensayo.