La c¨®lera se extiende por el pa¨ªs

Miles de seguidores de Benazir Bhutto se lanzaron ayer a las calles para volcar su ira por el asesinato. Los disparos al aire, las pedradas y la quema de neum¨¢ticos se extend¨ªan desde Muzaffarabad, capital de la Cachemira paquistan¨ª, en el norte monta?oso, hasta la costera y meridional Karachi. Los disturbios provocaron la muerte de al menos 14 personas, 10 de ellas en Karachi, dos en Lahore y otras dos en la ciudad de Tando Allahyar, en Sindh, la provincia natal de Benazir Bhutto. Islamabad, Peshawar y Rawalpindi fueron escenario de protestas que pusieron en alerta roja a las fuerzas de seguridad.

Mientras, el presidente del pa¨ªs, Pervez Musharraf, blanco de las iras de los manifestantes, llamaba a la calma y a la unidad. Las protestas m¨¢s violentas se registraron, como era previsible, en Sindh. En su capital, Karachi, ardieron tres bancos, una sede gubernamental y una oficina de Correos. Muchas calles estaban cortadas por barricadas de neum¨¢ticos en llamas. La mayor¨ªa de las tiendas y mercados cerraron sus puertas en se?al de duelo.

En la ciudad de Hyderabad, al menos 20 veh¨ªculos fueron quemados. Informes de incidentes tambi¨¦n llegaban desde Larkana, la ciudad natal de Bhutto. "Hemos incrementado el despliegue y estamos patrullando todas las ciudades, porque hay problemas por todas partes", dec¨ªa un oficial de polic¨ªa. Las fuerzas de seguridad bloquearon la carretera que une la provincia de Sindh con la de Punjab para frenar las protestas.

En la ciudad oriental de Lahore, partidarios de Bhutto quemaron tres autobuses y da?aron varios veh¨ªculos privados. En Peshawar, la polic¨ªa dispers¨® a bastonazos y con gases lacrim¨®genos a los manifestantes, que hab¨ªan bloqueado una de las principales arterias. "Es una tragedia terrible, que Al¨¢ ayude a Pakist¨¢n", gem¨ªa un vecino.