Lugares ins¨®litos para el arte que llega
Par¨ªs inaugura en una vieja imprenta Le Laboratoire y en un tanatorio Le 104
En un sitio -Le Laboratoire, en la rue Bouloi- naci¨® el cardenal Richelieu; del otro -Le 104, entre rue Curial y d'Aubervilliers- salieron desde 1873 y hasta 1997, miles de comitivas f¨²nebres hacia los distintos cementerios de la ciudad.
Le Laboratoire, durante el siglo XIX, acogi¨® una gran imprenta en la que trabajaban 600 personas; Le 104, en el siglo XIX y durante buena parte del siglo XX, empleaba a 1.400 personas y daba cobijo a 400 caballos. Hoy estos dos espacios, Le Laboratoire y Le 104, quieren convertirse en centros dedicados a la creaci¨®n. Distintos de todos los dem¨¢s existentes.
Le Laboratoire ha abierto parcialmente sus puertas al p¨²blico. Su primera exposici¨®n re¨²ne a Fabrice Hyber y Robert Langer. El primero es artista, el segundo profesor del MIT (el Instituto de Tecnolog¨ªa de Massachusetts). La iniciativa es de David Edwards, un qu¨ªmico que ha mejorado los sistemas de administraci¨®n de insulina. Es un cient¨ªfico al que le interesa el arte. Y quiere retomar el hilo que se rompi¨® tras el Renacimiento, cuando los dibujantes, escultores o pintores, dejaron de ser tambi¨¦n f¨ªsicos, matem¨¢ticos o ingenieros. Como Leonardo.
Le Laboratoire ha abierto parcialmente sus puertas al p¨²blico
Le 104 tiene un espacio que alcanza los 36.800 metros cuadrados
Fabrice Hyber quer¨ªa que Langer le ayudase a mejorar la experiencia de Newton, que de un manzano cayesen cerezas. Langer le propuso c¨¦lulas madre que se transforman en neuronas. Hyber presenta una serie de obras, conectadas entre s¨ª, que son proyectos destinados a transformarse. Sus dibujos y pinturas son una met¨¢fora del funcionamiento de la inteligencia.
David Edwards ha invertido 6 millones de euros en arreglar el local. En sus 1.300 metros cuadrados de espacio tambi¨¦n propone lugares de debate y reuni¨®n, una biblioteca y una tienda en la que se comercializan obras o prototipos creados por el encuentro entre un cient¨ªfico y un artista.
Por su parte, el edificio de las antiguas pompas f¨²nebres de Par¨ªs, Le 104, ofrecer¨¢, a partir del mes de junio de este a?o 2008, 17 talleres para artistas. Se ha decidido la cesi¨®n por periodos que pueden ir de un mes hasta un a?o. Adem¨¢s, contar¨¢ con dos teatros o salas de concierto o danza para 200 y 400 espectadores, un lugar para desfiles de moda o congresos en el que pueden reunirse 2.500 personas, lugar para despachos de futuras empresas culturales, un restaurante, una gran guarder¨ªa, espacios para tiendas y una calle central que con una cubierta estar¨¢ abierta a todos.
En total Le 104 tiene 36.800 metros cuadrados, de los cuales 25.000 son perfectamente explotables. El Ayuntamiento de la ciudad ha invertido 100 millones de euros en adecuar el sitio y la gesti¨®n, que estar¨¢ dirigida por Robert Cantarella y Fr¨¦deric Fisbach, dos directores de teatro, deber¨¢ ser capaz de encontrar un 30% de su presupuesto de funcionamiento en el sector privado.
Le 104 estar¨¢ dedicado principalmente a la creaci¨®n y a la producci¨®n. "Los artistas presentar¨¢n regularmente a los visitantes las obras que est¨¢n en fase de realizaci¨®n. Y una vez terminadas algunas de ellas ser¨¢n presentadas en el lugar. Pero s¨®lo un d¨ªa o dos. No queremos competir con los lugares de difusi¨®n ya existentes" explica Cantarella.
Seg¨²n Fisbach Le 104 tiene que servir para evitar que "los artistas j¨®venes se vayan a Berl¨ªn, a ciudades que les ofrecen espacios agradables y polivalentes a buen precio". Entre sus planes figura el establecer nexos de colaboraci¨®n estables con lugares semejantes en Roma, Berl¨ªn, Los ?ngeles o con el Matadero de Madrid.
Adem¨¢s Le 104, situado en el barrio n¨²mero 19 de Par¨ªs, en el noreste de la capital, tiene una dimensi¨®n de pol¨ªtica cultural urbana. "Este barrio es, de entre todos los de Par¨ªs, el que tiene un mayor n¨²mero de parados, el m¨¢s multi¨¦tnico -viven en ¨¦l personas de m¨¢s de 30 comunidades distintas- y servir¨¢ para crear puestos de trabajo -60 fijos, m¨¢s un centenar de car¨¢cter intermitente-, para ofrecer lugares de reuni¨®n para los habitantes con prensa de Sri Lanka, Mal¨ª o el L¨ªbano y no ¨²nicamente francesa o anglosajona, y para que salgan de aqu¨ª, cada a?o, entre 30 y 35 proyectos art¨ªsticos y nos visiten m¨¢s de 70.000 personas". Un lugar de vida en la antigua catedral del luto.
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