Prisi¨®n sin fianza para el acusado de intentar raptar a una ni?a en Canarias

Mientras la polic¨ªa sigue investigando si Marcos Javier Rodr¨ªguez Cabrera, de 35 a?os, est¨¢ relacionado con la desaparici¨®n en Canarias de los ni?os Yeremi Vargas y Sara Morales, un juez ha encontrado ya indicios suficientes para enviarlo a la c¨¢rcel por el intento de secuestro de otra menor el pasado viernes, que result¨® fallido. El titular del juzgado de Primera Instancia e Instrucci¨®n n¨²mero 2 de Telde (Gran Canaria) orden¨® anoche el ingreso en prisi¨®n incondicional y sin fianza de Rodr¨ªguez, de 35 a?os, al que imputa un presunto delito de detenci¨®n ilegal en grado de tentativa, tenencia il¨ªcita de armas y robo de veh¨ªculo.

"Tardaremos meses en determinar si hay restos de personas", advierten los agentes

Horas antes se hab¨ªa realizado una rueda de reconocimiento en la que participaron tres ni?as, entre ellas la peque?a de 10 a?os a la que el detenido intent¨® secuestrar presuntamente el pasado viernes, seg¨²n inform¨® el Tribunal Superior de Justicia de Canarias. La polic¨ªa judicial de Las Palmas investiga ahora si hay relaci¨®n entre este suceso y los casos de los desaparecidos Yeremi Vargas, de 10 a?os, y Sara Morales, de 14, de los que nada se sabe desde hace 10 meses y m¨¢s de un a?o, respectivamente.

La polic¨ªa est¨¢ estudiando la relaci¨®n de Marcos Javier Rodr¨ªguez con al menos tres casos de agresiones sexuales (algunas fuentes elevan la cifra a seis), y en el marco de esa investigaci¨®n registr¨® el pasado jueves un crematorio de Telde propiedad del detenido; all¨ª no han sido hallados, por el momento, restos humanos, seg¨²n comunicaron ayer fuentes del cuerpo. Los agentes registraron otros tres inmuebles relacionados con Rodr¨ªguez.

El acusado fue identificado por la ni?a a la que supuestamente intent¨® raptar hace una semana introduci¨¦ndola a la fuerza en una furgoneta blanca. La peque?a se zaf¨® del desconocido y presenta heridas leves en cuello y nuca. Ayer tuvo que reconocerlo de nuevo en el juzgado.

Los vecinos de La Garita, el barrio donde sucedieron los hechos, se manifestaron anoche en repulsa por lo ocurrido y para exigir al Ayuntamiento de Telde que refuerce la seguridad en calles, parques infantiles, colegios y lugares frecuentados por menores.

Antes de entregar a Rodr¨ªguez al juez con la acusaci¨®n de secuestro, los agentes de la Polic¨ªa Cient¨ªfica entraron en tres inmuebles m¨¢s relacionados con ¨¦l. Numerosos efectivos enfundados en trajes blancos registraron durante m¨¢s de tres horas un piso en Las Palmas de Gran Canaria, un taller donde el detenido trabajaba de forma ocasional en el puerto y un local de su propiedad.

Fue en este ¨²ltimo lugar donde los vecinos informaron de que eran frecuentes los malos olores, procedentes de animales en descomposici¨®n, hasta tal punto que ten¨ªan que cruzar de acera por las pestilencias que sal¨ªan del interior del recinto, tapiado con listones de madera.

Hace un a?o, una brigada de bomberos, polic¨ªas locales y trabajadores de limpieza ya entr¨® en este local y retir¨® los restos de animales, motivo por el cual se abri¨® un expediente en el Ayuntamiento de Las Palmas. A pocos metros del garaje nauseabundo, en el n¨²mero 82 de la misma calle ?ngel Guimer¨¢, se encontraba el piso que Marcos Rodr¨ªguez habitaba y hab¨ªa puesto en venta. Rodr¨ªguez era propietario del crematorio de animales dom¨¦sticos Haydee (caricia, en griego), en el pol¨ªgono industrial de Salinetas, tambi¨¦n clausurado por el Ayuntamiento hace unos cuatro a?os, aunque en el verano pasado consta un incendio y un informe posterior que conclu¨ªa que el ahora detenido viv¨ªa all¨ª.

La polic¨ªa extrajo el jueves del crematorio una decena de bolsas con muestras. "Fue una labor tit¨¢nica", reconoci¨® un portavoz policial, "porque hab¨ªa un manto de polvo y todos los restos de colillas, palillos, aceites o manchas estaban muy deteriorados". Este portavoz subray¨® que se tardar¨¢ "semanas, si no meses", en determinar si alguno de los objetos presenta restos humanos. Pero, de momento, no se ha hallado resto alguno.