Peque?o atlas del mundo saeriano

A pesar de que la prosa de Saer, en su intensa y extensa mimesis con el mundo material, a veces parece acercarse a la abstracci¨®n -como la de otro de sus grandes maestros, no siempre bien reconocido: el poeta Francis Ponge-, su universo narrativo es coherente y sistem¨¢tico: vuelve una y otra vez sobre determinados personajes, como Pich¨®n Garay, Carlos Tomatis, Horacio Barco, Marcos Rosenberg, Elisa y el Gato, entre quienes se faceta una diversidad de m¨¢scaras del propio autor y muchos de los cuales reaparecen en La grande. El paisaje es, casi siempre, el de la infancia y juventud de Saer: la ciudad de Santa Fe y los pueblos de la zona, las riberas siempre amenazadas por las crecidas de los grandes r¨ªos de la llanura. (Progresiva y fragmentariamente, algunas calles y barrios parisienses aparecen en sus narraciones). Todo ese mundo est¨¢ representado por lo que podr¨ªa denominarse "las novelas de la Zona": Cicatrices (1969, su ¨²ltimo libro antes de radicarse en Par¨ªs y una de sus grandes novelas); El limonero real (1974, sin duda una de las mejores; transcurre en una ¨²nica, densa, laber¨ªntica jornada); Nadie nada nunca (1980); Glosa (1985), Lo imborrable (1992), La pesquisa (1994, tributo de Saer a uno de sus g¨¦neros favoritos, la novela policial). Est¨¢n, adem¨¢s, las novelas que no forman parte de ese sistema y que de alg¨²n modo lo complementan: El entenado (1983) y Las nubes (1997). Y el delicioso y genial "tratado imaginario" sobre la conquista y colonizaci¨®n del R¨ªo de la Plata, El r¨ªo sin orillas (1991), de g¨¦nero heterodoxo -igual que muchos de los libros fundamentales de la tradici¨®n argentina, como Facundo de Sarmiento o Radiograf¨ªa de la pampa de Mart¨ªnez Estrada, con los que sin duda se emparenta-. A lo que hay que agregar los cuentos, una parte imprescindible de la obra de Saer, reunidos en Cuentos completos, 1957-2000 (Buenos Aires, 2002).

Ese considerable volumen de p¨¢ginas conforma el ciclo narrativo m¨¢s importante de la literatura argentina de la segunda mitad del siglo XX -sistem¨¢tica y l¨²cidamente estudiada por Julio Premat en La dicha de Saturno; escritura y melancol¨ªa en Juan Jos¨¦ Saer (Beatriz Viterbo Editora, 2002)- y cuyo influjo puede verse en varios de los m¨¢s significativos novelistas y poetas del pa¨ªs. La obra de Saer comprende adem¨¢s dos libros de ensayos literarios (La narraci¨®n objeto y El concepto de ficci¨®n), uno de poes¨ªa (El arte de narrar) y uno de art¨ªculos publicados en prensa (Trabajos). Destacamos tres t¨ªtulos esenciales. El cuarto es La Grande:

El entenado (1983; reeditado por El Aleph, Barcelona, 2003). Historia de un cautivo espa?ol de los indios colastin¨¦, en el siglo XVI, que a lo largo de diez a?os es testigo de ritos can¨ªbales en las riberas del Paran¨¢. Forma parte del conjunto de novelas americanas que fabularon la Conquista, pero no se funde con ellas: por la originalidad de su enfoque y por la magnificencia del talento con que est¨¢ escrita. Es, seguramente, la obra m¨¢s reeditada y traducida de Saer y a la que m¨¢s se han dedicado ensayistas y doctorandos. La novela muestra una combinaci¨®n espec¨ªficamente argentina del tratamiento del indio desde finales del siglo XIX: el violento, sangriento y sucio que viene de Mart¨ªn Fierro, de Jos¨¦ Hern¨¢ndez, y el estilizado, ir¨®nico y limpio que viene de Una excursi¨®n a los indios ranqueles, de Lucio V. Mansilla. En El entenado los dos tratamientos se funden en una suerte de pastoral g¨¦lida que es, a la vez, un memorial sin destinatario.

Glosa (1985). Junto con El limonero real expresa la estirpe joyceana del proyecto de Saer: a lo largo de una noche, dos amigos recorren las calles de la ciudad. Conversan y filosofan -el di¨¢logo como m¨¦todo de conocimiento, de clara filiaci¨®n plat¨®nica, est¨¢ siempre presente en el autor argentino- e intentan descifrar lo que sucedi¨® en una fiesta a la que no asistieron, pero de la que tienen diversas versiones. Muchos lectores la tienen por su novela favorita; en ella aparece, adem¨¢s, la sombra horrenda de la ¨²ltima dictadura militar argentina.

Cuentos completos, 1957-2000 (2002). Como en muchos de los grandes escritores americanos, el cuento forma una parte esencial del "laboratorio Saer". Muchos de ellos orbitan en el sistema de sus novelas mayores, pero tienen una entidad categ¨®ricamente aut¨®noma. En la edici¨®n de este volumen, el autor decidi¨® ordenarlos en orden cronol¨®gico inverso, como remontando la corriente hasta el origen -f¨ªsico, intelectual, afectivo- de su escritura. Muchas de las piezas que componen ese volumen, como 'Palo y hueso', 'La mayor' o 'Sombras sobre un vidrio esmerilado', son obras maestras inaugurales del periodo pos Borges del cuento hispanoamericano.