La posguerra de los balnearios

La guerra de los balnearios, que mantuvo en vilo a los vecinos de Caldes de Malavella (Selva) hace un par de meses, ces¨® con la firma de un nuevo contrato de suministro entre Vichy Catal¨¢n y Prats. Pero el caso ha destapado un tema que preocupa, y mucho, a los habitantes de esta localidad, como es el derecho p¨²blico sobre las aguas termales que le han dado fama. En Caldes no est¨¢n claros cu¨¢les son los derechos que tiene el municipio y cu¨¢les son los que tienen las empresas situadas en el pueblo, que disponen de conexi¨®n a las fuentes y se dedican a la producci¨®n de agua envasada.

El Ayuntamiento trabaja para resolver la situaci¨®n y los vecinos han dado un voto de confianza al alcalde, aunque no descartan volver a salir a la calle como hicieron en noviembre si consideran que el proceso no avanza o si no reciben suficiente informaci¨®n sobre las negociaciones.

El municipio desea un tanto por ciento del beneficio de las embotelladoras

Caldes no sabe cu¨¢nta agua toman las empresas de su subsuelo

Actualmente existen dos empresas que explotan directamente las fuentes del pueblo: Vichy Catal¨¢n, titular de las marcas Malavella y Vichy Catal¨¢n, y Nestl¨¦ Waters, propietaria de Agua San Narciso. En el caso de Vichy, la inauguraci¨®n de la primera planta embotelladora se remonta a 1889. Tambi¨¦n hay tres fuentes p¨²blicas, pero de ellas no brota agua de forma permanente, los vecinos se quejan de su escaso caudal y temen la sobreexplotaci¨®n de los recursos h¨ªdricos por parte de las plantas embotelladoras.

En un intento de poner orden, el Ayuntamiento de Caldes emiti¨® un dictamen a principios del pasado noviembre donde se pronunciaba a favor de la recuperaci¨®n de los derechos p¨²blicos de las aguas termales: "El agua de Caldes no es una mercanc¨ªa, es cultura, es sociedad y patrimonio de todos", aduc¨ªa.

Seg¨²n explica el alcalde, el independiente Joan Colomer, el primer paso es aclarar qu¨¦ cantidad de agua extraen las empresas. Colomer reconoce que el consistorio hace a?os que desconoce el volumen y caudal de agua que toman Vichy Catal¨¢n y Nestl¨¦ Waters del subsuelo de Caldes, y ha solicitado la intervenci¨®n de la Direcci¨®n General de Energ¨ªa y Minas de la Generalitat para obtener estos datos.

Colomer conf¨ªa en el estudio que ha encargado a una empresa externa para "abordar de una vez" los caudales a los que tiene derecho el pueblo. Son informes realizados por t¨¦cnicos e ingenieros de minas cuyo contenido espera conocer el consistorio durante este mes.

Las embotelladoras prefieren no pronunciarse al respecto hasta recibir informaci¨®n del Ayuntamiento. El responsable de la planta de Nestl¨¦ Waters en Caldes asegura que a¨²n no han recibido una notificaci¨®n "oficial" sobre el inicio del proceso.

La situaci¨®n, no obstante, es m¨¢s compleja de lo que parece. Existe un vac¨ªo normativo sobre los derechos de los municipios respecto a las aguas termales. A diferencia de los recursos hidr¨¢ulicos y geol¨®gicos, los recursos minerales no son propiedad de la Administraci¨®n.

A principios del 2007, el Ministerio de Industria redact¨® un borrador de un anteproyecto de ley para integrar las fuentes y aguas minerales en el r¨¦gimen general de la ley de aguas, e igualarlas as¨ª al resto de los recursos naturales, aunque no sigui¨® adelante. Seg¨²n el anteproyecto, las empresas que quieran explotar una fuente habr¨¢n de solicitar una concesi¨®n administrativa y pagar los correspondientes impuestos al Ayuntamiento para el uso privado del dominio.

A las embotelladoras espa?olas no les sent¨® bien la iniciativa, por considerar que se vulnera la propiedad privada. Seg¨²n Montserrat Veh¨ª, concejal de Aguas y Medio Ambiente de Caldes, las empresas envasadoras "tienen mucho poder y la ley est¨¢ encallada". Veh¨ª lamenta la actitud "pasiva" de la Direcci¨®n de Energ¨ªa y Minas y la insta a actuar con contundencia para solucionar una "situaci¨®n irregular".

"Es una paradoja. Por una parte se reconoce que las aguas mineromedicinales son de inter¨¦s p¨²blico, y por otra, est¨¢n en manos privadas". No es la primera vez que el Ayuntamiento de Caldes intenta aclarar la cuesti¨®n. Todos los gobiernos municipales han hecho gestiones e incluso se edit¨® un estudio en la d¨¦cada de 1990 para conocer mejor el problema.

Seg¨²n el ex alcalde y actual portavoz de ERC, Marcel Vila, la soluci¨®n no es inmediata, pese a reconocer la lucha de a?os, gestiones y b¨²squeda de asesoramiento sobre el tema.

Hoy el municipio no obtiene rendimientos de la actividad embotelladora, m¨¢s all¨¢ de la recaudaci¨®n del impuesto de actividades. Una situaci¨®n "que no se entiende", a juicio de Sergi Mir, portavoz de los vecinos durante las manifestaciones populares a favor del agua termal. "El municipio tendr¨ªa una fuente de financiaci¨®n muy importante si logr¨¢semos recuperar los derechos sobre las aguas termales".

?sta es una de las motivaciones que mueven al actual gobierno municipal a la hora de pedir la intervenci¨®n de Minas: lograr que el municipio reciba un tanto por ciento de los beneficios de las empresas embotelladoras. Seg¨²n explica Colomer, este tipo de acuerdos ya se aplican en otras localidades vinculadas a la explotaci¨®n de las aguas, como Sant Hilari Sacalm (Selva), donde se embotella la Fontvella.