"?Apu?alado? Bueno, pero cicatrizar¨¢"

En caso de no poder mentar la bicha, siempre queda la met¨¢fora, la cita, el doble sentido o incluso los mariachis. Y as¨ª, en tono casi festivo y po¨¦tico (qui¨¦n lo dir¨ªa) transit¨® el alcalde, Alberto Ruiz-Gallard¨®n por su primer lunes despu¨¦s del apu?alamiento. Porque eso, y lo dio a entender ¨¦l ayer tras una pregunta, es lo que su partido le ha hecho al dejarle fuera de las listas al Congreso. "?Le han clavado un pu?al?", le pregunt¨® un reportero de Caiga quien caiga a la salida de un acto. "?Me han apu?alado? Bueno, pero las heridas cicatrizan y no me siento demasiado herido". Pero por si acaso, tambi¨¦n tuvo un b¨¢lsamo mel¨®dico para pasar el trago.

Un grupo de mariachis cant¨® "Ojal¨¢ que te vaya bonito" al alcalde

El presidente de Per¨² parafrasea a Napole¨®n para consolar a Gallard¨®n

Ojal¨¢ que te vaya bonito, ojal¨¢ que se acaben tus penas, que te digan que yo ya no existo, y conozcas personas m¨¢s buenas.

Se lo cantaron unos mariachis contratados por el programa de Tele 5 para "animar" al alcalde. Guitarras, violines y sombreros de ala gigante. Y ¨¦l acept¨® el envite. Pese a que sab¨ªa que le esperaban fuera del hotel de Princesa donde hab¨ªa acudido a un acto, sac¨® al pol¨ªtico que menos acostumbra y se fue a por ellos. Incluso le llovi¨® confeti. Luego, a ritmo de rumba, le cantaron aquello de: no estaba muerto, estaba de parranda.

Y en los balcones de enfrente, para m¨¢s gloria del alcalde que todav¨ªa no sabe si quiere seguir si¨¦ndolo, la gente coreaba: "?Viva Gallard¨®n! ?No pierdas la esperanza!". "?Me dar¨¢n trabajo en su programa despu¨¦s de las elecciones?", pregunt¨® el regidor al reportero.

Minutos antes, Gallard¨®n hab¨ªa presentado en el hotel el nuevo canal de televisi¨®n por Internet, esmadrid4u. Y sin desmerecer el acto, la sala estaba sorprendentemente abarrotada de prensa. "Esto debe significar que el proyecto es bueno", ironiz¨® el concejal de Econom¨ªa, Miguel ?ngel Villanueva, consciente de que la multitud persegu¨ªa cada reacci¨®n del alcalde.

Y ah¨ª Gallard¨®n recurri¨® a las citas para hablar de turismo, o de lo que cada uno quisiera entender. Habl¨® del conejo de A trav¨¦s del espejo y lo que Alicia encontr¨® all¨ª. "En aquel mundo, quien no corr¨ªa el doble, no se mov¨ªa". Y se acord¨® de Antoine de Saint Exup¨¦ry, con aquello de que "amar no es mirarse el uno al otro; es mirar juntos en la misma direcci¨®n". Y todav¨ªa tuvo tiempo para otra. La definici¨®n de locura seg¨²n Albert Einstein: "Hacer lo mismo una y otra vez y esperar resultados diferentes". ?Hablaba del PP? No lo dijo. Pero, mientras tanto, Esperanza Aguirre insist¨ªa en mirarle a ¨¦l desde otro acto y no se cre¨ªa que el alcalde vaya a dimitir.

Pero todo eso sucedi¨® despu¨¦s de que Gallard¨®n hubiera recibido al presidente de Per¨², Alan Garc¨ªa, en la Casa de la Villa. Una cita que excusaba su presencia en la ¨²ltima reuni¨®n de la Junta Directiva Nacional del PP antes de las elecciones. Una ausencia que podr¨ªa ser el comienzo de lo que este peri¨®dico anunci¨®: que Gallard¨®n abandona la pol¨ªtica nacional.

El acto comenz¨® con retraso y la espera dio para an¨¦cdotas: Gallard¨®n habl¨® en un c¨ªrculo reducido del fr¨ªo que hac¨ªa en Mosc¨², ad¨®nde acudi¨® el pasado fin de semana. Y dio para bromas: "Tendr¨¢s que citar a Pizarro", le sugiri¨® un miembro de la oposici¨®n que no se refer¨ªa precisamente a Manuel, expresidente de Endesa y ant¨ªdoto contra la depresi¨®n de Mariano Rajoy.

Finalmente, el conquistador espa?ol, que dej¨® su vida en Lima, no apareci¨® en el discurso que Gallard¨®n pronunci¨® tras conceder la llave de la ciudad a Garc¨ªa. Pero el peruano, en una intervenci¨®n brillante, graciosa e improvisada, se acord¨® tambi¨¦n de la tremenda desgracia de su anfitri¨®n. Y lo compar¨®, nada menos que con un momento cumbre de la vida de Napole¨®n. Cuando el emperador casi pierde la batalla de Marengo. "Perdida toda expectativa, se dijo as¨ª mismo y a sus lugartenientes: Es verdad que vengo de perder una batalla, pero antes que caiga la noche puedo ganar otra". Ah¨ª es nada. La gente estall¨® en una carcajada. "Quien cree en la pol¨ªtica nunca debe abandonar", porque "la vida es una continuidad de esfuerzos", insisti¨® Garc¨ªa.

Luego, en los pasillos, s¨®lo se hablaba del apu?alado. "No se va. Siempre da un paso hacia adelante, y luego dos hacia atr¨¢s", dec¨ªa una concejal de la oposici¨®n. Nadie lo sabe. En los c¨ªrculos del alcalde insisten en que no tiene la decisi¨®n tomada.