Juliette Lewis, estrella del rock
La actriz, metida a l¨ªder de una banda de 'punk', act¨²a esta noche en Barcelona
Hace cuatro a?os y en menos de lo que dura un suspiro, Lewis cambi¨® de vida y trabaj¨®. Mand¨® a paseo a Hollywood y se subi¨® a una furgoneta para recorrer el mundo con tres tipos sudorosos, entre los que est¨¢ su novio, con el deseo de convertirse en estrella de rock. Y en eso est¨¢. Tras dos discos con cierto ¨¦xito entre los amantes del rock duro, la actriz de, por ejemplo, El cabo del terror, nacida en Los ?ngeles hace 34 a?os, se ha convertido en lo que siempre quiso ser. "Creo que esper¨¦ demasiado", confiesa Juliette mientras repasa sus labios con una barra de cacao. "Esto va en serio. La m¨²sica siempre me ha aportado lo que necesito. No es tan dura la carretera; tambi¨¦n yo sudo mucho".
"No es tan dura la carretera; yo sudo tanto como los dem¨¢s del grupo"
Tiene una voz sexy. Grave, un poco af¨®nica pero sensual. Tambi¨¦n, unos ojos grandes y expresivos. Entre dulces y peligrosos. Las habituales y manidas declaraciones de los cantantes de rock ("Me gusta conectar con el p¨²blico", y todo eso) adquieren en boca de la actriz un significado verdadero. Sobre el escenario, Juliette es un animal salvaje: salta, suda, escupe, provoca... Una versi¨®n femenina de Iggy Pop. "En el rock hay un problema", explica muy seria. "El s¨ªndrome de la televisi¨®n. Muchos van a un concierto como quien ve una teleserie".
Para solucionarlo, cada noche Juliette salta desde el escenario y surfea entre la masa. "Utilizo mi cuerpo para encender la llama. As¨ª es el rock and roll. A veces me corto, me tuerzo el tobillo..., cosas superficiales".
Al cine, dice, volver¨¢ seguro, pero ahora lo primero es lo primero: "Llevo un a?o y medio viviendo en un autob¨²s. Y estamos grabando dos discos a la vez. Si me queda tiempo libre har¨¦ alguna pel¨ªcula. En diciembre tuve un mes, pero con la huelga de actores se par¨® el proyecto".
A lo que no ha renunciado de su antigua vida de estrella de cine es a la Iglesia de la cienciolog¨ªa, la religi¨®n m¨¢s cool de Hollywood. "Se dicen muchas tonter¨ªas sobre el tema. Para m¨ª es una filosof¨ªa que fortalece. Una forma de conocimiento y yo soy muy espiritual. Adem¨¢s, es perfectamente compatible con el rock", bromea.
Juliette mir¨® de reojo el reloj de una peque?a Blackberry, donde escribe las letras de sus canciones. Quedaban cuatro horas para su actuaci¨®n en Madrid del mi¨¦rcoles junto a su grupo The Licks (los lametazos) -(hoy tocan en el Espacio Movistar de Barcelona)-. Hace a?os que en esa agenda electr¨®nica los tel¨¦fonos de actores como Brad Pitt (que fue su novio) o Robert de Niro se mezclan con los de otros rockeros con los que sale de juerga: Iggy Pop, Lemmy, de Mot?rhead. "Pero me lo paso mejor haciendo el idiota con mi banda. Nos da igual todo y la liamos cuando nos da la gana. Nos han echado de los camerinos de la mayor¨ªa de las entregas de premios y festivales por hacer el imb¨¦cil. Y con raz¨®n".
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