Miedo y globalizaci¨®n
Muntadas contin¨²a su reflexi¨®n en torno a distintas formas de la incomunicaci¨®n a trav¨¦s de la muestra Miedo/Jauf, sobre los conflictos de la inmigraci¨®n en el Estrecho
Empe?ados en ocultarlo, el miedo se nos antoja un sentimiento individual. Su ra¨ªz social es sin embargo patente: desde peque?os nos lo inculcan como medio de prevenci¨®n, de autodefensa. El miedo, como se?ala Agnes Heller, procede de la experiencia personal y social a trav¨¦s de la comunicaci¨®n. Por otra parte, la semilla plantada en la infancia germina de tal modo que el miedo no necesita para dispararse un peligro real: le basta lo desconocido. Esto hace que un vasto fen¨®meno contempor¨¢neo, las migraciones, est¨¦ empapado por el miedo. Mejor ser¨ªa decir los miedos. Porque el temor a un futuro incierto que empuja al emigrante fuera de su pa¨ªs es diferente del que siente el ciudadano del pa¨ªs receptor ante ese otro que, se le antoja, invade su cotidianidad. Ambos miedos terminan conjug¨¢ndose en plurales antit¨¦ticos que evitan la segunda persona: los nosotros contrapuestos a los ellos establecen barreras tan potentes como las levantadas en California o en Melilla, por el mismo Occidente que festejara la ca¨ªda del muro de Berl¨ªn.
Antoni Muntadas. La construcci¨®n del miedo y la p¨¦rdida de lo p¨²blico.
Centro Jos¨¦ Guerrero. Oficios, 8, Granada. Hasta el 23 de marzo.
En las dos ¨²ltimas obras de su serie On Translation (iniciada en 1995) Muntadas analiza este proceso de incomunicaci¨®n. Si Fear/Miedo (2005) tematiza los temores en la frontera entre Estados Unidos y M¨¦xico, Miedo/Jauf estudia esa misma realidad en el Estrecho, entre Espa?a y Marruecos. Ambos trabajos se desarrollan a trav¨¦s de entrevistas, salpicadas con titulares de prensa y fragmentos f¨ªlmicos. As¨ª muestra c¨®mo los recelos individuales engranan con intereses sociales, econ¨®micos y pol¨ªticos, y terminan forjando una cultura del temor, alimentada por los medios de comunicaci¨®n, que fortalece viejos estereotipos.
Pese a las semejanzas formales, Miedo/Jauf posee mayor densidad. La obra, a medida que avanza, abre nuevos espacios. Al miedo de permanecer en Marruecos se une el del mar y el de la estancia en Espa?a, un pa¨ªs donde -dice uno de los entrevistados- hay que trabajar, s¨ª, pero adem¨¢s hacerse invisible. Al otro miedo, al nuestro, que levanta muros, siembra desconfianzas y convierte f¨¢cilmente al emigrante en delincuente, se a?ade el se?uelo del islam asimilado a amenaza. No faltan voces que abren nuevas perspectivas (de este lado, la cr¨ªtica a las leyes de extranjer¨ªa; del otro, la exigencia de una nueva convivencia con particular reconocimiento de la mujer), encalladas, sin embargo, porque Occidente ha abandonado ?frica a su suerte y as¨ª proliferan las mafias que anteponen hoy al tr¨¢fico de drogas el de personas. Esta diversidad de dimensiones convierte Miedo/Jauf en una obra coral, como dice el propio Muntadas.
Yolanda Romero y Mar Villaespesa, comisarias de la exposici¨®n, han completado la muestra con trabajos de Muntadas de los a?os setenta y ochenta que contextualizan acertadamente los dos v¨ªdeos. On Subjectivity, quiz¨¢ la obra m¨¢s importante, reflexiona, por ejemplo, sobre la recepci¨®n individual de im¨¢genes de amplia difusi¨®n social. En 1978, Muntadas seleccion¨® 50 fotos publicadas en Life y las envi¨®, en grupos de cinco, a 250 personas para que cada una le remitiera pies para las fotos que les hubieran tocado en suerte. La obra re¨²ne los comentarios contrastados con las fotos y los pies que public¨® la revista. A esto se a?ade una pel¨ªcula formada por fragmentos heterog¨¦neos del incesante flujo de la televisi¨®n unidos entre s¨ª por el propio autor. La obra ofrece materiales para una reflexi¨®n sobre la imagen de masas y los modos en que los individuos la reciben y la conforman, y a la vez se forman a trav¨¦s de ella. M¨¢s dura es Political Advertisement VI que compila medio siglo de cu?as electorales norteamericanas. Vistas fuera de contexto hacen enrojecer. Estas obras ofrecen pasos de una continua reflexi¨®n cr¨ªtica sobre la comunicaci¨®n, su condici¨®n asim¨¦trica y su capacidad para modelar la cultura hasta forjar, como en el caso del miedo, emociones compartidas. Muntadas no rechaza la imagen de masas (como tanto discurso maniqueo), la trabaja anal¨ªtica y dial¨¦cticamente. Examina y muestra c¨®mo construye la realidad social, e intenta impugnar su proceder desde ella misma. Por eso llama a estos trabajos sobre las fronteras intervenciones televisivas. En ellos saca a la luz cuanto generalmente se silencia. No se contenta con la denuncia, sino que intenta recuperar para el discurso un espacio p¨²blico, ese espacio que cortocircuitan miedos y enfrentamientos. -
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.