La Junta Electoral admite apodos en las listas

Boti ser¨¢ Boti en las listas de IU. Porque si fuera Mar¨ªa Dolores, bastantes de sus potenciales votantes no sabr¨ªan que se presenta a las elecciones. En el n¨²mero siete de la lista de IU por Madrid, Mar¨ªa Dolores Garc¨ªa Rodrigo aparecer¨¢ con el sobrenombre de Boti, con el cual se ha hecho conocida como figura relevante del colectivo de gays y lesbianas.

La Junta Electoral Central acord¨® el pasado d¨ªa 24, a consultas de IU, que "si bien el nombre y apellidos tienen legalmente la funci¨®n de identificaci¨®n personal de los candidatos, no se impide la utilizaci¨®n de seud¨®nimos o apodos que sirven o ayudan a la identificaci¨®n, pero siempre junto al nombre y apellidos". En la papeleta pondr¨¢: Mar¨ªa Dolores -Boti- Garc¨ªa Rodrigo. "Desde que tengo uso de raz¨®n funciono como Boti", explica la candidata. "Llevo cien a?os en esto y es muy importante que la militancia sepa a qui¨¦n vota, que los gays y lesbianas sepan a qui¨¦n votan".

Votos sin alteraciones

El pasado oto?o, la Junta Electoral aprob¨® una instrucci¨®n por la cual no se admitir¨¢n como v¨¢lidos los votos que lleven "cualquier tipo de alteraci¨®n". Parece una obviedad, pero la propia Junta revela que hasta ahora "ha evitado una interpretaci¨®n excesivamente formalista de este precepto" y ha intentado averiguar cu¨¢l era la intenci¨®n del votante. Se han contabilizado como v¨¢lidos votos que ten¨ªan "una cruz o aspa al lado del candidato n¨²mero uno de la lista", "inclu¨ªan un aspa ligeramente por encima del primer candidato", o "conten¨ªan una l¨ªnea oblicua sobre la menci¨®n del partido".

Consideraba que estos casos "no ofrec¨ªan dudas sobre la voluntad del elector de emitir su voto a favor de dicha candidatura". Tras una sentencia del Constitucional, se acabaron las excepciones.