La crisis econ¨®mica amenaza a la 'web'
LOS CALIFORNIANOS, en particular los de San Francisco y Silicon Valley, tienden a considerar los pron¨®sticos de crisis como atentados contra la mentalidad del emprendedor. Merece discusi¨®n, pero en estos principios de a?o nadie puede quedarse con la cabeza en el silicio sin correr graves riesgos. Ya no cabe duda de que la crisis inmobiliaria tendr¨¢ efectos fuera del sector. "Las fichas del domin¨® est¨¢n empezando a caer", se?ala el famoso analista y consultor Henry Blodget, cofundador y editor jefe de Silicon Alley Insider.
Lejos de volver recargados tras sus vacaciones, los estadounidenses est¨¢n de humor sombr¨ªo. La confianza de los consumidores est¨¢ en su nivel m¨¢s bajo desde enero de 2002, fecha en la que el RBC Cash Index del Royal Bank of Canada empez¨® a medirla mensualmente. La morosidad se debe a la ca¨ªda del mercado inmobiliario, al aumento del precio del petr¨®leo y a la d¨¦bil creaci¨®n de empleos en diciembre.
Los ingresos de Google por publicidad podr¨ªan llegar a 16.000 millones de d¨®lares, casi igual que las cuatro mayores cadenas nacionales de televisi¨®n
La publicidad, fuente casi exclusiva de ingresos para las empresas 'web 2.0', se reducir¨¢. "Todas las empresas grandes de Internet se ver¨¢n afectadas"
Floyd Norris y Peter Goodman, dos de los economistas estrella de The New York Times, se sumaron a la preocupaci¨®n con un balance sombr¨ªo de la situaci¨®n. Recuerdan que las ventas de fines de a?o fueron las peores de los ¨²ltimos cinco a?os. Estiman que el paquete de 100.000 millones de d¨®lares previsto por la Administraci¨®n de George W. Bush para salir de la crisis llega demasiado tarde. Afirman: "Muchos analistas consideran que la econom¨ªa est¨¢ ahora en una espiral descendente en la que cada noticia negativa desencadena otra". La pregunta ya no es si habr¨¢ crisis, sino "cu¨¢l ser¨¢ su profundidad y alcance".
Para quien se interesa por las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n, la pregunta es cu¨¢l ser¨¢ su impacto en el sector. Un sondeo realizado por la National Venture Capital Association (NVCA) en diciembre entre 170 inversores de riesgo mostr¨® que el 60% de ellos esperaban una merma en el crecimiento econ¨®mico.
Blodget, que ha sido acusado de pr¨¢cticas poco ¨¦ticas durante la era de las puntocom, pero cuya capacidad de an¨¢lisis econ¨®mico no est¨¢ en duda, ofrece un diagn¨®stico m¨¢s preciso. Considera que la publicidad -fuente casi exclusiva de ingresos para las empresas de la web 2.0- se reducir¨¢ en los meses que vienen. "Creemos que todas las empresas grandes de Internet y de los mass media se ver¨¢n afectadas".
En agosto, Blodget anunciaba a las empresas de la web que se ten¨ªan que "preparar para tiempos dif¨ªciles". Destacaba la proliferaci¨®n de start-ups, lo que se traduc¨ªa en m¨¢s competencia para captar a un n¨²mero grande, pero limitado, de consumidores. El ritmo de adopci¨®n de l¨ªneas de banda ancha pierde dinamismo a medida que los hogares est¨¢n equipados. Seg¨²n el bloguero Om Malik, en el tercer trimestre del 2007 el 53% de los hogares estadounidenses ten¨ªan banda ancha y el 77% dispon¨ªa de ordenador.
"Esperamos que el movimiento a la baja deprimir¨¢ las inversiones iniciales y a los inversores de riesgo, quienes a su vez deprimir¨¢n la actividad empresarial", indica Blodget ahora. "De manera que seguimos sugiriendo que los ejecutivos de negocios digitales se preparen para tiempos m¨¢s dif¨ªciles". Las empresas de medios podr¨ªan verse m¨¢s afectadas que el resto por la previsible reducci¨®n de los presupuestos de publicidad tradicional en estos momentos de crisis anunciada.
En un art¨ªculo dedicado a Google publicado en The New Yorker, el analista de medios Ken Auletta muestra su creciente preocupaci¨®n respecto a Google, cuyos ingresos este a?o "podr¨ªan llegar a 16.000 millones de d¨®lares, y se acercar¨ªan as¨ª a los ingresos por publicidad de las cuatro mayores cadenas nacionales de televisi¨®n". Blodget cree que, en caso de crisis, Google podr¨ªa salir mejor parada que el resto.
En mayo de 2007, Michael Arrington, fundador exitoso de TechCrunch.com, escribi¨® que le vendr¨ªa bien a Silicon Valley un ritmo un poco m¨¢s moderado. Igual que en el a?o 2000, dec¨ªa, la gente ya s¨®lo piensa en inversiones astron¨®micas y, al igual que entonces, los responsables de mercadotecnia se preocupan por la imagen de sus empresas por encima de los desarrolladores y sus ideas.
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