Lenguas del Estado

No me llamo a enga?os si digo que esta legislatura, se mire a nivel nacional o auton¨®mico, se ha caracterizado por el enfrentamiento. Si traz¨¢ramos una l¨ªnea imaginaria y se colocaran a un lado y al otro de la misma los pol¨ªticos, uno de estos lados se copar¨ªa por los grupos en general y, en el otro, el Partido Popular. Un partido cuyos pol¨ªticos de mayor responsabilidad han ocupado su tiempo en hostigar de una y otra forma, tratando de lograr una uniformidad de pensamiento para todo el Estado; huyendo del pluralismo pol¨ªtico y auton¨®mico. Enfrentamiento que se ha dado en los aspectos m¨¢s importantes de la sociedad mediante la invasi¨®n de miedos en materia de terrorismo; unidad del Estado; y quiebra, y deterioro de las instituciones, si, con este planteamiento, pod¨ªan alcanzar el gobierno. Esta actuaci¨®n se ha ido llenando de acompa?antes m¨¢s o menos interesados, y tambi¨¦n de buena voluntad, que han permitido reforzar su postura. Algunas asociaciones de v¨ªctimas y parte de la jerarqu¨ªa eclesi¨¢stica han ido engrosando sus filas en este menester. Realidad que alcanza uno de sus puntos m¨¢s fuertes con la elaboraci¨®n y aprobaci¨®n de los distintos estatutos auton¨®micos; en concreto, con los de Catalu?a y Andaluc¨ªa. Pues bien, las mayores cotas de autogobierno y descentralizaci¨®n que introducen estas disposiciones auton¨®micas fueron vistas por el grupo popular, y trasladadas a la opini¨®n p¨²blica como logros del separatismo. Esta puesta en escena hizo que se llegara a tal grado de memez que numerosos ciudadanos emplearon su tiempo en e-mail, y toda clase de mensajes dirigidos a boicotear los productos catalanes. ?Vamos! como si el hecho de no comer butifarra, cuajada, pan tumaca o cuajada salvaran la unidad de Espa?a que nunca estuvo ni est¨¢ en otro peligro, salvo para energ¨²menos. Era el enfrentamiento por el enfrentamiento para conseguir movilizar el sentimiento nacional y buscar votos en este granero como ahora tambi¨¦n en el religioso, como si estuvi¨¦ramos en tiempos en los que los gobiernos se formaran por la gracia de Dios y no por los votos.

Una situaci¨®n de la que no nos salvamos los andaluces. Y as¨ª, Javier Arenas se empe?¨® en este hacer; ocup¨® su tiempo en descalificar el Estatuto de Andaluc¨ªa, hasta que por fin lo acept¨® y admiti¨® que Andaluc¨ªa se definiera como "realidad nacional", lo que no impidi¨® -y, en esto, Javier Arenas es un arte- que, como Pedro antes de que cantara el gallo, negara hasta tres veces y muchas m¨¢s, en una entrevista que sud¨® en la Cope -recomiendo su lectura para definir al pol¨ªtico-, que figurara esta expresi¨®n con este significado en el Estatuto para Andaluc¨ªa.

Pues, bien, ahora resulta que, lo mismo que no pod¨ªamos comer butifarra porque Espa?a se pod¨ªa romper, los andaluces tampoco podemos estudiar catal¨¢n, vasco ni gallego. Es lo que dice porque el presidente Chaves propone que en las Escuelas de Idiomas de Andaluc¨ªa se impartan las lenguas catalana o vasca. Es el cuento de nunca acabar de enfrentar. Si el Pa¨ªs Vasco y Catalu?a est¨¢n y son Espa?a y en estas comunidades se habla, junto con el espa?ol, vasco y catal¨¢n, no s¨¦ por qu¨¦ no se puede facilitar su conocimiento. El conocimiento de la cultura de las distintas comunidades lo que permite es la aproximaci¨®n, no la separaci¨®n. Es m¨¢s, precisamente lo que hist¨®ricamente ha separado -no est¨¢ el tiempo lejano- ha sido la prohibici¨®n de usar el vasco y el catal¨¢n. Una divulgaci¨®n que no s¨®lo sirve a estos fines de unidad si no que, adem¨¢s, puede actuar de freno a posturas radicales y, cuando menos, es pr¨¢ctica en los cambios de residencia. En fin que ni Catalu?a, ni el Pa¨ªs Vasco ni Galicia son comunidades aparte de Espa?a ni de Andaluc¨ªa. De todas formas, y para terminar, como algunos pol¨ªticos parece que buscan hasta lo que hacen los hijos para descalificar a sus padres -se busca hasta d¨®nde han estudiado los hijos del presidente andaluz-, dir¨¦ que mi hijo mayor ha estudiado en la Universidad P¨²blica Rovira i Virgili (Tarragona), sin que su condici¨®n de andaluz le haya impedido acabar con premio extraordinario Fin de Carrera y mi hija mayor, que trabaja y vive en Catalu?a, es del Betis y del Joventut de Badalona.