El Papa sit¨²a junto a Bl¨¢zquez a un obispo alejado del nacionalismo

La sorpresa que supuso en 1995 el desembarco de Ricardo Bl¨¢zquez como obispo de Bilbao, se ha repetido con la designaci¨®n de su obispo auxiliar. Frente a las expectativas de que el sucesor de Carmelo Echenagus¨ªa, que renunci¨® hace un a?o por raz¨®n de edad, fuera un hombre del equipo de la di¨®cesis, el Vaticano ha nombrado a Mario Iceta Gavicagogeascoa, un joven sacerdote vizca¨ªno y euskaldun, pero muy alejado de las coordenadas ideol¨®gicas y culturales dominantes en el clero vasco. "Roma ha hecho un nuevo movimiento para corregir el perfil excesivamente nacionalista de la Iglesia vasca", apunta un sacerdote de la di¨®cesis. Iceta (Gernika, 1965), vicario general de C¨®rdoba, se convertir¨¢ en el miembro m¨¢s joven de la Conferencia Episcopal y en uno de los obispos m¨¢s j¨®venes de la Iglesia cuando sea ordenado a mediados de abril en Bilbao Se le considera un hombre pr¨®ximo al Opus Dei y en sinton¨ªa con las posiciones conservadoras que defiende la c¨²pula de la Conferencia Episcopal y, en ¨²ltima instancia, el papa Benedicto XVI.

Sin embargo, las fuentes consultadas estiman que los sectores eclesiales y pol¨ªticos nacionalistas que recibieron de u?as a Blazquez cuando lleg¨® de Palencia lo tendr¨¢n m¨¢s dif¨ªcil para criticar la designaci¨®n del nuevo obispo auxiliar. Aunque no pertenezca a la di¨®cesis, Iceta es vizca¨ªno, habla euskera adem¨¢s de franc¨¦s, ingl¨¦s, italiano y alem¨¢n, y tiene una s¨®lida formaci¨®n acad¨¦mica y teol¨®gica.

Doctor en Medicina y Teolog¨ªa, m¨¢ster en Econom¨ªa y con estudios superiores de solfeo, se ha especializado en cuestiones de bio¨¦tica, uno de los frentes a los que la jerarqu¨ªa cat¨®lica est¨¢ prestando m¨¢s atenci¨®n, con cuestiones como la muerte digna, la investigaci¨®n con c¨¦lulas madres o la interrupci¨®n del embarazo. "Las posiciones que defiende en materia de moral son las del papa Ratzinger", afirma un te¨®logo vasco refiri¨¦ndose a las tres obras publicadas por Iceta. Como otras fuentes consultadas, este experto interpreta que su designaci¨®n tiene un alcance estrat¨¦gico ante los movimientos que se esperan en la Iglesia vasca, como la jubilaci¨®n en el plazo de un a?o del obispo de San Sebasti¨¢n, Juan Mar¨ªa Uriarte. Con la marcha de ¨¦ste se clausurar¨¢ posiblemente la etapa abierta en la transici¨®n democr¨¢tica, en la que los obispos y la mayor¨ªa del clero han estado m¨¢s pr¨®ximos al sector nacionalista de la sociedad. La crisis de vocaciones sacerdotales y los aires conservadores que soplan en la Conferencia Episcopal y en el Vaticano est¨¢n haciendo posible un giro que puede acentuarse en el futuro.

Desconcierto

La designaci¨®n de Mario Iceta fue recibida con desconcierto por parte del clero vizca¨ªno, que esperaba que el nuevo obispo procediera de la di¨®cesis. Xabier Larra?aga, profesor de Deusto, el vicario ?ngel Mar¨ªa Unzueta o el sacerdote Joseba Segura encajaban mejor en las viejas coordenadas. Sin embargo, otras fuentes advierten que ser¨ªa equivocado extraer la conclusi¨®n de que la candidatura de Iceta no ha contado con el respaldo de monse?or Bl¨¢zquez, por m¨¢s que se le considere una apuesta personal del cardenal de Madrid, Antonio Mar¨ªa Rouco. Como miembro de la Congregaci¨®n de los Obispos, Rouco tiene una gran influencia en los nombramientos episcopales. La designaci¨®n en 2004 como obispo de Palencia de Jos¨¦ Ignacio Munilla, p¨¢rroco de Zumarraga y de perfil netamente m¨¢s integrista que el que presenta Iceta, se inscribe en esta corriente.

Bl¨¢zquez dio cuenta del nombramiento en una comparecencia junto a Carmelo Echenagusia, que se despidi¨® tras 13 a?os como auxiliar de la di¨®cesis. Bl¨¢zquez agradeci¨® a Echenagus¨ªa su dedicaci¨®n y "sabio asesoramiento" y felicit¨® "cordialmente" a su sucesor, que ser¨¢, dijo, "una ayuda inestimable".