La polic¨ªa lanza una gran redada contra estafadores por Internet
76 detenidos hab¨ªan logrado tres millones con mensajes falsos de Hacienda
El phishing es un timo de moda en Internet. El origen est¨¢ en esos correos electr¨®nicos que miles de ciudadanos reciben a diario, en los que se dice que la Agencia Tributaria o el banco con el que uno suele operar necesita una serie de datos bancarios con diferentes motivos. Todo es mentira. Pero con que pique el 1%, el timador gana, porque puede vaciar la cuenta del timado. La polic¨ªa acaba de detener a 76 personas en toda Espa?a acusadas de haber estafado m¨¢s de tres millones de euros con esta t¨¦cnica. Ese dinero, o bien iba a cuentas desconocidas o se destinaba a otra moda delictiva: el holiday shopping, o comprar con la pasta o la tarjeta de un timado.
El m¨¦todo es f¨¢cil y barato. Basta con tener un ordenador y una conexi¨®n a Internet. Incluso ni eso. Se puede hacer desde un cibercaf¨¦. Los ahora detenidos tras las pesquisas de la Brigada de Investigaci¨®n Tecnol¨®gica de la Comisar¨ªa General de Polic¨ªa Judicial operaban de las dos maneras. Unos montaban subastas por la red, mediante la creaci¨®n de falsas p¨¢ginas web id¨¦nticas a las m¨¢s conocidas de la red. El cliente que tuviera la suerte de no fijarse demasiado, hac¨ªa su puja, pagaba por el producto (han vendido desde coches a tarjetas de m¨®viles) pero nunca recib¨ªan nada. Y cuando iban a reclamar, no hab¨ªa d¨®nde hacerlo.
Los otros hac¨ªan phishing puro, con tres m¨¦todos. Una modalidad consist¨ªa en mandar correos electr¨®nicos en los que supuestamente Hacienda reclamaba unos datos para devolver dinero al contribuyente o para actualizar los datos. Hacienda ya ha alertado en varias ocasiones de algo obvio en su sistema de funcionamiento: si quiere algo, lo comunica por carta y si el contribuyente opera por Internet, hay que meter un sinf¨ªn de claves de protecci¨®n. Pero la gente pica.
La segunda modalidad es hacerse pasar por el banco propio (mandan de todas las entidades y as¨ª aumentan el caladero) y reclamar datos y claves bancarias "para su propia seguridad". La tercera es el llamado pharming, que consiste en infectar los ordenadores de las v¨ªctimas con un virus troyano, de forma que si el futuro timado introduce sus claves de la tarjeta de cr¨¦dito para una compra normal por la red, estos n¨²meros acaban en manos de los timadores.
Los 76 detenidos (45 de ellos espa?oles y el resto de 16 nacionalidades distintas, incluidas la armenia o la moldava) estafaban cantidades que iban desde los 400 a los 10.000 euros, hasta haber llegado a los tres millones. Las v¨ªctimas a¨²n se est¨¢n localizando en Espa?a, pero tambi¨¦n se ha solicitado la colaboraci¨®n de Europol e Interpol para localizar a timados por casi medio mundo. Los ordenadores incautados son ahora la clave.
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