El decreto del golf bloquea el uso de agua potable para el riego

Despu¨¦s de cuatro a?os de forcejeos entre varios departamentos de la Junta andaluza, el llamado decreto del golf ha visto por fin la luz. El Consejo de Gobierno aprob¨® ayer la norma que regula las condiciones en implantaci¨®n de los campos de golf, que el consejero de la Presidencia, Gaspar Zarr¨ªas, calific¨® de "vanguardista y pionera". La ¨²ltima de las pol¨¦micas del rosario de discrepancias que ha padecido este decreto -la posibilidad de que se pudieran regar con agua de abastecimiento urbano en casos excepcionales-, ha quedado finalmente suprimida. La Consejer¨ªa de Medio Ambiente manifest¨® su oposici¨®n a que se abriera cualquier rendija para al uso de agua potable, por peque?a que fuera, si bien los requisitos que se exig¨ªan en el anterior borrador hac¨ªan pr¨¢cticamente imposible que fuera autorizado.

La redacci¨®n de este art¨ªculo, que se refiere s¨®lo a los campos de inter¨¦s tur¨ªstico, menciona ahora ¨²nicamente que el plan hidrol¨®gico de la cuenca podr¨¢ autorizar si hiciera falta "otras fuentes" distintas de las del agua regenerada o depurada, que es el tipo de riego que se establece con car¨¢cter general, pero deja claro que "no se utilizar¨¢n caudales destinados al consumo humano para el riego de los campos de golf".

Zarr¨ªas subray¨® este extremo de modo m¨¢s gr¨¢fico y dijo tajantemente que no se utilizar¨¢ "ni una gota". La implantaci¨®n de un campo de golf deber¨¢ estar prevista expresamente en el Plan General de Ordenaci¨®n Urbana correspondiente y s¨®lo podr¨¢ llevarse a cabo en espacios con las debidas condiciones f¨ªsicas, ambientales, paisaj¨ªsticas y de suficiencia de infraestructuras y servicios.

Como norma general, quedan prohibidos los usos residenciales vinculados, si bien se establece la exepci¨®n de los campos de inter¨¦s tur¨ªstico, instalaciones a las que se exigen requisitos de calidad m¨¢s selectivos y en los que se permitir¨¢ construir viviendas con baja densidad. Estos campos deber¨¢n estar contemplados expresamente en planes de ordenaci¨®n subregional.

El consejero dijo ayer que en realidad el decreto es una "moratoria encubierta" que pretende evitar la construcci¨®n de urbanizaciones de viviendas con el pretexto del campo de golf. "Se trata de separar el grano de la paja y parar que se levanten un millar de viviendas porque a un ayuntamiento le venga bien, si tener en cuenta los servicios que requieren este n¨²cleo, dos veces mayor, por ejemplo que mi pueblo [Cazalillas, Ja¨¦n]".

El consejero explic¨® tambi¨¦n que la demora para aprobar el decreto ha sido tan extensa porque "hemos esperado a tener el pacto de la vivienda, el Plan de Ordenaci¨®n del Territorio de Andaluc¨ªa (POTA) y llegar a un consenso entre intereses muy distintos"