"Sigo pensando en m¨ª como jugador"
Bobby Charlton es miembro de la Fundaci¨®n Laureus, que da los Oscar del deporte, y observa el f¨²tbol con la pasi¨®n que le convirti¨® en icono de una tragedia.
Pregunta. Creci¨® usted cuando el Reino Unido sal¨ªa de la Segunda Guerra Mundial. Hab¨ªa pobreza, racionamiento...
Respuesta. Y eso me hizo apreciar la importancia de la ¨¦tica de trabajo. En el noreste de Inglaterra, de donde vengo, las minas eran uno de los pocos medios de empleo. Eso, o construir barcos. Si ten¨ªas mucha suerte, pero mucha suerte, pod¨ªas ser futbolista. Mi padre era minero. Y en las minas hay que trabajar muy duro, especialmente en aquellos d¨ªas. Ten¨ªa muy claro que si trabajaba duro, quiz¨¢s, obtendr¨ªa una recompensa. Yo ten¨ªa cuatro t¨ªos y los cuatro eran jugadores profesionales. Eso me introdujo en el juego desde que era un ni?o peque?o. Afortunadamente, encontr¨¦ que jugar al f¨²tbol era algo bastante f¨¢cil. Me dieron muy buenos consejos. Y as¨ª, a los quince a?os, fich¨¦ por el Manchester United.
"Me gusta la habilidad natural de Scholes y el cerebro de Rooney. Tienen mucho talento"
"La selecci¨®n vive una peque?a crisis. No se puede parar la llegada de extranjeros"
"Tras el accidente, me pas¨® poca cosa. Ves los que murieron... Eso es tener suerte"
"Busby nos ped¨ªa que le di¨¦ramos al p¨²blico algo emocionante. Era algo ¨²nico"
P. Su carrera ha sido descrita como milagrosa. ?Coincide?
R. S¨ª.
P. ?Por qu¨¦?
R. Porque cuando ocurri¨® el accidente de M¨²nich fui lanzado fuera del avi¨®n. Me pas¨® poca cosa. Una peque?a contusi¨®n, unos pocos ara?azos y eso fue todo. Cuando ves todos los chicos que murieron all¨ª... eso es tener suerte.
P. Habl¨® de la tragedia con los futbolistas del club.
R. El accidente es parte de nuestra historia. Alex Ferguson [el m¨¢nager]
le da mucha importancia a que cualquier jugador que venga aqu¨ª conozca bien la historia del club. Les habl¨¦ sobre c¨®mo fue progresar tras el accidente, de c¨®mo fue la introducci¨®n del profesionalismo y de c¨®mo en el Manchester United, si eras joven y lo suficientemente bueno, ten¨ªas una oportunidad. No siempre es el caso. Transmitirles eso fue uno de mis principales objetivos. Escucharon intensamente lo que les ten¨ªa que decir durante media hora y lo interiorizaron.
P. ?La existencia del club estuvo en peligro?
R. Absolutamente. Si esa temporada hubi¨¦ramos descendido... Hab¨ªa un gran sentimiento por el club, un gran duelo. Todo el mundo quer¨ªa ayudar. Todos los jugadores que al final del d¨ªa segu¨ªan vivos quisieron dar lo mejor de s¨ª mismos para asegurarse de que el club progresar¨ªa. El apoyo del p¨²blico fue incre¨ªble. Una pena para nuestros contrarios de ese tiempo: parec¨ªa que ten¨ªamos a todo el mundo detr¨¢s de nosotros. Todos quer¨ªan que gan¨¢ramos. Eso es algo muy dif¨ªcil: al final lo hicimos. No hubi¨¦ramos podido hacerlo sin el p¨²blico. Eso es un hecho.
P. Tras ganar la Copa de Europa, se abraz¨® en el campo a Sir Matt Busby, el entrenador que hab¨ªa amamantado al equipo desaparecido en el accidente.
R. No nos dijimos nada. Simplemente le abrac¨¦ y me asegur¨¦ de que no le empujaran demasiado, porque era un hombre viejo. Fue un gran hombre para el club y, obviamente, fue muy importante que acabara con el fantasma del viejo equipo ganando el t¨ªtulo. Estaba orgulloso.
P. Usted, sin embargo, no se uni¨® a la cena de celebraci¨®n.
R. Tras el partido me beb¨ª una cerveza. Para Inglaterra, aquel d¨ªa fue incre¨ªblemente h¨²medo. Sud¨¦ mucho. Cuando llegu¨¦ a mi habitaci¨®n, le dije a mi mujer: 'No creo que pueda ir a la fiesta. Cada vez que llego a la puerta me mareo'. Lo intent¨¦ tres veces. Fue una mezcla de deshidrataci¨®n y nervios. No me import¨® perderme la fiesta, aunque lo sent¨ª al d¨ªa siguiente, cuando me dijeron que estaban all¨ª mis viejos amigos
[los supervivientes de M¨²nich y las familias de los fallecidos]. Simplemente, no pude.
P. ?Qu¨¦ distingu¨ªa a Busby?
R. Su personalidad, su aura y el respeto que nos impon¨ªa su conocimiento del juego. Era una persona impresionante. No hablaba mucho de t¨¢cticas. Hablaba con nosotros individualmente. Siempre esperaba que nos expres¨¢ramos y que le di¨¦ramos al p¨²blico algo que no pudiera ver durante la semana. Algo emocionante. Por eso constantemente les daba jugadores j¨®venes y emocionantes. Eso, en aquel tiempo, era ¨²nico.
P. ?El f¨²tbol ofrece eso hoy?
R. Absolutamente. Ferguson lo ha conseguido. Cualquiera que venga a este club siente la responsabilidad de tener que intentarlo un poquito m¨¢s fuerte.
P. Parece que le cueste hablar del accidente.
R. S¨ª, pero alguien tiene que hacerlo. Yo estoy en el club y no me puedo negar. Es muy importante. La verdad es que no disfruto volando lo mismo que antes. Pero hay que volar. No se puede vivir sin eso.
P. ?Qu¨¦ perdi¨® el f¨²tbol con la muerte de Duncan Edwards?
R. Ten¨ªa un deseo incre¨ªble por el juego. Era un atleta grande, fuerte y sano. Delicado y m¨¢gico, capaz de dar pases de 50 y 70 metros con una pelota mucho m¨¢s pesada que las de ahora. Pod¨ªa jugar en cualquier posici¨®n: defensa, centro del campo y al ataque. Era magn¨ªfico en el aire. Y muy inteligente. El mejor con el que nunca jugu¨¦.
P. Es usted el m¨¢ximo goleador de su club y su selecci¨®n.
R. Yo no era delantero: jugaba en el ala, en el centro del campo, pero lo hice en buenos equipos, estando en forma y siendo capaz de correr bien. Pude durar m¨¢s que otros jugadores. Alguien conseguir¨¢ batir mis r¨¦cords alg¨²n d¨ªa y, mientras tanto, yo disfrutar¨¦ de ser el campe¨®n. No me golpeaban mucho. Nunca sent¨ª que me intentaran patear. Me enfadaba cuando ve¨ªa a gente tirarse o intentando sacar cosas del juego cuando no se lo merec¨ªan. Es algo que no me gusta ver. Hay quien piensa que eso est¨¢ pasado de moda. Estoy absolutamente en desacuerdo.
P. ?Cu¨¢les son los tres grandes ¨¦xitos de su carrera?
R. Ganar el Mundial, la Copa de Europa y jugar para Inglaterra cuando era un ni?o.
P. ?Son tambi¨¦n los tres grandes ¨¦xitos de su vida?
R. S¨ª. Pienso en estos tres recuerdos constantemente. Siempre disfrut¨¦ del juego. Sigo haci¨¦ndolo. Si alguien lanzara una pelota ahora mismo, jugar¨ªa. Sigo pensando en m¨ª como en un jugador: cualquiera que haya jugado prefiere ser futbolista antes que cualquier otra cosa.
P. No public¨® su biograf¨ªa hasta 2007.
R. Sent¨ª que escribirla era, m¨¢s que nada, el final.
P. ?Qu¨¦ destaca de su equipo?
R. La velocidad de Cristiano Ronaldo, el cerebro de Rooney, la habilidad natural de Scholes... Todos nuestros jugadores tienen un gran talento. Si no, no estar¨ªan aqu¨ª. Tenemos futbolistas maravillosos.
P. Cada dos por tres, los jugadores piden m¨¢s dinero.
R. Eso es el trabajo de los agentes. Mientras no manipulen al jugador, no tengo problemas. Es algo que hay que vigilar.
P. ?Tantos extranjeros en la Premier afectan a la selecci¨®n?
R. Absolutamente. ?No implica eso menos oportunidades para nuestros j¨®venes? En este momento vivimos una peque?a crisis, pero no se puede hacer nada: el mercado libre, el libre movimiento... No se pueden parar.
P. En el Arsenal ya no juegan ingleses.
R. No puedo hablar del Arsenal. Todo lo que dir¨¦ es que nosotros, en el Manchester United, no hacemos eso.
P. ?En qu¨¦ cambi¨® el f¨²tbol?
R. Est¨¢ mucho m¨¢s abierto. Antes hab¨ªa equipos contra los que casi pod¨ªas garantizar que ganar¨ªas. Esos d¨ªas han pasado. Es m¨¢s dif¨ªcil que antes. Nosotros aprendimos de Europa una visi¨®n distinta del juego, una aproximaci¨®n distinta a los entrenamientos y la forma f¨ªsica. Fue una gran aventura.
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