Francesc Catal¨¤-Roca, un legado para todos
Los hijos del fot¨®grafo ceden su fondo al COAC
"Cuando un artista muere, suelen iniciarse 30 a?os de barbarie. El taller de Gaud¨ª se quem¨®. Tras el fallecimiento de Bach se perdieron algunas de sus partituras. Nosotros hemos intentado reducir al m¨¢ximo ese periodo". Andreu Catal¨¤ Pedersen y su hermano Mart¨ª llevan varias d¨¦cadas consagrados a la conservaci¨®n y digitalizaci¨®n del archivo de su padre, el fot¨®grafo Francesc Catal¨¤-Roca (Valls, 1922-Barcelona, 1998), de cuya muerte se cumplir¨¢n 10 a?os el pr¨®ximo 5 de marzo. Las 180.000 im¨¢genes que componen el legado, entre ellas 8.000 dedicadas a la arquitectura, dan cuenta de lo tit¨¢nico del esfuerzo, superior a sus posibilidades. "?ramos conscientes de ser s¨®lo el primer eslab¨®n de la cadena", dice Mart¨ª. La voluntad de preservar el fondo y, en especial, permitir su consulta a todo aquel que est¨¦ interesado en ¨¦l llev¨® a los hermanos a cederlo al Colegio Oficial de Arquitectos de Catalu?a (COAC), que ha organizado una primera exposici¨®n para celebrar el acontecimiento.
Entre la vasta producci¨®n de Catal¨¤-Roca hay algunas im¨¢genes tan conocidas que se han convertido en verdaderos iconos. Excelso documentalista, su trabajo se inicia en 1948 -"sus primeros clientes fueron precisamente arquitectos", recuerda Mart¨ª- y no concluye hasta su muerte, dos a?os antes de cambiar de siglo, aunque en su interior ya llevaba a?os instalado en el nuevo milenio: "siempre dec¨ªa que era un fot¨®grafo del siglo XXI", explica Andreu. La obra de Catal¨¤-Roca es tan amplia que parte de ella permanece in¨¦dita. Y ni tan siquiera sus hijos la conocen a fondo. "Yo no recuerdo m¨¢s de 30.000 o 35.000 de sus fotograf¨ªas. Continuamente encontramos fotos nuevas o encuadres distintos a los de algunas ya conocidas", confiesa Mart¨ª. Y ello a pesar de la pulcritud con que Catal¨¤-Roca organizaba su producci¨®n. "Siempre dec¨ªa que el archivo es lo m¨¢s importante", rememora Andreu.
Desde el fallecimiento del progenitor, sus descendientes han recibido muchas propuestas para vender o traspasar el fondo. Pero hasta la del COAC, ninguna se ajustaba a sus exigencias, algunas por su falta de concreci¨®n, como la de depositarlo en Matar¨®, y otras porque supon¨ªan segregar el legado, a lo que se oponen tajantemente. "Tal como nos ense?¨® nuestro padre, anteponemos los criterios culturales a los mercantiles", se?ala Mart¨ª. Adem¨¢s, no todo el mundo estaba dispuesto a respetar las directrices expositivas que convirtieron a su padre en un pionero: im¨¢genes a sangre, normalmente en gran formato, sin marco ni cristal. "Dec¨ªa que el cristal distorsiona la imagen porque produce reflejos".
"Ver todo esto me produce cierta nostalgia", contin¨²a Andreu mientras pasea entre las im¨¢genes escogidas para la exposici¨®n, que permanecer¨¢ abierta hasta el 20 de marzo. La arquitectura y los retratos de creadores especialmente ligados al COAC, como Sert y Mir¨®, han primado en la selecci¨®n.
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