"Echo de menos que me hablen del amor de verdad"

La rivalidad Madrid-Barcelona llega hasta las escuelas de cine. Probablemente sea m¨¢s visto desde fuera que porque haya aut¨¦ntica competencia entre los alumnos. Por un lado, la ECAM madrile?a; por el otro, la ESCAC (Escola Superior de Cinema i Audiovisuals de Catalunya). En la alineaci¨®n barcelonesa, nombres de relumbr¨®n como Juan Antonio Bayona (y la mayor parte del equipo t¨¦cnico de El orfanato), ?lex Pastor -que tras ganar con su corto La ruta natural en Sundance, ya ha rodado en EE UU su primer largo, Carriers-, Guillem Morales (doble candidato al Goya con sendos cortos) o Roser Aguilar (Barcelona, 1971). Aguilar, debutante en la realizaci¨®n con Lo mejor de m¨ª, se llev¨® este verano en el festival suizo de Locarno -el m¨¢s potente en cine radical e innovador europeo- el premio de la cr¨ªtica independiente y el galard¨®n a la mejor actriz.

"La direcci¨®n es una profesi¨®n est¨²pidamente mitificada"

"En Barcelona sabemos que hacer cine es muy complicado"

Y todo gracias a un resquemor. O a una picaz¨®n que corroe a Aguilar. "Quer¨ªa cuestionar este amor idealizado, decimon¨®nico, que a¨²n se cree mucha gente. Veintea?eros que se van a vivir juntos, con un punto de 'seremos muy felices', y que luego se llevan una gran desilusi¨®n. Echo de menos como espectadora que me hablen del amor de verdad".

La protagonista de Lo mejor de m¨ª, Raquel, encarnada por Mari¨¢n ?lvarez, convence embobada a su nuevo novio para alquilar juntos un piso. Un trasplante de h¨ªgado, otra chica, en definitiva, la vida descruza los caminos de la pareja. Lo del h¨ªgado importa, porque en el proceso de p¨¦rdida de la inocencia, Raquel cede parte de su ¨®rgano a su chico. "En este universo rosa y simpl¨®n, el sacrificio por amor o amoroso est¨¢ bien visto. Y no se hace porque salga del coraz¨®n, sino por quedar bien con el resto de la sociedad y consigo mismo".

El siguiente paso es ?c¨®mo te lo montas para no morir de pena cuando ves que has fracasado, que no existen los Reyes Magos? "Ah¨ª est¨¢ el tema de Lo mejor de m¨ª, la superaci¨®n de la p¨¦rdida de la inocencia".

En este viaje al descreimiento, Aguilar ha contado con muchos compa?eros de la ESCAC. Por de pronto, Esc¨¢ndalo Films, la productora del largometraje, est¨¢ asociada a la ESCAC, y la pel¨ªcula forma parte de su Proyecto ?pera Prima, con el que incorporan a sus alumnos a la industria cinematogr¨¢fica. "Unimos nuestro destino para lo bueno y para lo malo. No ten¨ªamos dinero ni experiencia. S¨ª ilusi¨®n, ganas, energ¨ªa, frescura... Por parte de Esc¨¢ndalo me propusieron las condiciones del Proyecto ?pera Prima [que los jefes de los distintos equipos del filme sean ex alumnos y debutantes] y me pareci¨® genial. Aunque alguno cumpl¨ªa a medias las condiciones: el montador, Roger Vilaplana, no era debutante [empez¨® con El orfanato], pero s¨ª estudi¨® en la ESCAC". Eso s¨ª, en el proceso, Aguilar estuvo cinco a?os. "Para m¨ª, el reto era acompa?ar al proyecto completamente y no sacar conclusiones hasta finalizarlo. Cada etapa tiene requisitos y dificultades diferentes. Cinco a?os suenan a muchos a?os... pero para una pel¨ªcula tres o cuatro es normal. Tambi¨¦n cuenta que es una ¨®pera prima, que las cosas cuestan un poquito m¨¢s de arrancar, que la productora tambi¨¦n era novel...".

Aguilar, cansada tras un d¨ªa de promoci¨®n y medidora de sus palabras, prosigue. "Ten¨ªa claro que quer¨ªa intentar dirigir. A toda mi generaci¨®n nos cost¨® un poco. Una cosa es realizar cortos, o poseer aptitudes, y otra es el salto al largo. Es un oficio est¨²pidamente mitificado. Un director es como un guionista o un panadero: tiene la facilidad para contar cosas con im¨¢genes y ya est¨¢. A m¨ª me cost¨® reunir las fuerzas y la convicci¨®n".

?Y qu¨¦ tiene la ESCAC que no tenga la ECAM? "En la ESCAC hay muchas pr¨¢cticas. Te puedes creer un genio, pero en segundo o tercero has hecho tantas pr¨¢cticas y te has pegado tantas casta?as que sabes que debes trabajar mucho. Bayona, Morales y yo ¨ªbamos a la misma clase de direcci¨®n, ¨¦ramos 12. Ahora soy profesora de realizaci¨®n de pr¨¢cticas de primero, y de proyectos de cuarto. Es muy complicado entrar en la ESCAC, y los alumnos sabemos que hay que sufrir. Adem¨¢s, vivimos en la periferia del cine; no s¨¦ si en Madrid la gente se conf¨ªa m¨¢s, pero en Barcelona s¨ª sabemos que es m¨¢s complicado".