Homenaje a las mujeres de la dictadura
La Universidad de Granada recuerda el sufrimiento de mujeres en el franquismo
Las m¨¢s perjudicadas por la dictadura franquista fueron las mujeres. El poder, cuando pretende escoger un cuello sobre el que estrechar una soga suele optar por los m¨¢s d¨¦biles. De este modo, las mujeres sufrieron una doble represi¨®n durante el franquismo. Por sus ideas y por el hecho de ser mujeres.
La Universidad de Granada celebr¨® ayer un homenaje a las mujeres represaliadas durante la dictadura, en el que participaron personas con historias propias, capaces de hablar del dolor en primera persona sin caer en el odio, pese a haber convivido a lo largo de las ¨²ltimas d¨¦cadas con los responsables de que su vida se viera truncada.
"Todos los a?os deben ser el de la memoria hist¨®rica para que no olvidemos y podamos atajar en el futuro las dificultades", dijo Miguel G¨®mez Oliver, vicerrector de Extensi¨®n Universitaria y especialista de los movimientos sociales de oposici¨®n al franquismo. "Siempre se ha homenajeado a los hombres, pese a que las mujeres sufrieron doblemente. Cuando un padre de familia era fusilado, su mujer ten¨ªa que sufrir la p¨¦rdida y contemplar c¨®mo le era arrebatada por un tribunal una silla, una mesa y hasta su cama", explic¨® ayer durante el homenaje, que seg¨²n dijo se celebra "tarde" aunque sirva para "poner en su lugar" a una generaci¨®n de mujeres que contribuyeron a la libertad con su ejemplo.
En el auditorio, en torno a veinte represaliadas andaluzas, comenzaron a verse los primeros atisbos de emoci¨®n, una emoci¨®n que culmin¨® tras los discursos de la decana, Elena Mart¨ªn Vivaldi; C¨¢ndida Mart¨ªnez, candidata al Congreso; Mar¨ªa Jos¨¦ L¨®pez, consejera de Justicia; y Micaela Navarro, consejera de Igualdad.
Una a una las mujeres fueron llamadas para recibir una flor blanca como peque?o homenaje, tras leerse unas peque?as l¨ªneas biogr¨¢ficas que resum¨ªan su historia en pocas palabras. Entre las homenajeadas, Ana Mar¨ªa Moreno, de Almer¨ªa, que vio c¨®mo encarcelaban a su padre y c¨®mo la falange le arrebataba los muebles de su casa; o la jienense ?ngeles Morente, que sufri¨® la muerte de dos hermanos y el encarcelamiento de un tercero. Un d¨ªa, cuando se encontraba en la cola del presidio para entregar comida a su hermano, la desesperaci¨®n la llev¨® a arrebatar su pistola a un vigilante. R¨¢pidamente fue reducida y condenada a tres a?os de prisi¨®n por tratar de provocar una fuga. Ayer, aquella mujer casi sin fuerzas s¨®lo ten¨ªa palabras de agradecimiento y no parec¨ªa capaz de sostener ning¨²n arma. "Espero que no se repitan nunca aquellos a?os, no se sabe lo que es la libertad hasta que se pierde y eso es complicado de ense?¨¢rselo a los j¨®venes", explic¨®.
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