El TAS se inhibe y los equipos deciden correr la Par¨ªs-Niza
El conflicto entre ASO -organizador del Tour y la Par¨ªs-Niza- y la Uni¨®n Ciclista Internacional (UCI) es un avispero en el que ni siquiera el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) se atreve a hurgar. Por si acaso. A 48 horas de su comienzo, ni organizadores, ni equipos ni corredores pueden garantizar que se dispute la Par¨ªs-Niza, la primera carrera importante del a?o. El conflicto, nacido del enquistamiento de las posturas de la UCI y ASO respecto al ProTour, se ha convertido en una hidra que ha contaminado al resto de los agentes del ciclismo como se vio ayer.
Horas antes de que el TAS declinara su competencia para decidir sobre la demanda de varios equipos y el sindicato de corredores de que declarara "ilegal o abusiva" la amenaza de la UCI de sancionarlos por participar en la prueba, el presidente de la UCI, Pat McQuaid, hab¨ªa aumentado incluso sus amenazas. "Todos los equipos que corran la Par¨ªs-Niza quedar¨¢n expulsados de la UCI", dijo a Reuters. Antes, al igual que ASO, hab¨ªa decidido no aceptar el arbitraje del TAS. Semanas antes hab¨ªa calificado de "salvaje" la carrera, ya que para no cumplir con las obligaciones impuestas por la UCI -entre ellas, la de aceptar la participaci¨®n del Astana, el equipo de Alberto Contador, el ganador de 2007, excluido tambi¨¦n del Tour- hab¨ªa buscado amparo legal en los reglamentos de la federaci¨®n francesa ¨²nicamente. Adem¨¢s, McQuaid anunci¨® que abrir¨ªa un expediente por falta grave a la federaci¨®n francesa, a su presidente y a Eric Boyer, manager del Cofidis y presidente de la asociaci¨®n internacional de equipos, que puso toda su influencia del lado de ASO.
La mayor¨ªa de los equipos mantuvo su postura de participar en la prueba tras una acalorada asamblea. Gan¨® la votaci¨®n de participar por 15 votos a favor y 8 abstenciones, un dato que se?ala la divisi¨®n entre ellos.
Una divisi¨®n similar se da entre los corredores, cuyo sindicato internacional a¨²n no hab¨ªa decidido qu¨¦ consejo dar a sus afiliados. En las ¨²ltimas semanas, su presidente, C¨¦dric Vasseur, ha enviado cartas a Boyer solicitando infructuosamente que los equipos se hagan cargo de la sanci¨®n, 6.000 euros, con que McQuaid ha amenazado a los ciclistas que corran la Par¨ªs-Niza y que garanticen sus sueldos durante los seis meses de sanci¨®n con que tambi¨¦n les amenaza la UCI. Seg¨²n fuentes del sindicato, Boyer ni se dign¨® a comunicar las peticiones a los equipos.
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