Esas cosas que no interesan
La campa?a ha eludido temas como corrupci¨®n, sanidad y justicia
Sin duda, los espa?oles est¨¢n preocupados por la subida del precio de los alimentos y los carburantes. Tambi¨¦n por la pol¨ªtica antiterrorista. Quiz¨¢ algo menos por las cuestiones de inmigraci¨®n. Pero la campa?a electoral deja la sensaci¨®n de que en Espa?a se ha acabado la corrupci¨®n urban¨ªstica, que hasta hace seis meses era un c¨¢ncer que devoraba un ayuntamiento tras otro. Parece que no hay ning¨²n problema especial en la Sanidad, aparte de querer que funcione bien, y para eso no hace falta ser diputado. Entre otras cosas, ?se acuerda usted de que el Consejo General del Poder Judicial y un tercio del Tribunal Constitucional est¨¢n en funciones? El PP ha boicoteado la renovaci¨®n de cargos en ambos ¨®rganos. ?stos son algunos de esos temas para lo cuales, proponer soluciones, no parece dar votos:
CORRUPCI?N URBAN?STICA La legislatura 'Malaya'
En la legislatura en la que, por primera vez en democracia, se ha disuelto un ayuntamiento por decreto, en la que la corrupci¨®n urban¨ªstica ha hecho saltar las costuras del Estado de derecho, los esc¨¢ndalos urban¨ªsticos apenas han salido en campa?a. S¨®lo Llamazares ha hablado de corrupci¨®n en Marbella y Murcia, donde ha propuesto un c¨®digo ¨¦tico entre partidos para responder a estos casos.
La primera explicaci¨®n es que la corrupci¨®n ya marc¨® las elecciones municipales y auton¨®micas de hace un a?o. Y es ah¨ª, en ayuntamientos y autonom¨ªas, las que recalifican el suelo, donde est¨¢n los imputados, condenados, inhabilitados, recalificados, las escuchas, los sobornos... La segunda raz¨®n, probablemente la m¨¢s importante, es que el pinchazo de la burbuja inmobiliaria ha parado los planes m¨¢s enloquecidos y las nuevas recalificaciones de suelo. Un ejemplo de que la corrupci¨®n ya no interesa: en precampa?a, la regi¨®n de Murcia ha vivido dos casos con la Guardia Civil entrando en los ayuntamientos de Totana (PP) y Los Alc¨¢zares (PSOE). Pues se habla m¨¢s del trasvase del Ebro.
REFORMAS CONSTITUCIONALES Instituciones empantanadas
No hay que ser un lince del m¨¢rketing para darse cuenta de que el tema no vende. Pero no se entiende que, despu¨¦s de arrancar la legislatura proponiendo cuatro reformas constitucionales, Zapatero ni las mencione ahora en campa?a electoral. Hasta hace nada, la reforma del Senado, por ejemplo, era fundamental para el avance de Espa?a. La ausencia de mayor¨ªas claras y el enfrentamiento cada vez m¨¢s enconado de los dos grandes partidos han bloqueado por completo cualquier planteamiento de reformar la Constituci¨®n, incluso en aquello en lo que estaba todo el mundo de acuerdo, como en suprimir la primac¨ªa del var¨®n en la sucesi¨®n al trono.
Aparte, alguna propuesta habr¨¢ que hacer cuando el Consejo General del Poder Judicial est¨¢ en funciones desde hace a?o y medio. El PP se ha negado a sentarse con los dem¨¢s partidos en el Congreso para pactar los nuevos nombres. Lo mismo ocurre con cuatro magistrados del Tribunal Constitucional, que el Senado deb¨ªa nombrar en diciembre. El boicot del PP lo impidi¨®. Ahora es el propio PP el que propone cambiar por ley aspectos de la elecci¨®n o el mandato de estos dos ¨®rganos, bas¨¢ndose en sus propios argumentos durante la legislatura.
POL?TICA EXTERIOR Kosovo, a las puertas
La pol¨ªtica exterior ha brillado por su ausencia en la campa?a general, a no ser que haya acudido usted a un mitin de Zapatero, que siempre recuerda a su p¨²blico que ¨¦l sac¨® las tropas espa?olas de la guerra ilegal de Irak sin importarle incomodar a Estados Unidos. En su primer debate televisado, los dos principales candidatos s¨®lo la mencionaron de pasada. El dirigente socialista record¨® la foto de las Azores (de Aznar con Bush y Blair), mientras que Rajoy contrapuso su supuesta sinton¨ªa con Sarkozy con la del presidente con Ch¨¢vez y Castro. En el segundo, se enredaron sobre Irak, y Rajoy trat¨® de compararlo con las misiones de L¨ªbano y Afganist¨¢n. Poco m¨¢s.
Sin embargo, la independencia unilateral de Kosovo ha puesto la diplomacia de actualidad. Los dos grandes partidos est¨¢n de acuerdo en no reconocer al nuevo pa¨ªs y tambi¨¦n en no retirar las tropas espa?olas comprometidas con la OTAN. El debate, con sordina, se ha limitado a la participaci¨®n en la futura misi¨®n civil de la UE. Y es que el margen de discrepancia no es tan amplio como se pretende: sea cual sea el resultado electoral, una de las primeras leyes que aprobar¨¢ el nuevo Gobierno ser¨¢ el tratado de Lisboa, una versi¨®n devaluada de la Constituci¨®n Europea que los espa?oles aprobaron en refer¨¦ndum en febrero de 2005.
SANIDAD La bronca de la financiaci¨®n
El principal conflicto en el ¨¢mbito sanitario de la legislatura que acaba lo trataron los responsables de Econom¨ªa: fue la mal llamada financiaci¨®n sanitaria, un debate en el que tuvo que intervenir el propio presidente del Gobierno y que se sald¨®, temporalmente, con la inyecci¨®n de 8.000 millones extra a las comunidades. Pero con ello no se acabaron las quejas de los consejeros de Sanidad -sobre todo los del PP-. El tema saltar¨¢ de nuevo a la palestra en cuanto pasen las elecciones. El problema est¨¢ en que el modelo de financiaci¨®n auton¨®mica por parte de la Administraci¨®n central no es finalista: no se da un dinero espec¨ªficamente para gastarse en Sanidad. Es decir, que lo que finalmente se destina a Sanidad depende de las prioridades de cada autonom¨ªa. La financiaci¨®n ha llevado al boicoteo de varias reuniones entre el ministerio y las comunidades. En campa?a no se ha mencionado.
El programa del PP habla de "revisar el sistema de financiaci¨®n de las comunidades" y el PSOE de "abordar la financiaci¨®n auton¨®mica y municipal e impulsar f¨®rmulas nuevas de cooperaci¨®n". La falta de financiaci¨®n explica, seg¨²n los responsables pol¨ªticos, asuntos como la incapacidad para reducir las listas de espera o el colapso peri¨®dico de las urgencias. No est¨¢, sin embargo, detr¨¢s del ¨²ltimo esc¨¢ndalo sanitario: la falta de atenci¨®n p¨²blica a las mujeres que abortan y la persecuci¨®n en algunas comunidades a centros de interrupci¨®n del embarazo. Sanidad ha prometido un decreto al respecto (ya hay uno), y Vicepresidencia ha pedido un informe a la Agencia de Protecci¨®n de Datos.
EL MODELO DE EDUCACI?N Otro cambio de arriba abajo
En Educaci¨®n, los l¨ªderes pol¨ªticos se han limitado a hablar de los malos resultados del Informe Pisa, aunque no de lo que van a hacer para remediarlo, aparte de vagas referencias al "esfuerzo" y al "respeto". Excepto la llamada Constituci¨®n de la educaci¨®n (la Ley Org¨¢nica del Derecho a la Educaci¨®n) se han derogado todas las leyes educativas y se han aprobado dos nuevas, con la repercusi¨®n que esto tiene para 8,5 millones de alumnos y 730.000 profesores.
El Gobierno prometi¨® ya en la pasada campa?a una carrera con incentivos para motivar a los profesores, de lo que tampoco se ha dicho nada. Y este problema est¨¢ ligado con la necesidad de medidas que apoyen a los centros para intentar bajar del 30% de fracaso escolar. De la Universidad apenas han hablado. Zapatero mencion¨® un pacto sobre la financiaci¨®n universitaria, promesa retomada del programa anterior, pero ninguno ha dicho nada de la reforma de todas las carreras que afectar¨¢ en la pr¨®xima legislatura a los estudiantes y profesores. Este tema suscit¨® sonadas quejas cuando, por ejemplo, se plante¨® quitar el t¨ªtulo de Historia del Arte.
Con informaci¨®n de Rafael M¨¦ndez, Miguel Gonz¨¢lez, Emilio de Benito, Susana P¨¦rez de Pablos y Pablo Xim¨¦nez de Sandoval
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