La fiscal afirma que la principal acusada del 'caso Permanyer' "era capaz de todo"

La fiscal no escatim¨® ayer adjetivos para pedir al jurado un veredicto de culpabilidad para Carmen Badia, la principal acusada del crimen de la psic¨®loga Anna Permanyer. "Es astuta, manipuladora; con sus artima?as es capaz de lograr sus maquiav¨¦licos prop¨®sitos". Y prosigui¨® con met¨¢foras: "Tiene una gran codicia, utiliza a las personas como peones de ajedrez. Los dem¨¢s son una orquesta que tocan a sus intereses. Por dinero es capaz de todo".

En otro momento la fiscal desgran¨® las 15 pruebas que, en su opini¨®n, incriminan a Badia, aun admitiendo que el cad¨¢ver nunca se encontr¨® y que no hay testigos directos del crimen. "No hemos visto caer la lluvia, pero sabemos que ha llovido", dijo para justificar la ausencia.

La principal prueba es el contrato de arras que, seg¨²n acusaci¨®n p¨²blica, Badia hizo firmar a Permanyer para simular la venta de una lujosa vivienda en la avenida Diagonal de Barcelona y que se redact¨® con la colaboraci¨®n de la tambi¨¦n acusada Anabel Toyas. "Ese contrato ten¨ªa una finalidad diab¨®lica y lo hicieron de forma clandestina", expuso la fiscal a las siete mujeres y los dos hombres que forman el jurado. "Y que no les despisten la defensas con sus argumentos, porque Badia siempre tuvo como objetivo enmara?ar, confundir, dificultar la labor de la polic¨ªa".

Por eso envi¨® an¨®nimos cuando Permanyer desapareci¨® en septiembre de 2004 y por eso provoc¨® un incendio en la casa en cuesti¨®n cuando apareci¨® el cad¨¢ver, seg¨²n la tesis de la fiscal. Y eso explica que ya haya sido condenada por simulaci¨®n de delito, apostill¨®.

Con m¨¢s brevedad, pero con igual contundencia, la fiscal¨ªa pidi¨® una condena para Joan Sesplugues, de 81 a?os. "Que no les mueva la compasi¨®n", dijo la fiscal mirando al jurado. "?l ha llegado a la vejez, Permanyer no podr¨¢", a?adi¨®, antes de recordar que en el cad¨¢ver fue encontrado un cabello del hombre. Sobre Toyas, la fiscal fue a¨²n menos incisiva y reconoci¨® que "est¨¢ arrepentida de lo que hizo", aunque tampoco tard¨® en zanjar cualquier duda advirtiendo al jurado: "Son personas que no se pueden salvar porque no tienen escr¨²pulos". Sobre ellos pesa una petici¨®n de entre 25 y 30 a?os de c¨¢rcel.

Las defensas creen que no existen pruebas contra sus clientes y los acusados hicieron uso de su ¨²ltimo turno de palabra para proclamar su inocencia, incluso entre sollozos.