El 70% de los parados por la crisis de la construcci¨®n son inmigrantes

La crisis de las construcci¨®n afecta especialmente a los extranjeros. El consejero de Inmigraci¨®n, Rafael Blasco, asegur¨® ayer que el 70% de los nuevos parados que ha dejado en la calle este sector son inmigrantes. Y los efectos de la crisis tambi¨¦n llegan, por efecto domin¨®, hasta otros sectores.

En plena campa?a puede haber 7.000 personas en Callosa recogiendo n¨ªspero

La crisis del ladrillo justifica la bajada en la contrataci¨®n de extranjeros

Por ejemplo, el n¨²mero de extranjeros contratados para trabajar en la campa?a del n¨ªspero en La Marina Baixa ser¨¢ inferior al de 2007. El desarrollo de la construcci¨®n en los ¨²ltimos a?os y la crisis actual est¨¢ afectando al sector agr¨ªcola del que depende Callosa d'En Sarri¨¤, principal productor valenciano de n¨ªspero, que concentra el 80% de la producci¨®n en La Marina Baixa, con 16 millones de kilos en el ¨²ltimo a?o. La campa?a est¨¢ a punto de empezar y abarca abril y mayo.

As¨ª, la Uni¨® de Llauradors ha gestionado por cuarto a?o consecutivo la contrataci¨®n de personas en origen para los trabajos, principalmente de Polonia y Eslovaquia. En los pr¨®ximos d¨ªas llegar¨¢n 300 trabajadores a la zona, una cifra un 16% inferior a la registrada en 2007, que se justifica por el paro en sectores como la construcci¨®n, seg¨²n Alberto Trav¨¦, responsable de La Uni¨® en la provincia de Alicante.

La entrada de los pa¨ªses del Este a la Europa comunitaria ha facilitado las gestiones para su contrataci¨®n, y ya no es necesario que los trabajadores sean contratados en origen y est¨¦n obligados a volver. "Seguimos escrupulosamente lo que marca el convenio. Ellos se pagan la mitad del viaje, disponen de un contrato, alta en la seguridad social, n¨®mina...", explica Trav¨¦.

La Uni¨® se ha esforzado en los ¨²ltimos a?os en lograr que los trabajadores concatenen varias campa?as agr¨ªcolas para rentabilizar los desplazamientos. De esta forma, est¨¢ previsto que una tercera parte de los que lleguen para trabajar en el n¨ªspero pasen en junio a realizar las tareas previas a la recolecci¨®n de la uva, que alcanza su plenitud en agosto y septiembre.

"En plena campa?a puede haber 7.000 personas trabajando en el n¨ªspero, de una poblaci¨®n con unas 6.000 personas", explica Esteve Soler, responsable de producci¨®n de Ruchey, la Cooperativa Agr¨ªcola de Callosa d'En Sarri¨¤. El volumen de negocio supera solo en Callosa los 24 millones de euros en cada campa?a. Las perspectivas de producci¨®n de este a?o son similares a las de 2007, con 16 millones de kilogramos, cifra alejada de la cifra r¨¦cord de 22 millones que se alcanzaron en el a?o 2002. Entonces empez¨® el boom inmobiliario y algunos productores de la comarca asociados a Ruchey abandonaron sus parcelas encandilados por el pujante negocio del ladrillo.

En esta temporada los agricultores de Callosa ven c¨®mo por un lado se abarata la mano de obra gracias a la crisis de la construcci¨®n, mientras dudan entre continuar el negocio o asumir el riesgo de subirse al carro del turismo o la construcci¨®n como su vecino Benidorm.

Mientras tanto, Blasco firm¨® ayer un acuerdo con Arturo Virosque, presidente del Consejo de C¨¢maras de la Comunidad Valenciana, para fomentar la formaci¨®n de 1.000 inmigrantes en actividades m¨¢s demandadas, como la hosteler¨ªa. Con una inversi¨®n de 85.100 euros, las c¨¢maras de Castell¨®n, Valencia y Alicante realizar¨¢n 66 cursos agrupados en dos ejes, el fomento del autoempleo y la manipulaci¨®n de alimentos. El objetivo es "propiciar la formaci¨®n hacia estos sectores de la poblaci¨®n que tienen m¨¢s dif¨ªcil la readaptaci¨®n a otros sectores econ¨®micos porque normalmente coinciden con personas que tienen un nivel formativo inferior", explic¨® el consejero.