Financiaci¨®n auton¨®mica. M¨¢s ruido que nueces

Tras la aprobaci¨®n de los estatutos catal¨¢n y andaluz, entre otros, y ante la inminencia de las elecciones, el Gobierno decidi¨® posponer la negociaci¨®n del nuevo sistema de financiaci¨®n auton¨®mica hasta despu¨¦s de las mismas. Apenas un par de semanas tras las elecciones esta cuesti¨®n tan t¨¦cnica vuelve a la palestra y con ello la necesidad de aclarar algunas cuestiones que a continuaci¨®n se plantean:

- ?C¨®mo se financian las Comunidades Aut¨®nomas? Se aplican dos sistemas, el foral en Navarra y Pais Vasco, y el general en el resto. En el primero son las Diputaciones las que recaudan los Tributos y pagan un cupo o aportaci¨®n al Estado. En el general, es el Estado el que recauda casi todos los impuestos y transfiere recursos a las Comunidades Aut¨®nomas.

- ?Hay diferencias de financiaci¨®n? Las comunidades de r¨¦gimen foral obtienen una financiaci¨®n per c¨¢pita muy superior a las del r¨¦gimen general y eso favorece el sentimiento de discriminaci¨®n en comunidades, como Catalu?a, que aspiran a conseguir un sistema similar al foral para as¨ª obtener m¨¢s ingresos.

- ?Consigui¨® Catalu?a ese sistema de cupo con el nuevo Estatuto? El Estatuto remitido por el Parlament inclu¨ªa un sistema casi id¨¦ntico al foral, pero esa propuesta se elimin¨® con las modificaciones introducidas en el Congreso, con lo que el sistema para Catalu?a sigue siendo el general.

- ?Tienen algo que ver las balanzas fiscales con la financiaci¨®n auton¨®mica? La pretensi¨®n de la propuesta de Catalu?a era que la Generalitat recaudase todos los tributos y despu¨¦s pagase un cupo al Estado en proporci¨®n al saldo de la balanza fiscal, apareciendo as¨ª una relaci¨®n entre la financiaci¨®n y las balanzas. Ese sistema no se acept¨® y se reform¨® la propuesta de Estatuto.

- ?Por qu¨¦ piden entonces los partidos catalanes la publicaci¨®n de las balanzas fiscales? El BBVA publica los c¨¢lculos que realizan Barber¨¢n y Uriel, pero al no tener car¨¢cter oficial no pueden tomarse como soporte de ninguna acci¨®n de reclamaci¨®n. Para que la Generalitat pueda reclamar necesita que el Gobierno las publique, d¨¢ndoles as¨ª car¨¢cter oficial. Para el catalanismo es un paso indispensable cara el futuro aunque no tenga efectos a corto plazo.

- ?Cu¨¢l es la postura de Andaluc¨ªa sobre las balanzas? La Junta niega no s¨®lo la relaci¨®n entre balanzas y financiaci¨®n sino tambi¨¦n la validez del c¨¢lculo porque no existe consenso entre los especialistas sobre la f¨®rmula para calcularlas, adem¨¢s est¨¢ en contra de la manipulaci¨®n que se hace de su significado en Catalu?a. Esta postura es compartida por el Ministerio de Econom¨ªa y Hacienda y por la mayor¨ªa de las Comunidades.

- ?Hay otras discrepancias en materia de financiaci¨®n? Fundamentalmente dos: la bilateralidad y el concepto de solidaridad. Por el primero, Catalu?a aspira a una negociaci¨®n Gobierno-Generalitat, como ocurre en el caso de las forales, para as¨ª disponer de un sistema propio pactado y sin interferencias. En cuanto a lo segundo Catalu?a aspira a que el concepto de solidaridad se extienda m¨¢s all¨¢ del Fondo de Compensaci¨®n Interterritorial.

- ?Es factible la bilateralidad? En ese aspecto tambi¨¦n se modific¨® el Estatuto catal¨¢n, haciendo perder peso a la bilateralidad. Adem¨¢s, el sistema de financiaci¨®n est¨¢ regulado por una ley org¨¢nica y una ordinaria, por lo que la bilateralidad es inviable al ser necesaria la participaci¨®n de las Cortes para modificar esas leyes. En todo caso, al ser necesario el acuerdo de las Comisiones Mixtas, siempre existe un componente de bilateralidad, aunque muy reducido.

- ?Por qu¨¦ es un problema el concepto de solidaridad? Desde el catalanismo se hace el discurso de que Catalu?a paga los servicios que se prestan en otras comunidades y no se les reconoce, mientras que Comunidades como Andaluc¨ªa consideran que los servicios que prestan las comunidades se corresponden con derechos de los ciudadanos que son previos a las propias comunidades y, por tanto, que no son fruto de la solidaridad sino del principio de igualdad.

- ?Tiene implicaciones el concepto de solidaridad en la financiaci¨®n? En el sistema actual todas las competencias de gasto se financian con tributos cedidos y cuando no es suficiente se obtienen recursos por el Fondo de Suficiencia, que garantiza que las Comunidades dispongan de los recursos necesarios para todas las competencias. Si se aceptara el concepto de solidaridad propuesto desde Catalu?a el fondo de suficiencia pasar¨ªa a ser asignaci¨®n de nivelaci¨®n y no se garantizar¨ªa la financiaci¨®n para todas las competencias sino s¨®lo para sanidad, educaci¨®n y otros servicios sociales esenciales.

- ?Existe alg¨²n otro efecto de ese concepto de solidaridad? De ampliarse el concepto el cupo vasco y la aportaci¨®n navarra al Estado tendr¨ªan que aumentar, ya que tienen obligaci¨®n de contribuir a la solidaridad. Ahora s¨®lo lo hacen con la contribuci¨®n al Fondo de Compensaci¨®n Interterritorial que hoy por hoy es el ¨²nico instrumento financiero de solidaridad.

- ?Qu¨¦ papel juega Andaluc¨ªa en el proceso? En un sistema multilateral Andaluc¨ªa es el contrapeso a Catalu?a. Si un sistema es bueno para Catalu?a y Andaluc¨ªa dif¨ªcilmente ser¨¢ malo para el resto. Si un sistema no es aceptable para alguna de las dos tiene escasas posibilidades de aplicaci¨®n. Todos, incluido el Gobierno, son conscientes de esta circunstancia.

- ?C¨®mo va a actuar la Junta de Andaluc¨ªa? Ya en abril de 2006 el Consejero de Econom¨ªa, Gri?an, remiti¨® al Ministerio la propuesta andaluza de reforma del sistema. Nada indica que haya cambiado la posici¨®n de la Junta por lo que se lo m¨¢s seguro es que se mantenga la propuesta.

- ?En qu¨¦ consiste la propuesta andaluza? La propuesta pone el ¨¦nfasis en la igualdad, es coherente con el Estatuto Andaluz, y supone un retoque sobre el sistema actual, fundamentalmente en lo relativo a la definici¨®n de las necesidades de gasto y la evoluci¨®n del sistema. La perspectiva es muy similar a la del Ministerio de Econom¨ªa y Hacienda.

- ?C¨®mo terminar¨¢ la negociaci¨®n? Lo m¨¢s normal es que se alcance un acuerdo multilateral similar al actual, que incorpore las variables de reparto de los nuevos Estatutos, y con el que est¨¦n conformes andaluces y catalanes. Adem¨¢s el Estado inyectar¨¢ fondos para que todos ganen algo. Eso s¨ª, mientras llega ese acuerdo seguramente tendremos mucho ruido, aunque al final lo previsible es que haya pocas nueces.

Luis ?ngel Hierro es ex Diputado y Profesor de Econom¨ªa de la Universidad de Sevilla.