Fuga de nueve reos islamistas de una c¨¢rcel de Marruecos

Con sus murallas, Kenitra ten¨ªa la reputaci¨®n de ser la c¨¢rcel m¨¢s segura de Marruecos -no se hab¨ªa producido ninguna evasi¨®n desde 1955-, pero dos recientes fugas han dado al traste con su fama.

Nueve presos islamistas, condenados en el marco de los juicios celebrados tras los atentados de mayo de 2003, se fugaron ayer del penal de Kenitra (a 40 kil¨®metros al norte de Rabat), seg¨²n inform¨® un comunicado del Ministerio de Justicia. Las explosiones de Casablanca causaron 45 muertos -entre ellos 12 kamikazes- y un centenar de heridos.

Entre los evadidos figuran dos condenados a muerte y siete a cadena perpetua, pero no est¨¢ el ex im¨¢n de Burgos, Bouchaib Maghder, casado con una espa?ola y con tres hijos de la misma nacionalidad, seg¨²n indic¨® Abderrahim Mouhtad, presidente de Ennassir, una asociaci¨®n de ayuda a los presos islamistas.

Para fugarse excavaron un t¨²nel desde las dos celdas contiguas que compart¨ªan hasta el exterior del recinto amurallado. La evasi¨®n se produjo de noche y s¨®lo ayer a mediod¨ªa la Gendarmer¨ªa erigi¨® controles para tratar de atraparlos.

En sus celdas dejaron una carta, seg¨²n revel¨® Mouhtad, en la que "denuncian la injusticia que padec¨ªan". Los dem¨¢s reos islamistas, unos 900 en todo el pa¨ªs, efectuaron precisamente ayer una huelga de hambre de un d¨ªa en protesta por las condiciones de su encarcelamiento.

Recursos agotados

"Hemos intentado todos los recursos legales y golpeado todas las puertas, pero ha sido en vano", aseguran los reos fugados en la misiva.

"S¨®lo nos quedaba esta iniciativa para recuperar la libertad", prosiguen. "No haremos da?o a nadie, pero estamos felices de recobrar nuestra querida libertad". "Asumimos nuestros actos y no hay que buscar complicidades entre los dem¨¢s prisioneros ni en el seno de la administraci¨®n penitenciaria".

Esta ¨²ltima ya pag¨® un alto precio en enero, un mes despu¨¦s de la evasi¨®n de Mohamed Ouazzani, un bar¨®n de la droga que posee la nacionalidad espa?ola. Los guardianes de Kenitra no comunicaron la fuga, de la que el Ministerio de Justicia se enter¨® gracias a una denuncia an¨®nima.

Ocho funcionarios de prisiones fueron condenados por complicidad a penas de entre dos meses y dos a?os.