La Universidad de Barcelona proyecta crecer en el pol¨ªgono de la Zona Franca
50 hect¨¢reas que ocupaba Seat imitar¨¢n la reconversi¨®n del 22@
La Universidad de Barcelona (UB) est¨¢ elaborando una propuesta para crecer en el pol¨ªgono industrial de la Zona Franca. La idea germinal se plasm¨® en un convenio suscrito entre la UB y el Consorcio de la Zona Franca y se concretar¨¢ pr¨®ximamente con la presentaci¨®n de un plan director.
La UB quiere hacerse mayor en parte de las 50 hect¨¢reas que ha dejado de ocupar Seat, que sigue conservando otras 30 para naves de almacenes. La inmensa pastilla de 500.000 metros cuadrados formaba parte del territorio que Seat ten¨ªa en concesi¨®n hasta 2050. El consorcio los ha recuperado tras el pago de 140 millones de euros a la empresa automovil¨ªstica. Ahora se plantea el futuro.
El proyecto supone crear un eje de investigaci¨®n en torno a la salud
Este futuro parte de varias premisas. Una, el pol¨ªgono est¨¢ llamado a la reconversi¨®n casi forzosa porque la actividad industrial se est¨¢ desplazando de los n¨²cleos urbanos. Dos, el territorio del pol¨ªgono -el conjunto es de 600 hect¨¢reas- est¨¢ literalmente enganchado a las ciudades de Barcelona -con un nuevo barrio como la Marina de la Zona Franca con 10.000 viviendas en perspectiva en los pr¨®ximos a?os- y a L'Hospitalet con una potente transformaci¨®n en marcha y la Fira 2, a caballo de las dos ciudades. Y, tres, la necesidad de fijar el objetivo en sectores de actividad econ¨®mica ligada a la tecnolog¨ªa y al conocimiento. Ese diagn¨®stico es compartido tanto por el Ayuntamiento de Barcelona como por el propio consorcio.
Ese tr¨¢nsito hacia la Zona Franca del futuro se hace, en parte, mirando o siguiendo la pauta del 22@, otrora zona industrial de Barcelona. Para ello, las administraciones est¨¢n buscando, de nuevo, la alianza con las universidades y las empresas. Si en el 22@ esa alianza se trab¨® de forma especial con la Pompeu Fabra, que este curso se instalar¨¢ en Ca l'Arany¨®, en los terrenos de la antigua Seat de la Zona Franca es la Universidad de Barcelona la que puede ser uno de los motores de la transformaci¨®n. Fuentes de la UB explicaron que se est¨¢ trabajando en dos l¨ªneas diferentes. Una de ellas es ampliar y desarrollar el Biopol y el parque cient¨ªfico del campus de Pedralbes, formado por las facultades de Farmacia, Biolog¨ªa, F¨ªsica y Qu¨ªmica. El Biopol lo conforman actualmente la facultad de Medicina de Bellvitge, el hospital Duran i Reinals y el Instituto de Investigaci¨®n Biom¨¦dica de Bellvitge (Idibell), a los que habr¨ªa que a?adir la escuela de Enfermer¨ªa, tambi¨¦n en el hospital de Bellvitge. "Son centros que trabajan con empresas y grupos de investigaci¨®n que necesitan de m¨¢s espacio. El terreno de la Seat est¨¢, adem¨¢s, a un paso de las actuales instalaciones -las separa la Gran Via- por lo que esa expansi¨®n ser¨ªa natural", explicaron fuentes de la UB.
Las mismas fuentes precisaron que la otra l¨ªnea en la que se trabaja es en la creaci¨®n de un parque tecnol¨®gico de las artes creativas creando espacios para televisiones, teatro y cine. En este cap¨ªtulo el Consorcio de la Zona Franca busca la alianza con Mediapro. La UB no quiere, de momento, hablar con m¨¢s concreci¨®n respecto a calendarios, espacios e inversiones para afrontar esos proyectos.
La tercera l¨ªnea de reconversi¨®n est¨¢ relacionada con Mercabarna y con los planes de impulsar un parque cient¨ªfico y tecnol¨®gico agroalimentario que facilite la instalaci¨®n de empresas innovadoras del sector.
A esos tres vectores, responsables del ¨¢rea econ¨®mica del Consistorio barcelon¨¦s, a?aden un cuarto: el desarrollo de tecnolog¨ªa aeron¨¢utica y espacios f¨ªsicos para esa industria, un sector al que la capital catalana siempre ha ambicionado pero que, por ahora, se muestra esquivo en favor de Madrid.
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