Ataque masivo

El hombre que abandona las instalaciones de Valdebebas saltando por la ventana del fondo del vestidor, a toda velocidad, es Robinho. Sigiloso, el jugador brasile?o da un rodeo interior y alcanza el aparcamiento escurri¨¦ndose por la claraboya m¨¢s pr¨®xima a su Audi A-8. Repite la operaci¨®n todos los d¨ªas desde hace un mes. Como un ladr¨®n o como alguien que intenta ocultar su orgullo herido, o su rencor, evitando la puerta.

En Mallorca, en la ¨²ltima jornada, el brasile?o permaneci¨® en el banquillo del Madrid durante todo el partido. Fue la primera vez en esta temporada que se qued¨® sin jugar por decisi¨®n t¨¦cnica y, de alg¨²n modo, culmin¨® un mes de apartamiento. Ayer, Schuster avis¨® de que devolver¨¢ a Robinho a la titularidad en el encuentro de esta tarde con el Murcia. "Robinho se ha recuperado f¨ªsica y an¨ªmicamente", aleg¨® el entrenador para justificar un cambio de planes. Apunta a un ataque masivo. Ser¨¢ la primera vez en dos temporadas que el Madrid acumula m¨¢s futbolistas de ataque en una alineaci¨®n titular.

"Con los mejores pasadores, jugaremos mejor", afirma un colaborador del alem¨¢n

"Robinho se ha recuperado f¨ªsica y an¨ªmicamente", argumenta el t¨¦cnico

Adem¨¢s de revelar el problema psicol¨®gico de Robinho, Schuster esboz¨® una t¨¢ctica in¨¦dita. Frente al Murcia desplegar¨¢ un medio centro con sentido organizativo (Gago), dos medias puntas (Guti y Sneijder), dos extremos (Robben y Robinho) y un punta (Ra¨²l). Los t¨¦cnicos del Madrid aseguran que la formaci¨®n se aproximar¨¢ a su ideal. "Creemos que hasta ahora no se ha reconocido el estilo ofensivo que Schuster pretende", dice uno de sus colaboradores; "la elecci¨®n de un medio campo con Gago, Sneijder y Guti implica un riesgo. Pero estamos seguros de que, eligiendo a los mejores pasadores, jugaremos mejor. Este equipo es mucho m¨¢s vistoso que el de Capello".

"Estamos buscando el regreso de Robinho", dijo Schuster; "contra el Murcia pensamos en ponerlo con Robben en las bandas. Necesitamos gente que haga el uno contra uno. El Murcia nos dejar¨¢ muy pocos espacios y nuestros extremos deber¨¢n aprovechar el poco que haya".

Desde que se recobr¨® de su lesi¨®n de abdominales y regres¨® precipitadamente para recibir al Roma en la Liga de Campeones, hace un mes, Robinho asisti¨® a su progresiva marginaci¨®n. Afectado por el resentimiento, tal vez opt¨® por orillarse hasta convertirse en algo parecido a un poliz¨®n en su propio club. Un hombre que prefer¨ªa salir por las ventanas antes que nadie le viera la cara. La situaci¨®n era extra?a trat¨¢ndose de Robinho, el jugador con m¨¢s talento del equipo y el hombre al que Schuster hab¨ªa catalogado como "fundamental" hace dos meses.

La desventura de Robinho desat¨® las especulaciones y los chismorreos en el seno del vestuario. Los jugadores no lograron explicarse ni el cambio de criterio del entrenador ni la rebeld¨ªa del brasile?o. "Debe de haber un tema personal entre ellos", comentaban. Una versi¨®n apunt¨® a un caso de indisciplina: al sentirse injustamente desplazado tras el fracaso en la Liga de Campeones, Robinho descuid¨® sus sesiones vespertinas de recuperaci¨®n. Esto le distanci¨® de Schuster, que aprovech¨® el buen estado f¨ªsico de Robben y Sneijder para represaliar al casquivano.

"Ser un jugador importante en el Madrid no significa jugar todos los partidos", explic¨® el t¨¦cnico ayer para argumentar la presencia de Robinho en el banquillo durante las ¨²ltimas dos jornadas; "contra el Sevilla hicimos cambios t¨¢cticos que funcionaron muy bien con Robben. Luego, decidimos mantener el esquema en Mallorca".

"A Robinho lo perjudic¨® volver ante el Roma sin haberse recuperado totalmente", dijo el t¨¦cnico; "pero sigue siendo igual de importante que antes. Mi opini¨®n sobre ¨¦l no ha cambiado".