Ministro de ley y orden

Corr¨ªa el a?o 2001, cuando los alcaldes metropolitanos de Barcelona, casi todos socialistas, se sublevaron contra los Gobiernos de Pujol y Aznar por la falta de polic¨ªas en sus ciudades. Eran tiempos en los que no hab¨ªa calendario para desplegar a los Mossos d'Esquadra y el Cuerpo Nacional de Polic¨ªa no cubr¨ªa sus plantillas. Todo eso gener¨® un clima de inseguridad ciudadana y los alcaldes advirtieron que no lo tolerar¨ªan.

Uno de los m¨¢s beligerantes fue el de L'Hospitalet de Llobregat (264.000 habitantes), Celestino Corbacho. La rebeli¨®n se desmoron¨® en cuanto el consejero de Interior catal¨¢n, Xavier Pom¨¦s, pact¨® con ¨¦l la llegada de 320 mossos a L'Hospitalet varios a?os antes de lo previsto, un trato preferencial que no tuvo ninguna otra ciudad vecina, ni siquiera Cornell¨¤, donde estaba de alcalde Jos¨¦ Montilla.

Corbacho conoci¨® a Zapatero en 2000, en la gestora previa al 35? congreso

En la calle de Nicaragua, sede de los socialistas catalanes, a¨²n se recuerda aquel pacto unilateral, algo que s¨®lo se explica por la obcecaci¨®n que siempre ha tenido el nuevo Ministro de Trabajo e Inmigraci¨®n por la seguridad ciudadana, de un lado, y por la defensa de los intereses de su ciudad, por otro. Y es que Corbacho ha planteado en numerosas ocasiones y sin complejos un discurso de "ley y orden" para impedir que la derecha se apropie de ¨¦l y para evitar que la inmigraci¨®n se convirtiera en un problema social en algunos barrios de L'Hospitalet, donde los reci¨¦n llegados rozan el 40% de la poblaci¨®n.

"Mi reto es gobernar el fen¨®meno con pol¨ªticas que respeten los derechos individuales, aunque la ciudad no puede ser para el ¨²ltimo que llegue", dijo ayer Corbacho a modo de declaraci¨®n de intenciones. "Mi objetivo es ser una sola comunidad plural, diversa, amplia, con una inmigraci¨®n legal y regulada con contrato de trabajo". El tono es mucho m¨¢s suave que el empleado en febrero de 2007, cuando el entonces alcalde afirm¨®: "La inmigraci¨®n est¨¢ creando una realidad nueva que nos hace estar a todos m¨¢s inseguros".

En su vertiente de ministro de Trabajo, Corbacho se ha marcado como prioridad el di¨¢logo social con sindicatos y patronal, as¨ª como la creaci¨®n de empleo, seg¨²n anunci¨® ayer en la visita a la Ciudad de la Justicia de L'Hospitalet y Barcelona. Se trata de un gran equipamiento situado a la entrada de Barcelona desde el sur que ilustra la enorme transformaci¨®n urban¨ªstica que se ha producido en la zona bajo el mandato de Corbacho.

Y es que el urbanismo en general y el ladrillo en particular siempre han sido una debilidad del ministro. Fue precisamente como teniente de alcalde de urbanismo de L'Hospitalet que inici¨® en 1983 su carrera pol¨ªtica, en la que el azar siempre le ha sonre¨ªdo. Si en 1994 se convirti¨® en alcalde fue porque dimiti¨® su antecesor, Juan Ignacio Pujana, acusado de corrupci¨®n. Pero al a?o siguiente despej¨® cualquier duda sobre su popularidad y logr¨® la primera de sus cuatro mayor¨ªas absolutas en unas elecciones municipales, convirtiendo L'Hospitalet en una de las ciudades donde los socialistas cosecharon mejores resultados.

Igualmente, Corbacho lleg¨® a presidente de la Diputaci¨®n de Barcelona en 2004, cuando Jos¨¦ Montilla fue nombrado ministro de Industria y Energ¨ªa. A algunos de sus ¨ªntimos ha confesado que nunca confi¨® en ser consejero del Gobierno catal¨¢n, pero s¨ª aspiraba a ocupar alg¨²n cargo en el Ejecutivo central. Por ejemplo, Secretario de Estado de Infraestructuras y, siendo muy so?ador, ministro de Fomento.

Su confianza arranc¨® en 2000, cuando despu¨¦s del batacazo electoral de Joaqu¨ªn Almunia, el PSOE cre¨® una comisi¨®n gestora hasta la celebraci¨®n del 35? congreso. Uno de los dos hombres que designaron los socialistas catalanes en ese sanedr¨ªn fue Corbacho. Y fue all¨ª donde el nuevo ministro de Trabajo e Inmigraci¨®n conoci¨® a Zapatero.

En ese proceso, el PSC apoy¨® de forma mayoritaria la candidatura ganadora y Corbacho desoy¨® los cantos de sirena para integrarse en la candidatura de Jos¨¦ Bono, que parec¨ªa la ganadora pero acab¨® derrotada. A partir de entonces, el nuevo ministro empez¨® a tejer una relaci¨®n muy cordial con Ferraz. Eso explica que el PSOE pensara en ¨¦l para encabezar una lista socialista al margen del PSC despu¨¦s del desconcierto que produjo la elaboraci¨®n del Estatut. No en vano, Corbacho procede de la Federaci¨®n Catalana del PSOE, una de las tres familias socialistas que derivaron en la creaci¨®n del PSC actual.