Atutxa intenta anular su condena al entender que un magistrado fue juez y parte en el proceso
La defensa del ex presidente del Parlamento vasco Juan Mar¨ªa Atutxa y de los miembros de la Mesa de esa C¨¢mara en 2003 Gorka Kn?rr y Kontxi Bilbao presentar¨¢ ante la Sala del Tribunal Supremo que les ha condenado por desobediencia un incidente de nulidad al considerar que el magistrado ponente de la resoluci¨®n, Manuel Marchena, debi¨® de abstenerse. El argumento que emplear¨¢ el letrado Alberto Figueroa es que Marchena fue nombrado el 25 de julio de 2003 fiscal jefe de la Secretar¨ªa T¨¦cnica del fiscal general del Estado, entonces Jes¨²s Cardenal. La querella contra los entonces miembros de la Mesa del Parlamento vasco fue impulsada por Cardenal y presentada por el teniente fiscal del Tribunal Supremo Jos¨¦ Mar¨ªa Luz¨®n Cuesta el 20 de junio de 2003 ante el Tribunal Superior Vasco. Marchena fue elegido para el cargo por el entonces ministro de Justicia, el popular Jos¨¦ Mar¨ªa Michavila.
Marchena lleg¨® a la secretar¨ªa t¨¦cnica despu¨¦s de que se presentara la querella por la fiscal¨ªa, y fuentes jur¨ªdicas han confirmado a este peri¨®dico que su firma no aparece en ninguno de los escritos presentados por la fiscal¨ªa durante los a?os que dur¨® la instrucci¨®n. Figueroa dijo que Marchena actu¨® como la "mano derecha" de Cardenal y ese hecho "invalida la imparcialidad con que act¨²a la sala". El Tribunal Supremo conden¨® a Atutxa, Kn?rr y Bilbao por su negativa a disolver el grupo heredero de la ilegalizada Batasuna en la C¨¢mara vasca.
?sta fue la principal novedad aportada por el letrado Figueroa, quien reiter¨® que presentar¨¢ un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional contra la sentencia del Supremo y que solicitar¨¢ la suspensi¨®n de su ejecuci¨®n. El fallo condena a los tres acusados a penas que van del a?o de inhabilitaci¨®n y cuatro meses de multa a raz¨®n de 100 euros diarios para Bilbao y Kn?rr, a los 18 meses y seis de multa por la misma cuant¨ªa para Atutxa.
Atutxa y Bilbao, que agradecieron los apoyos, declararon en una comparecencia: "No somos desobedientes (...) mantuvimos paralelamente dos dignidades, la personal y la institucional".
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