Cinco cuadros de Malevich vuelven a sus herederos
El Ayuntamiento de ?msterdam ha resuelto devolver cinco cuadros del pintor ruso Kasimir Malevich a sus herederos, despu¨¦s de que ¨¦stos acudieran a los tribunales en Estados Unidos, donde residen, para reclamarlos. Parte de la obra del inventor del suprematismo (derivaci¨®n del cubismo) pertenece a la colecci¨®n del museo municipal Stedelijk de la capital holandesa. Uno de sus antiguos directores compr¨® 68 telas y dibujos en 1958 a un banquero alem¨¢n, pero los descendientes del artista siempre han mantenido que ¨¦ste s¨®lo los ten¨ªa en dep¨®sito. El acuerdo definitivo ha tardado casi cuatro d¨¦cadas en alcanzarse.
La colecci¨®n de malevichs del Stedelijk es una de las m¨¢s importantes del mundo. Aunque en este caso no se tratara de devoluciones en virtud de los robos efectuados a familias jud¨ªas por parte de los nazis, las obras del pintor ruso sufrieron tambi¨¦n los avatares de la II Guerra Mundial. Malevich se encontraba en Berl¨ªn en 1927 presentando una exposici¨®n, cuando tuvo que regresar a la entonces URSS. Su intenci¨®n era viajar de nuevo a Alemania al a?o siguiente, pero las autoridades de Mosc¨² le negaron el visado. Es m¨¢s, ya no se le permiti¨® abandonar nunca m¨¢s su tierra.
Periplo
Tras la marcha de Malevich a Mosc¨², la colecci¨®n en litigio pas¨® primero por el Museo de Hannover. En 1935, Alexander Dorner, director de este museo, cedi¨® de forma temporal una parte al MOMA de Nueva York. Ante la amenaza nazi, Dorner huy¨® a EE UU con un dibujo y un cuadro del pintor en el equipaje. El resto qued¨® en manos del banquero Hugo H?ring. En su casa, en 1951, fue donde vio los cuadros Willem Sandberg, entonces director del Museo Stedelijk. Seg¨²n ha dicho, los compr¨® "para que no se dispersaran". El banquero recibi¨® por ello 120.000 florines de la ¨¦poca, unos 55.000 euros.
Si bien la transacci¨®n fue legal, los descendientes de Malevich alegaron que H?ring s¨®lo era el guardi¨¢n de las obras. De hecho, el MOMA les devolvi¨® en 1999 un lienzo. Otro tanto hizo el Museo Busch-Reisinger de Cambridge (Massachussets), donde el director de la galer¨ªa de Hannover hab¨ªa depositado las obras sacadas de Alemania. Tras varias d¨¦cadas de debates, el Consistorio de ?msterdam ha optado por hacer algo parecido al entregar a la treintena de descendientes de Malevich cinco de los mejores cuadros de su colecci¨®n.
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