Mas blinda a su 'guardia pretoriana' frente al asalto de los renovadores
Mad¨ª, Homs y Pujol Ferrusola mantendr¨¢n sus responsabilidades en CDC
Artur Mas repartir¨¢ nuevas cartas, pero no mover¨¢ fichas en el denominado pinyol de Converg¨¨ncia Democr¨¤tica (CDC). Esta guardia pretoriana, tan cuestionado por amplios sectores del partido y de la que Mas se resiste a emanciparse, la integran David Mad¨ª, responsable de estrategia y comunicaci¨®n; Quico Homs, encargado del proyecto de Casa Grande del Catalanismo, y Oriol Pujol Ferrusola, portavoz del grupo parlamentario.
El viernes, sin ir m¨¢s lejos, el l¨ªder nacionalista ya dej¨® claras sus intenciones: "Yo siempre he dicho que la incorporaci¨®n de gente nueva en Converg¨¨ncia no ha de ir en contra de quienes ya tienen funciones en el partido".
'Barones' de CDC piden que Mas ampl¨ªe el c¨ªrculo de toma de decisiones
Mad¨ª, Homs y Pujol mantendr¨¢n sus responsabilidades a partir del congreso de CDC del pr¨®ximo julio. Tambi¨¦n lo har¨¢n, con toda probabilidad, Germ¨¤ Gord¨® en funciones de gerente y Carles Llorens como titular de relaciones internacionales. Quiz¨¢ Mad¨ª se desprenda de la portavoc¨ªa del partido para cederla a Felip Puig, que en ese mismo c¨®nclave se convertir¨¢ en el n¨²mero dos de la formaci¨®n con el cargo de secretario general adjunto.
Diversos dirigentes de CDC han emplazado en las ¨²ltimas semanas a Mas a despegarse de su guardia pretoriana y ampliar el c¨ªrculo de la toma de decisiones, con la incorporaci¨®n de personas que representen las distintas familias ideol¨®gicas del partido. En este sentido se han expresado el alcalde de Sant Cugat, Llu¨ªs Recoder, y el presidente del grupo municipal de CiU en el Ayuntamiento de Barcelona, Xavier Trias. Ambos son las caras visibles de esta corriente cr¨ªtica que apuesta por la renovaci¨®n, pero numerosos barones territoriales se han quejado repetidamente de su escaso peso decisorio, del exiguo papel que tiene la ejecutiva de CDC y de la muralla que a veces levantan Mad¨ª, Homs y Pujol Ferrusola en torno a Mas. Estos dirigentes achacan al pinyol alguno de los errores cometidos en la anterior campa?a electoral, como el DVD contra el tripartito y el compromiso ante notario de no pactar con el Partido Popular.
Mas est¨¢ decidido a ampliar su c¨ªrculo de colaboradores m¨¢s estrechos, sobre todo con dirigentes procedentes del ¨¢mbito municipal, el ¨²nico que actualmente acapara poder institucional tras la p¨¦rdida del Gobierno catal¨¢n. Alcaldes como Llu¨ªs Recoder, de Sant Cugat; Santi Vila, de Figueres, y Ferran Bel, de Tortosa, asumir¨¢n nuevas responsabilidades con vistas a su proyecto de Casa Grande del Catalanismo.
Sin embargo, el l¨ªder de CDC ya intent¨® en el pasado una maniobra semejante con resultados desiguales. Le sali¨® bien cuando, tras un periodo de notable distanciamiento, incorpor¨® a Felip Puig en el denominado pinyol. Pero, de la misma manera, se resisti¨® a distanciarse de Mad¨ª, Homs y Pujol cuando buena parte de los barones se lo reclam¨® en una ronda de conversaciones que el propio Mas se encarg¨® de publicitar a bombo y platillo tras las auton¨®micas de 2006.
Mas hizo caso omiso de aquellos mensajes y ahora debe afrontar que Recoder y Trias le exijan lo mismo, pero a cara descubierta y en v¨ªsperas de un fundamental congreso. El l¨ªder convergente asegura que ha aprendido la lecci¨®n y que tras el congreso de julio diversos dirigentes ganar¨¢n peso en el partido. "Espero que ahora s¨ª, que estas personas, no s¨®lo una, sino gente diversa, vea que es un momento en que hay que fortalecer y enriquecer nuestro proyecto de partido y de pa¨ªs", declar¨® el viernes.
No obstante, diversos dirigentes consultados por este peri¨®dico temen que, una vez m¨¢s, las palabras se las lleve el viento y tras la cita de julio Mas vuelva a encerrarse en su torre de marfil acompa?ado de sus asesores tradicionales y con una ejecutiva mucho m¨¢s plural, pero con reducida capacidad de decisi¨®n. "Aqu¨ª todo se lo cocinan entre unos pocos. Y eso se tiene que acabar, porque se han cometido errores, pero esos pocos no quieren asumirlos", sentencia un destacado dirigente territorial. Y pone como ejemplo de esta l¨ªnea continuista y equivocada dos hechos. El primero, que Quico Homs haya asumido la direcci¨®n de la principal ponencia del congreso, la que versar¨¢ sobre la refundaci¨®n del partido. Y el segundo, que Mas dejara a Puig sin papel medi¨¢tico alguno cuando le nombr¨® n¨²mero dos de la formaci¨®n porque Mad¨ª insisti¨® en continuar siendo portavoz de Converg¨¨ncia.
DAVID MAD?
David Mad¨ª ocupa una secretar¨ªa ejecutiva en Converg¨¨ncia, org¨¢nicamente por debajo de los seis vicesecretarios generales. En concreto la de Estrategia y Comunicaci¨®n, cargo que le otorga un control absoluto sobre todo lo que se decide en la sede de la calle de C¨°rsega. Mad¨ª es el brazo derecho de Artur Mas, sobre el que tiene un gran ascendiente. Se vanagloria de "saber todo" lo que se cuece en la pol¨ªtica catalana. Muchos barones empiezan p¨²blicamente ahora a cuestionarle, a veces, tras aplaudirle algunas decisiones.
ORIOL PUJOL
Oriol Pujol es el quinto hijo del ex presidente de la Generalitat y el ¨²nico que se dedica a la pol¨ªtica activa. Mas le nombr¨® en octubre portavoz del grupo de Converg¨¨ncia i Uni¨® en el Parlament, apartando de esta responsabilidad a un carism¨¢tico dirigente como Felip Puig. Una pol¨¦mica decisi¨®n que, al tiempo, situ¨® a Oriol en la carrera para suceder a Mas. Su inexperiencia en el cargo le ha jugado alguna mala pasada. CiU perdi¨® por su culpa una votaci¨®n parlamentaria sobre el reconocimiento oficial de la independencia de Kosovo.
QUICO HOMS
Francesc Homs se ha curtido pol¨ªticamente a la sombra de Jordi Pujol, con quien despacha a menudo, y de Artur Mas. Fue uno de los ponentes del Estatuto catal¨¢n durante su tr¨¢mite en el Parlament. Despu¨¦s aspir¨® a tener un papel destacado en la negociaci¨®n de Madrid, pero Duran le cerr¨® el paso. Desde entonces le persigue la etiqueta de ambicioso. Mas le considera un eficiente colaborador. Le ha encargado desarrollar el proyecto de Casa Grande del Catalanismo y dirigir la ponencia sobre refundaci¨®n en el congreso.
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