Delicias niponas

Ahora sabr¨¢n los escoceses lo que sintieron los espa?oles al comprobar que algunos de los mejores guitarristas de flamenco eran japoneses. O el escozor con el que debi¨® de recibir la industria automovil¨ªstica alemana que las marcas niponas irrumpieran en el exclusivo mercado de los coches de lujo. Si los escoceses imaginaban que uno de sus productos m¨¢s reputados, como el whisky, estaba a salvo de los competidores asi¨¢ticos, la m¨¢s prestigiosa revista sobre este destilado, The Whisky Magazine, ha venido a sacarles de su error. "Complejo, armonioso y magistral". As¨ª se describe en sus p¨¢ginas el Yoichi de 20 a?os. Y los expertos, implacables, lo consideran el mejor whisky del mundo.

La historia del Yoichi est¨¢ relacionada con la emigraci¨®n, como tantas otras epopeyas del mundo de los negocios. En 1918, el joven Masakatsu Taketsuru, descendiente de una familia de fabricantes de sake, viaj¨® hasta la remota Escocia desde el Jap¨®n remoto (todo depend¨ªa de la perspectiva desde la que se contemplara el viaje) para aprender el arte de la destilaci¨®n del whisky. De entonces aqu¨ª, el producto de la destiler¨ªa que estableci¨® el aprendiz de regreso a su pa¨ªs ha superado al de sus maestros. Con el agravante de que sus maestros no aprendieron de Masakatsu Taketsuru a destilar sake, cerrando as¨ª la puerta a cualquier reciprocidad. Ahora que Jap¨®n se ha convertido en potencia mundial del whisky escoc¨¦s, Escocia hubiera podido responder con un sake mejor que el de Jap¨®n.

Quiz¨¢ la moraleja m¨¢s evidente de la historia de Masakatsu Taketsuru es que el esfuerzo y la amplitud de miras siempre obtienen recompensa. Pero, bien mirado, tal vez no sea la ¨²nica moraleja. Porque si, pongamos por caso, apareciese un japon¨¦s deseoso de aprender reposter¨ªa en Mallorca, en Estepa o en Jijona, ya sabemos d¨®nde habr¨ªa que ir a buscar en el plazo de un siglo las mejores ensaimadas, los mantecados m¨¢s suaves o el turr¨®n m¨¢s dulce. Y a la vista de lo ocurrido con el whisky, habr¨ªa que exigirle a ese japon¨¦s una receta para que, transcurrido el tiempo, Mallorca, Estepa y Jijona pudiesen destacar en la elaboraci¨®n de delicias niponas.