El choque con San Gil refuerza al polo anti-Rajoy que amenaza al l¨ªder del PP

Cada vez m¨¢s dirigentes del PP, especialmente en el entorno del l¨ªder, Mariano Rajoy, empiezan a tener claro que la crisis provocada por el portazo de Mar¨ªa San Gil tendr¨¢ mucho recorrido. La ponencia pol¨ªtica -cuyo contenido es m¨¢s duro que nunca contra los nacionalistas- empieza a parecer a este grupo m¨¢s bien una excusa que aglutina a un polo creciente de anti-marianistas.

"Si no hay candidatura alternativa es porque no hay candidato, al menos de momento, pero el caldo de cultivo est¨¢ claro, el partido est¨¢ dividido", sentencia un relevante diputado, en una tesis muy extendida ayer en los pasillos del Congreso habitados por populares, donde se vive con enorme preocupaci¨®n la deriva de la situaci¨®n interna y, obviamente, no se habla de otra cosa.

El presidente pide a los dirigentes que no hablen "ni se metan en l¨ªos"

La direcci¨®n conf¨ªa en que San Gil rectifique. No lo har¨¢, dice su entorno

El c¨ªrculo de Rajoy ve a Mayor detr¨¢s de una conspiraci¨®n para derribarle

Detr¨¢s de San Gil, asume el equipo de Rajoy, est¨¢ Jaime Mayor, que ayer ejerci¨® de portavoz de la presidenta vasca y realiz¨® unas dur¨ªsimas declaraciones contra el l¨ªder: "En mi partido hay quienes realmente quieren cambiar la estrategia. Mar¨ªa y yo y otras muchas personas vamos a dar la batalla. El PP tiene que decidir entre rendici¨®n o resistencia. Yo apuesto por la resistencia" frente a los nacionalistas.

En el entorno de Rajoy se da por hecho que Mayor est¨¢ no s¨®lo detr¨¢s de la dirigente vasca sino que encabeza una conspiraci¨®n para derribar al l¨ªder. Con el apoyo de medios conservadores como la Cope y El Mundo, sostienen los marianistas, este grupo pretende debilitar el liderazgo de Rajoy e incluso forzarlo a dimitir, algo que no va a suceder en ning¨²n caso, se?alan los que han hablado con ¨¦l estos d¨ªas.

San Gil se ha unido as¨ª al polo de los enemigos de Rajoy, liderados por Esperanza Aguirre, y en el que muchos empiezan a colocar a ?ngel Acebes y todo el aznarismo, desplazado del poder en el nuevo PP.

La distancia entre la dirigente vasca y el l¨ªder ha quedado en evidencia ahora, sobre todo despu¨¦s de la conversaci¨®n que ambos mantuvieron el lunes en la que ¨¦l no logr¨® convencerla de que rectificara ni siquiera despu¨¦s de demostrarle que la ponencia ha quedado al final tal como ella la redact¨®.

Sin embargo, hay un dato que demuestra que esa distancia viene de lejos. La jefa de gabinete de San Gil, Olivia Bandr¨¦s -hija de Juan Mari Bandr¨¦s, ex l¨ªder de Euskadiko Ezkerra-, su aut¨¦ntica mano derecha, se ha negado a firmar el aval de Rajoy para el congreso de junio. A Bandr¨¦s, compromisaria guipuzcoana, el gerente de su sede provincial le solicit¨® la firma hace dos semanas, como han hecho los gerentes en toda Espa?a para enfado de algunos dirigentes. San Gil, que p¨²blicamente ha mostrado su apoyo a Rajoy, s¨ª firm¨® el aval, pero su mano derecha se neg¨®. Bandr¨¦s confirm¨® ayer a EL PA?S este extremo en conversaci¨®n telef¨®nica, aunque no quiso hacer ning¨²n tipo de declaraci¨®n.

Este dato de la persona de m¨¢xima confianza de San Gil muestra hasta qu¨¦ punto llega la distancia entre el mundo de la presidenta vasca y el del l¨ªder del PP. Rajoy sigue confiando, sin embargo, en la posibilidad de que San Gil rectifique, aunque ya ha anulado el acto que ten¨ªa previsto con ella el jueves en Bilbao porque San Gil ha pedido unos d¨ªas para reflexionar. Ella comparecer¨¢ p¨²blicamente en breve, se?alan en su entorno, para explicar su posici¨®n, pero en ning¨²n caso para rectificar. No es un problema con el texto, sino de desconfianza en Rajoy y en el nuevo PP que est¨¢ dise?ando.

El l¨ªder, mientras tanto, ha ordenado a los suyos que no hablen para no fomentar la batalla interna. "A todos los que me preguntan les digo que no hablen de esto, que no se metan en l¨ªos. Yo estoy bien, con responsabilidad. Pero soy el presidente del partido y no puedo estar respondiendo a todo lo que pasa y lo que pudiera pasar", sentenci¨® en una conversaci¨®n informal con periodistas en el Congreso.

Rajoy, con rostro de gran preocupaci¨®n y abatimiento, trat¨® de quitar hierro con alguna iron¨ªa de las suyas: "Bueno, ya s¨®lo queda la mitad de lo que quedaba", se?al¨® en referencia al tiempo que ha transcurrido desde que se convoc¨® el congreso.

Sin embargo, el acoso al l¨ªder es casi diario. Adem¨¢s de Jaime Mayor, especialmente agresivo con su presidente, ayer reaparecieron Ignacio Gonz¨¢lez, vicepresidente de la Comunidad de Madrid y mano derecha de Esperanza Aguirre. Se?al¨® que "no hay que parecerse al PSOE para pactar con los nacionalistas", ya que se pueden lograr acuerdos con ellos dentro del marco constitucional "y no sobre otras cuestiones fundamentales s¨®lo por tener el poder".

Dos personas cercanas al l¨ªder como Jorge Moragas y Esteban Gonz¨¢lez Pons, que est¨¢n en todas las quinielas como miembros de su equipo, s¨®lo tuvieron buenas palabras para San Gil. De hecho, ayer se lleg¨® al absurdo de que los otros dos miembros de la ponencia pol¨ªtica, Alicia S¨¢nchez Camacho y Jos¨¦ Manuel Soria, mostraron su apoyo y respeto a la decisi¨®n "personal" de San Gil de no firmar el texto despu¨¦s de insistir varias veces en que el documento estaba "consensuado al cien por cien con ella".

Mientras, algunos en el PP vasco, especialmente los alaveses, comienzan a decir en voz baja que San Gil debe rectificar o dejar paso a otro liderazgo.