La nueva hornada de 'start-ups' espa?olas
Tres proyectos espa?oles triunfan en el concurso europeo Start-up 2.0 - Bubok, Planetaki y Wolpy se imponen a 300 nacientes empresas de 22 pa¨ªses - Su apuesta: publicaci¨®n bajo demanda y agregaci¨®n social de contenidos
Acaban de nacer. Entre las tres, no suman ni medio a?o de vida y el fundador m¨¢s longevo no sobrepasa los 33 a?os. Les falta experiencia, pero les sobra ambici¨®n y olfato de ¨¦xito. Son tres de los 10 finalistas seleccionados entre m¨¢s de 300 start-ups de 22 pa¨ªses, desde Portugal a Ucrania, en el concurso ya conocido como la Eurovisi¨®n de la web 2.0. Potencias tecnol¨®gicas como Israel, pa¨ªses con s¨®lidos mercados de capital riesgo como el Reino Unido o Alemania, y econom¨ªas emergentes de Europa del Este pujaban por un puesto. Las espa?olas Bubok, Planetaki y Wolpy lo han conseguido.
Miguel Abad y Ana Mar¨ªa Ram¨®n a¨²n no se lo creen. Son los m¨¢s j¨®venes, 28 y 26 a?os respectivamente. ?l desde M¨¢laga y ella desde Z¨²rich se las han arreglado para levantar un proyecto del que se hablar¨¢ mucho durante 2008: Wolpy, una web donde crear un mapa personalizado de viajes y compartir las experiencias con otros visitantes. "Est¨¢ a caballo entre una red social y una gu¨ªa de viajes interactiva con recomendaciones de lugares que explorar en todo el mundo", explica Ana Mar¨ªa. El comienzo es prometedor: en apenas un mes han alcanzado 515 registros y su base de datos acumula 4.000 ciudades y m¨¢s de 450 recomendaciones.
"Muy intuitivo"
"Hemos apostado por un dise?o sencillo, muy intuitivo con el mashup de Google Maps, y estamos recibiendo muchas sugerencias de los miembros sobre c¨®mo hacer evolucionar el servicio", asegura Abad. Los propios visitantes decantar¨¢n el ¨¦nfasis hacia la red social o la aplicaci¨®n colaborativa. Wolpy expande el hueco abierto por servicios como Dopplr, centrado en viajeros de negocios.
El proyecto fue uno de los seis seleccionados en el concurso del Barcelona Digital Global Congress, que se celebra esta semana en Barcelona.
Planetaki se gan¨® su puesto gracias a los votos de los internautas. Aspira a innovar en el terreno de los agregadores de feeds, dominado por Bloglines, Netvibes y Google Reader. "Usaba Bloglines desde hace cuatro a?os, siempre pens¨¦ que se podr¨ªan mejorar, hoy los agregadores son demasiado complejos, s¨®lo los geeks los utilizan a fondo", dice Javier Ca?ada, fundador de la compa?¨ªa y experto en usabilidad. Planetaki permite crear y compartir planetas de webs, condensando en una sola p¨¢gina blogs, peri¨®dicos digitales, podcasts y ¨¢lbumes de fotos. No se pueden organizar en carpetas ni exportar ni buscar. Es la simplicidad llevada al extremo. "Est¨¢ dise?ada para los que no saben ni lo que es un feed".
Bastaron dos meses para convencer a 1.500 personas de usar la aplicaci¨®n como lector de contenidos, indexar m¨¢s de 4.500 webs y lograr 8.000 visitantes ¨²nicos mensuales. Bernardo Hern¨¢ndez, director mundial de geomarketing de Google, hizo de inversor invitado. "Le conoc¨ª en mi etapa de 11870.com. Me plant¨¦ en su oficina y le dije: '?ste es el dinero que tengo, ¨¦ste es el que necesito y mi condici¨®n es clara: yo llevo toda la gesti¨®n y tomo las decisiones", explica Ca?ada. Funcion¨®. La bendici¨®n de Hern¨¢ndez le sirvi¨® para contratar al programador ingl¨¦s Sam Lown y lanzar el proyecto. Ahora descifra cu¨¢les ser¨¢n los pr¨®ximos pasos, entre fuentes de ingresos y traducci¨®n de la web a varios idiomas.
La tercera promesa, Bubok, lleva un mes en marcha pero transmite una sensaci¨®n de experiencia innata. Su fundador, ?ngel Mar¨ªa Herrera, ha trasladado a Espa?a la publicaci¨®n de libros bajo demanda, un modelo probado en otros pa¨ªses a cargo de Lulu, Blurb y CreateSpace. "Venimos del mundo editorial, es nuestro diferencial. Queremos crear un gran altavoz para escritores noveles y consagrados". Cualquiera puede publicar su libro en Bubok, en formato digital o en papel, escoger el precio y embolsarse el 80% de los beneficios. Cuentan con 3.000 miembros registrados y 700 obras, algunas de autores consagrados como el novelista Alberto V¨¢zquez-Figueroa y el emprendedor y ex gur¨² de Apple Guy Kawasaki.
Recibi¨® el espaldarazo financiero de 360.000 euros para empezar con buen pie y aupar su plantilla a 12 empleados. Su estrategia es doble: venta de libros por un lado y servicios de maquetaci¨®n e impresi¨®n personalizada por otro. El objetivo es ir m¨¢s all¨¢ del ¨¢mbito literario y convertir Bubok en una plataforma de venta de todo tipo de documentos, desde tesis doctorales a libros caseros de recetas de cocina. Los pr¨®ximos pasos est¨¢n definidos: m¨¢s funcionalidades sociales, "foros, comentarios, recomendaciones", apunta Herrera, "y el salto a Latinoam¨¦rica".
La pasada edici¨®n de Start-up 2.0 descubri¨® algunos de los proyectos de Internet m¨¢s brillantes de Europa. Desde las espa?olas Panoramio, 11870 y nVivo a la francesa Trivop o la israel¨ª 5min, consolidada en enero con cinco millones de d¨®lares de inversi¨®n.
Del v¨ªdeo a la red social
Para Jose Antonio del Moral, cofundador de Ya.com y responsable de Alianzo, organizadora del concurso junto con La Caixa, el protagonista en 2007 fue el v¨ªdeo. Este a?o han sido las redes sociales. "El problema es su rentabilidad. Pasaremos hambre durante mucho tiempo hasta dar con modelos viables".
El otro resquicio de duda est¨¢ en las ideas. ?Podr¨¢ Europa innovar sin convertirse en un mero espejo de Silicon Valley? Michael Arrington, fundador de TechCrunch, lo deja claro en su blog: "No eres nadie si no te ha surgido un clon en Alemania". Al otro lado del Atl¨¢ntico, la visi¨®n es diferente: "El fallo es de las start-ups americanas", afirma Ana Mar¨ªa, "no se preocupan por la internacionalizaci¨®n y dejan huecos en Europa".
BDGC: www.bdigitalglobalcongress.net
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.