Public Enemy abre con fuerza la gran bacanal del directo

Casi 100.000 personas se dejar¨¢n caer este fin de semana por alguno de los tres festivales que se celebran en Espa?a (Primavera Sound, en Barcelona, y Getafe Electric Weekend y Cultura Urbana en Madrid). Una fiesta simult¨¢nea que funciona como gran aperitivo de un verano en el que se espera la celebraci¨®n de m¨¢s de 90 citas con la m¨²sica en directo.

El Primavera, el primero en arrancar (los eventos madrile?os comienzan hoy), se apunt¨® ayer el primer exitazo de convocatoria con Public Enemy, que repas¨® de pe a pa su m¨ªtico ¨¢lbum It Takes A Nation Of Millions To Hold Us Back. Parec¨ªa una ceremonia. Con veinte a?os a las espaldas, el ¨¢lbum es m¨¢s que un cl¨¢sico del rap apocal¨ªptico que va decapitando t¨ªteres con un especial apego por las proclamas contra el FBI y los medios de comunicaci¨®n.

Los raperos ten¨ªan a todos en el bolsillo antes de empezar. Con esta ventaja, no hac¨ªa falta m¨¢s que dejarse llevar. La complicidad con el p¨²blico fue total y las rimas iban y ven¨ªan desde el escenario a la grada con el pu?o cerrado en alto como se?a de identidad combativa. Poses militares de transfondo a modo de baile y un no parar que dej¨® reventadas las c¨¢maras de los tel¨¦fonos m¨®viles. Pues eso, que arrasaron con lo suyo tan lleno de fuckings. Vista la reacci¨®n de la gente, el revival se sald¨® sin ning¨²n aire de oportunismo. Lo sorprendente es que dejaran p¨²blico para otros grupos que actuaban a la misma hora, como British Sea Power o Shipping News.

Public Enemy compiti¨® en protagonismo con Portishead, que no se amilanaron ante el embate rabioso de los primeros. Con el tr¨ªo de Bristol, el p¨²blico ni siquiera se plante¨® la posibilidad de decisi¨®n. Hacia la medianoche, toda la atenci¨®n estaba puesta en ellos. Por si fuera poco, hoy repiten actuaci¨®n, pero en plan intimista en el auditorio del F¨®rum.

Pero si todo tiene un principio, puede decirse que el Primavera arranc¨® en serio cuando los neoyorquinos MGMT subieron al escenario Rockdelux y abrieron con Weekend wars. Pese a la hora, no pasaban de las 19.30, el ambiente era notable en el parque del F¨®rum. El toque psicod¨¦lico y la puntual ca?a sin excesos de Andrew Vanwynngarden y Ben Goldwasser funcion¨® para calentar motores. La banda de Brooklyn interpret¨® temas como Future reflections y Electric feel, pr¨®logo de uno de sus mayores ¨¦xitos, Time to pretend, recibido con entusiasmo por la superecl¨¦ctica tribu indie y afines.

Aunque su actuaci¨®n son¨® a apertura oficial, grupos de la escena local como The Marzipan Man -una agradable sorpresa- y Tachenko recib¨ªan con anterioridad a los espectadores m¨¢s madrugadores que quer¨ªan amortizar su entrada hasta el m¨¢ximo. Entre el p¨²blico del Primavera se nota ya un evidente relevo generacional, aunque los reci¨¦n llegados todav¨ªa se dan la mano con los veteranos. La experiencia festivalera se percibe muy pronto. A los m¨¢s avezados, por ejemplo, no se les escapa que antes de empezar la marcha hay que hacer acopio de tickets de bebidas, porque las colas de noche son insoportables. O lo que es lo mismo, tonto el ¨²ltimo.