O¨ªdos sordos al Consejo de Europa
El Consejo de Europa aprob¨® hace 15 a?os un cat¨¢logo de recomendaciones para los periodistas -en particular- y para los medios de comunicaci¨®n -en general- que deber¨ªan ser aplicados por los Estados. Son principios ¨¦ticos agrupados en un documento titulado C¨®digo Deontol¨®gico Europeo de la Profesi¨®n Period¨ªstica. Pero no todos los pa¨ªses los han hecho suyos. Espa?a es uno de ellos.
El Gobierno espa?ol (de cualquier signo, trat¨¢ndose de un documento de 1993) ha dado la espalda a este c¨®digo con la misma rutina con la que ignora otras recomendaciones del Consejo de Europa. En saco roto ha ca¨ªdo, por ejemplo, la creaci¨®n de un Consejo Audiovisual que regule los aspectos t¨¦cnicos y los contenidos de la radio y la televisi¨®n. Espa?a es uno de los pocos pa¨ªses de la UE que tampoco ha desarrollado normas para regular la transparencia informativa de las administraciones.
La cuesti¨®n es si es necesaria una ley sobre derechos y deberes de los periodistas. El catedr¨¢tico Manuel N¨²?ez Encabo lo explica: "Frente a las propuestas coyunturales en torno a la libertad de expresi¨®n, como la del caso Telma, se sacan conclusiones generales. ?ste es un m¨¦todo equivocado. De lo que dice cada sentencia no se puede llegar a algo general. Es al rev¨¦s. Hay que empezar por planteamientos globales que enmarquen el tratamiento de la libertad de expresi¨®n y el derecho a la informaci¨®n".
El Consejo de Europa deja claro que la informaci¨®n no es una actividad normal. Es un derecho fundamental y sus titulares son los ciudadanos. A ellos corresponde precisamente el derecho a exigir que la informaci¨®n que se le suministra se realice con veracidad y honestidad. Tampoco las empresas period¨ªsticas son normales. Son "especiales" desde el punto de vista socioecon¨®mico, ya que sus objetivos empresariales deben quedar limitados "por las condiciones que deben hacer posible la prestaci¨®n de un derecho fundamental", porque ni los editores o propietarios de los medios ni los periodistas "deben considerarse due?os de la informaci¨®n".
En esta l¨ªnea, especifica que ni la calidad de las informaciones o de las opiniones deben estar mediatizadas por el mero hecho de buscar m¨¢s lectores, oyentes o espectadores, ni tampoco con el ¨²nico prop¨®sito de aumentar los ingresos por publicidad. Y agrega que el tratamiento ¨¦tico de la informaci¨®n exige que se considere como destinatarios a las personas y no a las "masas".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.